Leandro Busatto: "Ante la crisis policial y de seguridad, el Gobierno eligió cambiar el collar del perro, cuando lo que debía cambiar era al perro"
En la tarde de ayer, el Ministro de Seguridad de la Provincia de Santa Fe, Raúl Lamberto, anunció las modificaciones producidas en el área luego de la traumática salida de la Jefatura Policial de Hugo Tognoli.
En el marco de la gravísima situación institucional en que se encuentra la Provincia, con el ex responsable máximo de la Policía denunciado por connivencia y participación en los delitos de narcotráfico y trata de personas, la respuesta del Ejecutivo asombra por su falta de reacción y decisión.
No se observan cambios significativos, ni nombres nuevos, sino más bien una serie de enroques y reposicionamientos de funcionarios, con rotación de áreas y cargos… pero nada más. Nos alarma la incapacidad del Gobierno para tomar decisiones políticas en un área que está en absoluto estado de emergencia y que se encuentra a la cabeza de las preocupaciones de los santafesinos.
Hemos demostrado con nuestra conducta en la Legislatura, nuestra vocación permanente por trabajar para el bienestar de todos los santafesinos, poniendo a disposición del oficialismo gobernante las herramientas necesarias para una gestión adecuada. Hemos sido una oposición constructiva y propositiva, por lo que no se nos puede acusar de oportunismo o utilización política del conflicto.
No obstante, queremos expresar con elocuencia nuestra profunda preocupación por lo que entendemos significa volver a equivocar el rumbo en materia de políticas de seguridad, ante una sociedad expectante y hastiada que mira con estupor el crecimiento exponencial del delito, lo sufre cotidianamente y que ve peligrosamente minada su confianza en las fuerzas del Estado que están – o deberían estar – para combatir el delito y proteger a la ciudadanía.
Los anuncios del Ministro Lamberto implican un aumento innecesario de la planta burocrática del Estado y poco más que eso; la tibieza en la respuesta por parte del Ejecutivo, nos hace pensar que las chances de contribuir a la solución de fondo del problema son realmente escasas.
Desde nuestro lugar, nos comprometemos a seguir trabajando en la construcción de un concepto democrático de seguridad y de una policía moderna, profesionalizada, subordinada al poder político y al servicio de los santafesinos. Por eso mismo, no avalaremos, ni acompañaremos propuestas que signifiquen “Que algo cambie, para que nada cambie”. El Gobierno de la Provincia, ante la crisis en materia de seguridad más grave de su historia, eligió cambiar el collar del perro, cuando lo que debía cambiar era el perro mismo…

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