Por José Maggi
TOGNOLI DECLARO, NEGO RESPONSABILIDADES Y QUEDO DETENIDO EN EL AEROPUERTO
Se quedó a solas con su conciencia
El ex jefe de la policía provincial está alojado en la sede de la Policía de Seguridad Aeroportuaria. El juez tiene 10 días hábiles para resolver la situación procesal. El abogado defensor pedirá hoy la excarcelación.
Por José Maggi
Eduardo Jauchen quiere apurar la excarcelación, para evitar que Tognoli se quiebre.
Imagen: Alberto Gentilcore
El ex jefe de la Policía santafesina Hugo Tognoli declaró ayer ante la fiscal federal Liliana Bettiolo y el juez Carlos Vera Barros. Sin imputarle una figura penal tipificada, se lo indagó por su colaboración con el narco Carlos Ascaini, quien según tiene constatado la Policía de Seguridad Aeroportuaria, le consultó por varios vehículos que lo seguían, y que justamente pertenecían a esa fuerza. Los pesquisas aseguran que la clave de ingreso al sistema, pertenece al ex jefe desplazado. Al concluir el trámite, el magistrado decidió que permaneciera detenido. La expectativa también está puesta en el rol de la fiscal Liliana Bettiolo, que podría pedir nuevas indagatorias en los próximos días.El comisario Tognoli pasó su segunda noche de detención --la primera en Rosario--, encerrado solo en un calabozo en la base de la Policía de Seguridad Aeroportuaria, ubicado en el Aeropuerto Internacional Islas Malvinas. "Está pensando como será su futuro, y seguramente con el correr de las horas diga algo más que lo 'buen policía que fue durante treinta años'. Ayer, por ejemplo habló de las limitaciones que el poder político le había marcado. Seguro con el correr de los días se decide a hablar. Y con ello, se abrirá una gran abanico de posibilidades", confió a este diario una alta fuente de la investigación.
Seguro de estar frente a una situación de desgaste emocional para su defendido, Eduardo Jauchen planteará hoy mismo la excarcelación de su patrocinado, por la falta de elementos en su contra.
Al retirarse ayer cerca de las 14 de los tribunales de Oroño al 900, el defensor consideró ante la prensa que "no hay elementos para sustentar" una acusación y que todo es "muy confuso".
En diálogo con Rosario/12, la representante del Ministerio Público reconoció que "Tognoli aceptó declarar y contestar preguntas, aunque negó todas las imputaciones que se le realizaron, lo que corresponde como su defensa material".
La fiscal dijo que se le realizaron preguntas en relación al hecho imputado que consistió en la presunta colaboración a Carlos Ascaíni cuando era investigado por presunta actividad de narcotráfico. Todo giró en torno al hecho imputado.
De acuerdo a fuentes judiciales consultadas, "será el juez el que tendrá que tipificar el delito, y lo hará en el momento en que resuelva su situación procesal, que son justamente 10 días hábiles".
Tognoli había llegado a media mañana a los tribunales federales en medio de un dispositivo diseñado por la Tropa de Operaciones Especiales (TOE) que apuntó a despistar a los reporteros para evitar que se llevaran en sus cámaras la foto de Tognoli en condición de detenido.
Sin embargo, la lluvia tediosa de la mañana no alejó a los reporteros que estaban apostados en los dos ingresos de los tribunales federales para obtener la imagen buscada: Hugo Tognoli, hasta el viernes pasado jefe de la Policía de Santa Fe, ingresando esposado a la sede judicial, donde el juez de Instrucción Nº 3 Carlos Vera Barros debía tomarle declaración después de que se hubiese entregado la noche del domingo, cerca de las 23, en la sede del Ministerio de Seguridad provincial. Allí quedó detenido, en manos de integrantes de la Tropa de Operaciones Especiales (TOE).
El ex jefe de la Policía de Santa Fe pudo evitar que lo retrataran en su condición de detenido al llegar. Poco antes de las 10, una combi identificada con esa fuerza pasó por Alvear, donde estaban apostados los reporteros, dobló por Córdoba, tomó Oroño y estacionó frente a la sede principal del Tribunal. Detrás estacionó un auto del que bajó el abogado defensor de Tognoli, Eduardo Jauchen. De la combi descendió un efectivo de la TOE y se quedó parado de espaldas a la puerta del vehículo y frente a la puerta del edificio. Transcurridos unos minutos, por el otro ingreso, una camioneta Ford gris con vidrios polarizados entró por la puerta trasera y se sospecha que Tognoli iba allí. Su salida de los tribunales fue menos cuidada: se lo pudo ver con sus esposas colocadas tapadas discretamente con una campera sobre sus manos. Quien iba sentado a su lado era nada menos que el hombre que lo viene investigando desde hace más de un año: el comisionado de la PSA Fernando Telpuk.
Aclaración de Sola
El jefe de la policía provincial Cristian Sola aclaró ayer su frase --que se iba a ocupar "personalmente" del periodista José Maggi-- publicada en el diario La Capital. Sola indicó que todo fue producto de la "mala interpretación de una frase desafortunada de mi parte. Lejos de mí amenazar o amedrentar, lo conozco a Maggi. No entendí en ese momento la consulta y cuando me referí a hablar personalmente con él es porque siempre tuvimos un buen diálogo". "Puesta en este contexto, la frase no me favorece en nada", analizó y aclaró que habló con representantes de Rosario/12 y con el Sindicato de Prensa de Rosario. "Nunca tuve una situación de este tipo porque no es mi personalidad", aseguró.
GARRE RESPONDIO A BONFATTI, QUE SE QUEJO DE "HABERSE ENTERADO POR EL DIARIO"
"No debería desconocer su obligación"
La titular de la cartera de Seguridad nacional recordó que el gobernador debe "ejercer el control político" de la policía. En sus primeras declaraciones tras la crisis, el mandatario cuestionó a la Nación. Convocará a los legisladores.
Nilda Garré se sorprendió porque Bonfatti intentó "asignar a terceros su responsabilidad".
Desde Santa Fe
La ministra de Seguridad de la Nación, Nilda Garré, dijo ayer que no tenía por qué informar al gobernador Antonio Bonfatti sobre la pesquisa de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) que compromete al comisario general Hugo Tognoli. "Las fuerzas federales son auxiliares de la justicia en la investigación de delitos federales que involucran sumarios reservados", dijo. Y se mostró sorprendida por que Bonfatti intenta "asignar a terceros su responsabilidad" por haber ascendido a Tognoli de un cargo clave que ocupó durante la gestión de Hermes Binner: jefe de Drogas Peligrosas, a otro aún más importante: jefe de Policía de la provincia, en diciembre de 2011. "El gobernador Bonfatti no debería desconocer su obligación de ejercer el control político de la Policía santafesina", advirtió Garré. Al mismo tiempo, Bonfatti convocará el viernes, a las 9.30, en Rosario, a todos los legisladores nacionales por Santa Fe para analizar la situación de la inseguridad.Ya el ministro de Gobierno, Rubén Galassi y el ministro de Seguridad, Raúl Lamberto, habían planteado el malestar de la Casa Gris porque se enteraron de la investigación a Tognoli por Página/12, el viernes pasado. Y ayer, Bonfatti repitió la queja: criticó a la ministra de Seguridad y a su colega de Justicia, Julio Alak, por no haberle anticipado que Tognoli estaba en la mira.
"No puede ser que nos enteremos por el diario", se lamentó el mandatario por la emisora LT10. Y recordó que en el último año se reunió dos veces con ambos ministros nacionales y ninguno de ellos le dijo nada. "Ahora se toma el caso del ex jefe de Policía por una supuesta escucha que se hizo en noviembre del año pasado", planteó Bonfatti. "Si realmente hay alguna imputación y queremos trabajar juntos para erradicar este flagelo (del narcotráfico), no puede ser que el gobernador y el ministro de Seguridad (Lamberto) se enteren por un diario que (Tognoli) es investigado. Me parece que si esto ocurrió hace casi un año y tuve cuatro reuniones con ministros de la Nación, cuanto más me hubieran podido decir: 'Mire, a esta persona la estamos investigando'. Y yo no hablo a favor ni en contra de Tognoli, el tendrá que explicar en la justicia si está comprometido o no con la causa que se le imputa. Pero tenemos que articular acciones. No nos podemos hacer los distraídos con esto", agregó.
Garré le contestó: "Sorprende que el gobernador Bonfatti asigne a terceros responsabilidad por nombramientos que realizó él mismo, de funcionarios que hicieron toda su carrera en la provincia de Santa Fe. No debería desconocer la jurisdicción de sus cuerpos policiales y su propia obligación de ejercer el control político de los mismos", dijo. Y aclaró que "las fuerzas de seguridad y federales son auxiliares de la justicia en investigaciones de delitos federales que involucran sumarios reservados".
"La seguridad ciudadana es responsabilidad primaria del Estado provincial, a través de la Justicia y la Policía de la Provincia de Santa Fe. El Estado nacional interviene, como en este caso, en delitos federales, a requerimiento de la Justicia y en la custodia de patrimonio de jurisdicción nacional, por ejemplo, en rutas nacionales".
Bonfatti sugirió también un supuesto quite de colaboración de Garré en la provincia. "La Gendarmería se retiró de Santa Fe", tiró el mandatario. La ministra de Seguridad lo desmintió. "El refuerzo de la Gendarmería en el conurbano bonaerense --en articulación con la Policía de provincia de Buenos Aires-- con el Operativo Centinela desde enero de 2011 y el Operativo Cinturón Sur en distrito porteño desde mayo de ese mismo año, se realizan exclusivamente con escuadrones móviles cuya finalidad específica es prestar servicios en todo el país, sin descuidar las responsabilidades primarias de la fuerza federal", explicó Garré.
"La estructura federal del sistema político consagrado en la Constitución Nacional delega en los Estados provinciales la obligación de brindar seguridad ciudadana en sus jurisdicciones", agregó.
ANUNCIAN HOY A LA TITULAR DE DELITOS COMPLEJOS
Ana Viglione es el nombre elegido
Desde Santa Fe
El gobierno de Antonio Bonfatti piensa en una mujer para que se haga cargo de la Secretaría de Delitos Complejos que investigará el narcotráfico, la trata de personas y el lavado de dinero, con la que pretende pilotear la crisis que detonó con la renuncia y detención del ex jefe de Policía de la provincia, Hugo Tognoli. La elegida es la actual directora de Control de Agencias Privadas de Seguridad, Ana Viglione, según reveló a Rosario/12 una fuente segura de la Casa Gris.
Ya el viernes a la tarde, después de poner en funciones al nuevo jefe de Policía, Cristian Sola -?ex segundo de Tognoli-?, el ministro de Seguridad, Raúl Lamberto, anunció que era inminente la creación de la Secretaría de Delitos Complejos, que dependerá directamente de él. "Queremos que esté a cargo de un funcionario civil", con tres directores "para investigar el narcotráfico, el lavado de dinero y la redes de trata de personas", dijo. Ayer, Lamberto aportó otro dato para develar la incógnita: anticipó que había ofrecido el cargo a una mujer, pero no reveló su nombre porque esperaba la presentación del "plan de trabajo" y "el equipo de funcionarios" que la acompañará en la tarea. A la noche, una fuente oficiosa dijo que la elegida era Ana Viglione, actual directora de Control de Agencias Privadas de Seguridad, de 43 años, una oficial de Policía que llegó al área de la mano del ex ministro Leandro Corti. Si acepta el ofrecimiento, es probable que tenga bajo su mando a oficiales de mayor rango. "Esperamos que acepte", apuntó Lamberto, aunque a la hora que lo dijo, la designación estaba resuelta.
Viglione es abogada, egresada del Instituto Universitario de la Policía Federal, por lo que tiene una relación con las fuerzas nacionales que en el gobierno provincial consideran "excelente".
La reforma es una vuelta más a la que propuso Corti el 4 de mayo último, unos días antes de su renuncia, cuando anunció que las Tropas de Operaciones Especiales (TOE) y las direcciones de Drogas Peligrosas y de Trata de Personas, pasaban a depender directamente del ministro de Seguridad. Ahora, Lamberto propuso crear una Secretaría de Delitos que investigue el tráfico de estupefacientes, la trata de personas y el lavado de dinero.
Ayer, el gobernador Antonio Bonfatti confirmó que la creación de la nueva Secretaría se concretará en las próximas horas, como así también una Dirección General de Recursos Humanos. "Estamos dando indudablemente respuestas de que el gobierno está controlando, y decidido a luchar firmemente contra el flagelo del narcotráfico", remarcó el mandatario sobre las decisiones tomadas tras la revelación de Página/12 sobre la investigación de la PSA al jefe de policía por contactos con el narcotráfico. La respuesta política se completó con la convocatoria a todos los legisladores nacionales por Santa Fe para abordar una respuesta conjunta a la situación de inseguridad.
Fuente:Rosario12
22/10/2012
Tras casi 48 horas desde que se ordenó su detención, el ex jefe de la Policía de Santa Fe, Hugo Tognoli, se presentó en los Tribunales y prestó declaración ante el juez Vera Barros. Allí negó las imputaciones que se le hicieron por connivencia con el narcotráfico. El comisario salió esposado y quedó detenido.
El comisario general Hugo Tognoli negó las imputaciones que se le hacen en el marco de la investigación que sigue adelante del juez federal Carlos Vera Barros por las presuntas vinculaciones del ex jefe de la policía de Santa Fe con narcotraficante y quedó detenido en una dependencia de la Policía de Seguridad Aeroportuaria en Fisherton.
Tognoli se entregó el domingo después de las 23, en la sede de Santa Fe del Ministerio de Seguridad de la provincia, y el juez federal a cargo de la causa dispuso que pasara la noche en dependencias de las Tropas de Operaciones Especiales (TOE) de la capital provincial.
En la mañana del lunes, pasadas las 10, Tognoli llegó a los Tribunales Federales de Rosario en compañía de su representante legal, el abogado Eduardo Jauchen.
El abogado defensor de Hugo Tognoli, Eduardo Jauchen, respondió a la prensa apostada a la salida de los tribunales federales de Oroño al 900.
“Es todo muy confuso” repitió una y otra vez Jauchen ante el requerimiento de los periodistas para que de precisiones de las imputaciones de su defendido. Agregó que “no hay elementos para sustentar” las acusaciones y destacó que Tognoli “negó todo” de lo que se lo acusa.
“No es el momento para que yo le pueda dar toda la descripción del caso”, afirmó el letrado. Respecto de las casi 48 horas desde que se ordenó su detención hasta que finalmente se presentara ante las TOE, dijo que Tognoli “no estuvo prófugo” y que su ausencia se debió a que “estaba mal de salud”.
Tognoli “negó todo”
Según informó el diario La Capital, después de esperar durante más de una hora, finalmente Tognoli fue recibido por el magistrado que entiende en la causa, quien le tomó declaración indagatoria, al cabo de la cual lo dejó detenido. También trascendió que en las próximas horas Tognoli sería trasladado, por razones de seguridad, a un centro de detención de la ciudad de Buenos Aires.
Fuente vinculadas con la investigación deslizaron que el ex jefe policial habría negado tener relación con los traficantes de drogas con los que lo vincula la investigación realizada por la Policía de Seguridad Aeroportuaria, también descartó haber ingresado con una contraseña propia al Registro Nacional de Propiedad Automotor para identificar a los vehículos que perseguían a un narcotraficante en Rosario.
Respecto de los mensajes de texto que se le atribuyen, y que lo relacionarían con la protección del negocio de la droga, Tognoli también negó que fueran suyos, y es más, habría pedido una nueva transcripción de los textos porque los que se dieron a conocer el fin de semana no coincidirían con los originales.
El abogado del comisario
Eduardo Jauchen, el ahora defensor de quien desató el escándalo institucional en las últimas horas, patrocinó en su momento al cajero-ladrón del Banco Nación Mario Fendrich y al obispo Edgardo Storni, condenado por abuso sexual y con una condena luego anulada.
Además, tal como reveló Rosario 12, el estudio Jauchen en su página web, dice tener en su staff a Mario Barletta (hijo del dirigente radical), un joven talentoso que ganó por concurso el cargo de Secretario general del Ministerio Público de la Acusación, es decir la nueva fiscalía.
Como si fuera poco, el estudio defendió el buen nombre y honor de la colombiana Fabiola Moreno Rubio, por tráfico internacional de heroína.
Fuente: La Capital, Rosario 12
Fuente:RedaccionRosario
“Las evidencias contra el jefe policial surgieron a partir de
la investigación de una red de trata de mujeres: en una escucha telefónica, el
dueño de un prostíbulo le preguntó a un comisario mayor la forma de arreglar
para vender cocaína; mediante un mensaje de texto, el comisario mayor Oscar
Ledesma respondió que debía pagar 30 mil pesos (por mes) directo con Tognoli. En
el expediente hay además otra prueba de máxima importancia: un jefe narco que
estaba siendo investigado recibió la información de que lo estaban siguiendo
autos desconocidos. El sospechoso logró escapar. Luego se supo que alguien había
consultado en el Registro de la Propiedad Automotor por las patentes de
vehículos y le informaron que pertenecían a la Policía de Seguridad
Aeroportuaria. Esa consulta, que requiere de un código y una clave personal, fue
hecha –según consta en el expediente- a las 18.08 del 25 de noviembre de 2011
por el comisario Hugo Tognoli”, sostenía la información.
-Me tomó de sorpresa – dijo Raúl Lamberto, ministro de Seguridad del gobierno socialista, militante de décadas del partido de la rosa y conocedor de la historia de la provincia y la evolución de sus factores de poder. Fue una triste declaración.
El caso del comisario Tognoli, jefe de la policía del segundo estado de la Argentina, pone en crisis institucional a los tres poderes de la república: el ejecutivo que lo nombró y que nunca quiso combatir la relación entre la policía y el narcotráfico; el legislativo donde todas las fuerzas políticas han mirado para otro lado en los últimos 30 años que es la misma edad que cumplirá la democracia y el increíble poder judicial que desde finales de los años noventa tiene investigaciones donde queda en evidencia que el mayor cartel de distribución de drogas en la provincia es la propia policía. El caso más emblemático es el asesinato de Sandra Cabrera, la dirigente que logró constituir un sindicato con las trabajadoras sexuales, denunció la corrupción policial con la que pasaron a disponibilidad al entonces oficial Walter Miranda, de Moralidad, Pública, hoy convertido en jefe de la policía rosarina y en cuyo expediente se ratifica que los integrantes de la provincial y la federal extorsionan a las meretrices para vender cocaína.
Que el jefe de la policía sea el jefe del mayor cartel de distribución de drogas en la provincia de Santa Fe es, de por si, una vergüenza enorme. Supera la imaginación de Francis Ford Coppola que al escribir el guión de la trilogía de “El Padrino” nunca vinculaba al jefe de policía con los mafiosos. En la realidad santafesina, si. Coppola es un simple relator de pasquines ante la dimensión del narcotráfico por estas pampas.
Las estadísticas oficiales sostienen, en sus primeras mediciones, que entre 1973 y 1988, el negocio de la cocaína en la provincia fue de 3 kilogramos de cocaína secuestrados en esos quince años. Una cifra absurda pero oficial. A razón de doscientos gramos por año. A mediados de 2012, la cantidad de cocaína secuestrada era de 200 kilogramos. Es decir, 200 mil gramos. En un cuarto de siglo el negocio se multiplicó por mil. No hay otro medio donde el dinero se multiplique de tal forma.
El problema es el lado oscuro del crecimiento patrimonial de jefes policiales, contadores, abogados, grandes empresarios y narcos; la cantidad de pibas y pibes asesinados en los últimos diez años como consecuencia de los “ajustes de cuentas” entre bandas siempre relacionadas con La Santafesina SA. Ese costo enorme de sangre joven es proporcional al silencio cómplice e hipócrita de los tres poderes del estado. Nacional y provincial.
La lucha contra el narcotráfico es la lucha contra el sistema capitalista. Esta definición es un concepto que quizás pocos compartan pero, entonces, será necesario entender otro: la inseguridad es hija directa de la corrupción policial. Es hora que las fuerzas populares se pongan de acuerdo, de mínima, en esta sugerencia. Solamente habrá futuro para nuestras hijas y nuestros hijos si hay combate contra la corrupción policial. Esa otra forma de la economía real de la cual el caso del comisario Hugo Tognoli apenas es una expresión individual.
Fuentes de datos:
Diario Página/12 del 19 de octubre de 2012 y “Ciudad blanca, crónica negra”, libro escrito por el autor de esta nota.
Ya el viernes a la tarde, después de poner en funciones al nuevo jefe de Policía, Cristian Sola -?ex segundo de Tognoli-?, el ministro de Seguridad, Raúl Lamberto, anunció que era inminente la creación de la Secretaría de Delitos Complejos, que dependerá directamente de él. "Queremos que esté a cargo de un funcionario civil", con tres directores "para investigar el narcotráfico, el lavado de dinero y la redes de trata de personas", dijo. Ayer, Lamberto aportó otro dato para develar la incógnita: anticipó que había ofrecido el cargo a una mujer, pero no reveló su nombre porque esperaba la presentación del "plan de trabajo" y "el equipo de funcionarios" que la acompañará en la tarea. A la noche, una fuente oficiosa dijo que la elegida era Ana Viglione, actual directora de Control de Agencias Privadas de Seguridad, de 43 años, una oficial de Policía que llegó al área de la mano del ex ministro Leandro Corti. Si acepta el ofrecimiento, es probable que tenga bajo su mando a oficiales de mayor rango. "Esperamos que acepte", apuntó Lamberto, aunque a la hora que lo dijo, la designación estaba resuelta.
Viglione es abogada, egresada del Instituto Universitario de la Policía Federal, por lo que tiene una relación con las fuerzas nacionales que en el gobierno provincial consideran "excelente".
La reforma es una vuelta más a la que propuso Corti el 4 de mayo último, unos días antes de su renuncia, cuando anunció que las Tropas de Operaciones Especiales (TOE) y las direcciones de Drogas Peligrosas y de Trata de Personas, pasaban a depender directamente del ministro de Seguridad. Ahora, Lamberto propuso crear una Secretaría de Delitos que investigue el tráfico de estupefacientes, la trata de personas y el lavado de dinero.
Ayer, el gobernador Antonio Bonfatti confirmó que la creación de la nueva Secretaría se concretará en las próximas horas, como así también una Dirección General de Recursos Humanos. "Estamos dando indudablemente respuestas de que el gobierno está controlando, y decidido a luchar firmemente contra el flagelo del narcotráfico", remarcó el mandatario sobre las decisiones tomadas tras la revelación de Página/12 sobre la investigación de la PSA al jefe de policía por contactos con el narcotráfico. La respuesta política se completó con la convocatoria a todos los legisladores nacionales por Santa Fe para abordar una respuesta conjunta a la situación de inseguridad.
Fuente:Rosario12
Narcopoliescándalo en Santa Fe
Tognoli quedó detenido22/10/2012
Foto: José Granata / Télam
El comisario general Hugo Tognoli negó las imputaciones que se le hacen en el marco de la investigación que sigue adelante del juez federal Carlos Vera Barros por las presuntas vinculaciones del ex jefe de la policía de Santa Fe con narcotraficante y quedó detenido en una dependencia de la Policía de Seguridad Aeroportuaria en Fisherton.
Tognoli se entregó el domingo después de las 23, en la sede de Santa Fe del Ministerio de Seguridad de la provincia, y el juez federal a cargo de la causa dispuso que pasara la noche en dependencias de las Tropas de Operaciones Especiales (TOE) de la capital provincial.
En la mañana del lunes, pasadas las 10, Tognoli llegó a los Tribunales Federales de Rosario en compañía de su representante legal, el abogado Eduardo Jauchen.
El abogado defensor de Hugo Tognoli, Eduardo Jauchen, respondió a la prensa apostada a la salida de los tribunales federales de Oroño al 900.
“Es todo muy confuso” repitió una y otra vez Jauchen ante el requerimiento de los periodistas para que de precisiones de las imputaciones de su defendido. Agregó que “no hay elementos para sustentar” las acusaciones y destacó que Tognoli “negó todo” de lo que se lo acusa.
“No es el momento para que yo le pueda dar toda la descripción del caso”, afirmó el letrado. Respecto de las casi 48 horas desde que se ordenó su detención hasta que finalmente se presentara ante las TOE, dijo que Tognoli “no estuvo prófugo” y que su ausencia se debió a que “estaba mal de salud”.
Tognoli “negó todo”
Según informó el diario La Capital, después de esperar durante más de una hora, finalmente Tognoli fue recibido por el magistrado que entiende en la causa, quien le tomó declaración indagatoria, al cabo de la cual lo dejó detenido. También trascendió que en las próximas horas Tognoli sería trasladado, por razones de seguridad, a un centro de detención de la ciudad de Buenos Aires.
Fuente vinculadas con la investigación deslizaron que el ex jefe policial habría negado tener relación con los traficantes de drogas con los que lo vincula la investigación realizada por la Policía de Seguridad Aeroportuaria, también descartó haber ingresado con una contraseña propia al Registro Nacional de Propiedad Automotor para identificar a los vehículos que perseguían a un narcotraficante en Rosario.
Respecto de los mensajes de texto que se le atribuyen, y que lo relacionarían con la protección del negocio de la droga, Tognoli también negó que fueran suyos, y es más, habría pedido una nueva transcripción de los textos porque los que se dieron a conocer el fin de semana no coincidirían con los originales.
El abogado del comisario
Eduardo Jauchen, el ahora defensor de quien desató el escándalo institucional en las últimas horas, patrocinó en su momento al cajero-ladrón del Banco Nación Mario Fendrich y al obispo Edgardo Storni, condenado por abuso sexual y con una condena luego anulada.
Además, tal como reveló Rosario 12, el estudio Jauchen en su página web, dice tener en su staff a Mario Barletta (hijo del dirigente radical), un joven talentoso que ganó por concurso el cargo de Secretario general del Ministerio Público de la Acusación, es decir la nueva fiscalía.
Como si fuera poco, el estudio defendió el buen nombre y honor de la colombiana Fabiola Moreno Rubio, por tráfico internacional de heroína.
Fuente: La Capital, Rosario 12
Fuente:RedaccionRosario
La narcopolicía
Por Carlos del Frade
Por Carlos del Frade
Lunes, 22 de Octubre de 2012 | (APe).- El hijo de Hugo Tognoli era arquero de las divisiones inferiores de Ñuls. Su representante era, nada menos, que Roberto “Pimpi” Caminos, el jefe de la barrabrava en tiempos de la presidencia de Eduardo López. Aquella administración recibió la imputación de lavar diez millones de dólares a través de una causa iniciada por la AFIP; el dueño de la tribuna, acusado de distribuir droga en la zona sur de Rosario y el padre del pibe, por entonces alto oficial de la llamada Dirección General de Drogas Peligrosas de la Policía de la Provincia de Santa Fe, terminó siendo el jefe de la misma durante la administración del socialista Antonio Bonfatti. Sus vinculaciones con el narcotráfico eran conocidas desde hacía tiempo.
-Me tomó de sorpresa – dijo Raúl Lamberto, ministro de Seguridad del gobierno socialista, militante de décadas del partido de la rosa y conocedor de la historia de la provincia y la evolución de sus factores de poder. Fue una triste declaración.
El caso del comisario Tognoli, jefe de la policía del segundo estado de la Argentina, pone en crisis institucional a los tres poderes de la república: el ejecutivo que lo nombró y que nunca quiso combatir la relación entre la policía y el narcotráfico; el legislativo donde todas las fuerzas políticas han mirado para otro lado en los últimos 30 años que es la misma edad que cumplirá la democracia y el increíble poder judicial que desde finales de los años noventa tiene investigaciones donde queda en evidencia que el mayor cartel de distribución de drogas en la provincia es la propia policía. El caso más emblemático es el asesinato de Sandra Cabrera, la dirigente que logró constituir un sindicato con las trabajadoras sexuales, denunció la corrupción policial con la que pasaron a disponibilidad al entonces oficial Walter Miranda, de Moralidad, Pública, hoy convertido en jefe de la policía rosarina y en cuyo expediente se ratifica que los integrantes de la provincial y la federal extorsionan a las meretrices para vender cocaína.
Que el jefe de la policía sea el jefe del mayor cartel de distribución de drogas en la provincia de Santa Fe es, de por si, una vergüenza enorme. Supera la imaginación de Francis Ford Coppola que al escribir el guión de la trilogía de “El Padrino” nunca vinculaba al jefe de policía con los mafiosos. En la realidad santafesina, si. Coppola es un simple relator de pasquines ante la dimensión del narcotráfico por estas pampas.
Las estadísticas oficiales sostienen, en sus primeras mediciones, que entre 1973 y 1988, el negocio de la cocaína en la provincia fue de 3 kilogramos de cocaína secuestrados en esos quince años. Una cifra absurda pero oficial. A razón de doscientos gramos por año. A mediados de 2012, la cantidad de cocaína secuestrada era de 200 kilogramos. Es decir, 200 mil gramos. En un cuarto de siglo el negocio se multiplicó por mil. No hay otro medio donde el dinero se multiplique de tal forma.
El problema es el lado oscuro del crecimiento patrimonial de jefes policiales, contadores, abogados, grandes empresarios y narcos; la cantidad de pibas y pibes asesinados en los últimos diez años como consecuencia de los “ajustes de cuentas” entre bandas siempre relacionadas con La Santafesina SA. Ese costo enorme de sangre joven es proporcional al silencio cómplice e hipócrita de los tres poderes del estado. Nacional y provincial.
La lucha contra el narcotráfico es la lucha contra el sistema capitalista. Esta definición es un concepto que quizás pocos compartan pero, entonces, será necesario entender otro: la inseguridad es hija directa de la corrupción policial. Es hora que las fuerzas populares se pongan de acuerdo, de mínima, en esta sugerencia. Solamente habrá futuro para nuestras hijas y nuestros hijos si hay combate contra la corrupción policial. Esa otra forma de la economía real de la cual el caso del comisario Hugo Tognoli apenas es una expresión individual.
Fuentes de datos:
Diario Página/12 del 19 de octubre de 2012 y “Ciudad blanca, crónica negra”, libro escrito por el autor de esta nota.
Fuente:IndymediaRosario
Tognoli declaró ante el juez y negó la acusación en su contra
Ayer, el ex jefe de la Policía santafesina fue trasladado, esposado y con chaleco antibalas, a los Tribunales Federales.
23 oct, 2012
El ex jefe de la Policía provincial, Hugo Tognoli, fue indagado durante la mañana de ayer en el Juzgado en lo Penal Federal de la 3ª Nominación y quedó imputado de prestar colaboración a un supuesto narcotraficante que es investigado por la Justicia Federal. El comisario general negó la acusación en su contra, brindó su versión de los hechos y quedó detenido. Una vez concluido el acto judicial, el uniformado fue trasladado –esposado, con chaleco antibalas y fuertemente custodiado– por la Policía de Seguridad Aeroportuaria a la sede que la fuerza posee en el Aeropuerto Internacional Islas Malvinas, en barrio Fisherton. Por su parte, el abogado defensor de Tognoli sostuvo que su cliente no se presentó antes a la Justicia por cuestiones de salud. El letrado consideró que la situación es “muy confusa” y tildó a la acusación de “bastante oscura”.
La causa judicial que hoy tiene en la mira al ex jefe de la Policía santafesina, Hugo Tognoli, empezó hace aproximadamente un año y medio, cuando la Justicia Federal inició una investigación contra un supuesto narcotraficante que operaba en la localidad de Villa Cañás. Este sospechoso tomó conocimiento que vehículos pertenecientes a la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) lo vigilaban, y así evitó su detención. Luego, la pesquisa determinó que se había realizado una consulta al Registro de la Propiedad Automotor sobre la procedencia de esos automóviles que andaban tras los pasos del presunto narco. Según la investigación, el titular de la clave utilizada para realizar la averiguación era Hugo Tognoli.
A ello se sumaron unos mensajes de texto enviados entre un comisario y un propietario de un prostíbulo. El segundo le consultó al policía con quién debía arreglar y por cuánto dinero para poder vender droga en su local y allí apareció nuevamente el nombre del comisario mayor.
Con estos elementos, la fiscal federal que interviene en la causa, Liliana Bettiolo, solicitó hace cerca de un año un pedido de detención contra Tognoli que no prosperó. Sin embargo, el viernes pasado una nota publicada por el diario Página/12, que brindó detalles de la investigación judicial, derivó en la renuncia de Tognoli –quien estaba al frente de la Policía provincial, quien en declaraciones públicas se puso a disposición de la Justicia.
Ese mismo día, el juez Federal de la 3ª Nominación, Carlos Vera Barros, ordenó el allanamiento a su domicilio particular y a su oficina, pero cuando la PSA concretó los procedimientos no encontró al comisario general. Al día siguiente, el magistrado dispuso su captura nacional e internacional. Durante 52 horas no se conoció el paradero de Tognoli, hasta anteanoche, cuando se presentó espontáneamente en la sede de la Tropa de Operaciones Especiales (TOE) de la ciudad de Santa Fe.
Ayer a la mañana, y luego de un operativo de distracción para la prensa que incluyó una tráfic con personal vestido con ropa de fajina, Tognoli ingresó al edificio de los Tribunales Federales de Rosario en un auto particular con vidrios polarizados. Pasadas las 11 fue sometido a declaración indagatoria.
La fiscal de la causa refirió que el sospechoso fue imputado de un hecho, pero que aún restaba fijar la calificación jurídica. La imputación consistió en “haber prestado colaboración a una persona que estaba siendo investigada por narcotráfico, de acuerdo a una consulta que se habría hecho al Registro de la Propiedad de Automotor”, refirió la funcionaria, quien agregó que la persona investigada por narcotráfico es de Villa Cañás a quien identificó como Carlos A..
Bettiolo sostuvo que Tognoli hizo un descargo, aunque prefirió no ahondar sobre sus dichos, y explicó que los elementos de prueba en su contra son una clave a su nombre utilizada para realizar una consulta al Registro de la Propiedad Automotor y unas trascripciones de mensajes de texto que “no son como aparecen en los medios periodísticos”, refirió la funcionaria, en relación a las transcripciones que han sido publicada por distintos medios locales y nacionales.
La fiscal dijo que el acusado desconoció los mensajes de texto y aseguró no conocer al comisario involucrado en dichos mensajes. Respecto a la clave, la representante del Ministerio Público refirió que en los informes que constan en la causa aparece el nombre de Hugo Tognoli, aunque en su descargo el acusado argumentó que no tenía clave de seguridad y que nunca la tuvo, a lo que agregó que era el titular de la cuenta porque estaba a cargo de la Dirección General de Prensa.
Para concluir, la fiscal aclaró que aún no está determinada la dirección de IP desde la cual se realizó la consulta.
Por su parte, el juez Vera Barros refirió que Tognoli quedó detenido y, provisoriamente, estará a cargo de la fuerza que previno en la causa, es decir la PSA. En este sentido, el magistrado negó un inminente traslado del imputado a Capital Federal, como trascendió en algunos medios.
A su vez, el titular del Juzgado Federal de la 3ª Nominación sostuvo que el acusado –sobre el que pesaba orden de detención pero que técnicamente no se encontraba prófugo– negó los hechos y realizó una justificación. “Ahora resta encuadrar la conducta imputada en una calificación legal”, culminó el juez.
Fuente:ElCiudadanoyLagente
La causa judicial que hoy tiene en la mira al ex jefe de la Policía santafesina, Hugo Tognoli, empezó hace aproximadamente un año y medio, cuando la Justicia Federal inició una investigación contra un supuesto narcotraficante que operaba en la localidad de Villa Cañás. Este sospechoso tomó conocimiento que vehículos pertenecientes a la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) lo vigilaban, y así evitó su detención. Luego, la pesquisa determinó que se había realizado una consulta al Registro de la Propiedad Automotor sobre la procedencia de esos automóviles que andaban tras los pasos del presunto narco. Según la investigación, el titular de la clave utilizada para realizar la averiguación era Hugo Tognoli.
A ello se sumaron unos mensajes de texto enviados entre un comisario y un propietario de un prostíbulo. El segundo le consultó al policía con quién debía arreglar y por cuánto dinero para poder vender droga en su local y allí apareció nuevamente el nombre del comisario mayor.
Con estos elementos, la fiscal federal que interviene en la causa, Liliana Bettiolo, solicitó hace cerca de un año un pedido de detención contra Tognoli que no prosperó. Sin embargo, el viernes pasado una nota publicada por el diario Página/12, que brindó detalles de la investigación judicial, derivó en la renuncia de Tognoli –quien estaba al frente de la Policía provincial, quien en declaraciones públicas se puso a disposición de la Justicia.
Ese mismo día, el juez Federal de la 3ª Nominación, Carlos Vera Barros, ordenó el allanamiento a su domicilio particular y a su oficina, pero cuando la PSA concretó los procedimientos no encontró al comisario general. Al día siguiente, el magistrado dispuso su captura nacional e internacional. Durante 52 horas no se conoció el paradero de Tognoli, hasta anteanoche, cuando se presentó espontáneamente en la sede de la Tropa de Operaciones Especiales (TOE) de la ciudad de Santa Fe.
Ayer a la mañana, y luego de un operativo de distracción para la prensa que incluyó una tráfic con personal vestido con ropa de fajina, Tognoli ingresó al edificio de los Tribunales Federales de Rosario en un auto particular con vidrios polarizados. Pasadas las 11 fue sometido a declaración indagatoria.
La fiscal de la causa refirió que el sospechoso fue imputado de un hecho, pero que aún restaba fijar la calificación jurídica. La imputación consistió en “haber prestado colaboración a una persona que estaba siendo investigada por narcotráfico, de acuerdo a una consulta que se habría hecho al Registro de la Propiedad de Automotor”, refirió la funcionaria, quien agregó que la persona investigada por narcotráfico es de Villa Cañás a quien identificó como Carlos A..
Bettiolo sostuvo que Tognoli hizo un descargo, aunque prefirió no ahondar sobre sus dichos, y explicó que los elementos de prueba en su contra son una clave a su nombre utilizada para realizar una consulta al Registro de la Propiedad Automotor y unas trascripciones de mensajes de texto que “no son como aparecen en los medios periodísticos”, refirió la funcionaria, en relación a las transcripciones que han sido publicada por distintos medios locales y nacionales.
La fiscal dijo que el acusado desconoció los mensajes de texto y aseguró no conocer al comisario involucrado en dichos mensajes. Respecto a la clave, la representante del Ministerio Público refirió que en los informes que constan en la causa aparece el nombre de Hugo Tognoli, aunque en su descargo el acusado argumentó que no tenía clave de seguridad y que nunca la tuvo, a lo que agregó que era el titular de la cuenta porque estaba a cargo de la Dirección General de Prensa.
Para concluir, la fiscal aclaró que aún no está determinada la dirección de IP desde la cual se realizó la consulta.
Por su parte, el juez Vera Barros refirió que Tognoli quedó detenido y, provisoriamente, estará a cargo de la fuerza que previno en la causa, es decir la PSA. En este sentido, el magistrado negó un inminente traslado del imputado a Capital Federal, como trascendió en algunos medios.
A su vez, el titular del Juzgado Federal de la 3ª Nominación sostuvo que el acusado –sobre el que pesaba orden de detención pero que técnicamente no se encontraba prófugo– negó los hechos y realizó una justificación. “Ahora resta encuadrar la conducta imputada en una calificación legal”, culminó el juez.
Fuente:ElCiudadanoyLagente
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