Megacausa La Perla
Duras penas para los acusados de allanamientos, usurpación y robo de la empresa Mackentor
15 de septiembre, 2015
Juan Carlos Vega afirmó que los 21 hechos investigados han sido corroborados por “abundante prueba documental, instrumental, informativa y testimonial”. Para Menéndez pidió prisión perpetua. Para los restantes acusados las penas van de 3 a 25 años. Solicitó una reparación indemnizatoria para las víctimas. No obstante, los instigadores, facilitadores, beneficiarios y cómplices económicos y judiciales no están en el banquillo. La Carta de Natalio Kejner.
Katy García
Este mediodía concluyó el alegato del abogado querellante Juan Carlos Vega iniciado el jueves pasado. Presentados los hechos, circunstanciados, y luego analizados a la luz de la doctrina y la jurisprudencia solicitó de acuerdo a las pruebas presentadas durante el debate las penas correspondientes.
La causa Mackentor muestra con absoluta claridad el denso entramado que unió al poder militar ejercido por Menéndez con los poderes judicial y económico, para avanzar en la usurpación y el robo de la empresa de capitales nacionales, líder en la producción de caños, para luego pasarla a manos de la competencia.
Vega, afirmó ante el tribunal presidido por Jaime Díaz Gavier y conformado por Camilo Quiroga Uriburu, Julián Falcucci y Carlos Ochoa que “está probado que la desaparición masiva de personas benefició a los grupos económicos” y que había una “conexidad” entre la persecución y la participación de los jueces. En esa línea, dijo que el ex juez federal Adolfo Zamboni Ledesma (fallecido) quien firmó la orden de intervención del grupo empresario “era un soldado obediente de Menéndez”. Y, reiteró que esta causa es paradigmática porque tras la dictadura cívico militar no se aplicó justicia. “Todo lo contrario, en democracia, se la llevó a la quiebra”, expresó.
Pedido de penas
El abogado manifestó que los hechos investigados, en total 21, “fueron corroborados por abundante prueba documental, instrumental, informativa, testimonial y presencial” que consta en el expediente y destacó los testimonios vertidos por los sobrevivientes “Sargiotto, Manassero, Susana Romano, Bruno Paván, Coggiola, Gustavo Roca, Julio Héctor Casse y Margarita Delgado”.
Los acusados son 12. Para Luciano Benjamín Menéndez solicitó la aplicación de prisión perpetua e inhabilitación absoluta perpetua, accesorias legales y costas por considerarlo “autor responsable de los delitos de allanamiento ilegal de domicilio, usurpación y robo calificado en calidad de autor mediato (hecho primero). En tanto que en el resto de hechos (2 al 20) lo incrimina “por privación ilegítima de la libertad agravada e imposición de tormentos en concurso real y en calidad de autor mediato”.
Para Ernesto Guillermo Barreiro, 25 años por los delitos de privación ilegítima de la libertad agravada (20 hechos), imposición de tormentos, y como autor mediato intermedio; para Jorge Exequiel Acosta (hecho 3) “en calidad de autor mediato intermedio”, 14 años. José Luis Yáñez y Enrique Alfredo Maffei; 20 años (hechos 2 a 20).
Para los acusados Luis Alberto Manzanelli, Carlos Alberto Díaz, Carlos Alberto Vega, José Andrés Tófalo, Ricardo Alberto Lardone, Arnoldo López, y Héctor Raúl Romero (hecho tercero) la querella evaluó que la pena acorde a los delitos cometidos es de 14 años. Finalmente para Ángel Osvaldo Corvalán (Hecho 12) solicitó 3 años. En todos los casos con accesorios legales y costas.
El patrocinador detalló una a una las capturas llevadas adelante por las tropas del ejército en esta capital, en Buenos Aires y Santiago del Estero. “Todos fueron detenidos por pertenecer a Mackentor”, dijo, y agregó que “Menéndez y su obediente empleado judicial Zamboni Ledesma le dio cobertura legal”.
Indemnizaciones
El abogado dijo que “el tribunal debe fijar un monto provisorio indemnizatorio más allá de que el monto definitivo se fije después y se haga según el precio que tenía el acueducto Villa María –San Francisco, reasignado a otra empresa”. Fijó la reparación del daño en 200 mil dólares como base preparatoria de desapoderamiento.
“El caso Mackentor es un caso testigo sobre el modo y la forma que deben considerarse los derechos humanos con la ley en una Argentina dividida y cruzada por comportamientos políticos enfermos” no obstante elogió “la colaboración del fiscal general Trotta, de Jorge Auat, y de Gils Carbó y que a pesar de tener diferentes opiniones han coincidido que loas derechos de las víctimas están primero por encima de cualquier diferencia política.
Las Nulidades
Sobre la base de los hechos considerados como pruebas de certeza solicitó que “se declare la nulidad de la intervención militar y de los actos ulteriores dictados en función de esa orden militar, la nulidad de la intervención de los actos jurídicos hasta la fecha del recupero de la empresa en 1984 cuando el titular de la empresa Natalio Kejner tenía aún captura inernacional. Pide la nulidad de la rescisión del contrato con Obras Sanitarias de la Nación y de la posterior adjudicación a otra empresa. También de los actos judiciales realizados en la justicia provincial y el pedido de quiebra.
Durante su alocución el letrado planteó que este tema es el núcleo argumental de su exposición porque le asegura “derechos a las víctimas” y contribuirá a revelar la verdad histórica.
Manifestó que “está probado que la desaparición masiva de personas benefició a los grupos económicos” y subrayó la “conexidad directa entre la persecución masiva y el grado de participación de los jueces. Y no hablemos de Zamboni Ledesma que era un soldado obediente de Menéndez. El dilema es qué hacemos con los actos judiciales posteriores a 1983”, enfatizó. Concretamente se refiere a los actos jurídicos cometidos en democracia cuando los familiares accionaron civilmente sin obtener justicia.
Los hechos
La causa investiga las detenciones ilegales de empleados, directivos y accionistas ocurridas el 25 de abril de 1977, mediante un procedimiento violento realizado por la madrugada. Luego fueron enviados a los campos de concentración y tortura La Perla y La Ribera.
Aquél día, mediante operativos simultáneos, tropas de la Brigada de Infantería Aerotransportada IV, dependiente del Tercer Cuerpo del Ejército, ingresaron al establecimiento, sin orden judicial por orden de Menéndez, diciendo que la empresa era el “sostén financiero de la subversión” acusación que nunca pudieron demostrar. Con el apoyo de la justicia lograron la intervención de Mackentor y de las firmas Del Interior SA., y Horcen SA. pertenecientes al grupo.
Durante el procedimiento, la patota redujo a los empleados y secuestró a Marta Kejner (principal accionista); Ángel Vitalino Sargiotti, Enzo Alejandro Manassero, su esposa, Leila Norma Rapuzzi y el hijo de ambos Edgardo Enzo Manassero, Hermenegildo Bruno Paván, Luis Plácido Paván, y Carlos Enrique Zambón (directivos); Julio Héctor Casse (p), Julio Héctor Casse (h), Emilio Demetrio Virinni, Emilio Sergio Limonti, Marino del Valle Ureña, Lía Margarita Delgado, Miguel Ángel Roqué, Alberto Simón Tatián, Hugo Taboada, Ramón Walton Ramis (personal jerárquico) y los empleados Pedro Eugenio Salto y José Miguel Coggiola.
Los bienes
Según consta en la acusación se apropiaron ilegalmente de las oficinas administrativas de la empresa y de sus bienes muebles sitos en Rosario de Santa Fe N° 71, piso 3, oficinas 302 y 303; talleres, depósitos, bienes muebles (cinco hectáreas en el camino a Los Boulevares); Establecimientos San Ramón”(7.000 has, en la ruta provincial 50, Santiago del Estero; “Las Brujas”( 2.500 has, Villa Figueroa); Finca vitivinícola en San Juan (21 y 16 has); Planta de fabricación de caños de alta presión situada en barrio Las Flores, Provincia de Córdoba, las oficinas en Buenos Aires, la empresa del Menor S.A.C.I.F que fabricaba refrescos, la Empresa Horcen (Hormigón Centrifugado Sociedad Anónima) (15.105 m2, en la Ruta 9, Km.688, de B° Ferreyra, en la zona del Parque Industrial de la ciudad de Córdoba y la Empresa Edisa SA. Mackentor-
La carta de Natalio Kejner *
La abogada que comparte la querella con Vega leyó la última carta escrita por el titular de la empresa Natalio Kejner dirigida al Tribunal. El empresario murió en México el 29 de diciembre de 2014. En la misiva sostiene que las motivaciones de Menéndez fueron ideológicas y económicas. Esta causa es comparada a otros desapoderaminetos como Papel Prensa y las empresas de los Hermanos Iaccarino.
“Hace 37 años que los militares del terrorismo de Estado encabezados por Menéndez decidieron robar mis empresas, torturar y privar de sus libertades a todos sus integrantes. Mackentor fue declarada subversiva por Menéndez y cabe más decir que a pesar de haber sido perseguidos en juicios penales, civiles, y militares esta condición de subversivo nunca ha sido probada.
Los verdaderos motivos para esta brutal persecución masiva de personas llevadas a cabo por Menéndez y sus secuaces fueron de índole ideológica y económica.
Natalio Kejner, titular de la empresa
Natalio Kejner, titular de la empresa
Yo, era altamente peligroso para Menéndez y los suyos simplemente porque quería que mi empresa funcionara con normas de eficiencia máxima y me negaba a aceptar las reglas de juego de la corrupción que imperaban en esa época en la Cámara Argentina de la Construcción.
Mackentor nunca aceptó participar de obras corruptas a tal punto que renuncié en 1976.
Mackentor era peligrosa también porque absolutamente todos sus empleados y directivos eran accionistas de la empresa y era peligrosa porque tenía abogados que eran considerados subversivos por el régimen militar como el ya fallecido doctor Gustavo Roca.
La persecución llevada a cabo por Menéndez fue por una motivación económica.
Mackentor en esos días era la burguesía nacional argentina que quería crecer económicamente e invertir en el país y entre otros logros resultantes de esa estrategia se obtuvo una patente de última generación para la fabricación de tubos para conductos de alta presión y se instaló la única fábrica de estos insumos en el país.
Mackentor quebró el monopolio de la venta de esos insumos esenciales que tenían los importadores de la época y con el desarrollo de empresas como esta se desarrollaba y cambiaba el país y eso afectaba los negocios.
Estas fueron las motivaciones centrales que tuvo Mackentor para iniciar esta brutal persecución y robo.
Lo segundo que quiero decir en este testimonio que presento es que ratifico todos y cada uno de los actos cumplidos por mi abogado JCV en sede judicial nacional e internacional El doctor Vega ha sido mi apoyo jurídico y humano por más de 17 años. Y todo lo actuado por él lo ratifico todo lo que haga.
Son 37 años de injusticia y como víctima digo que más grave que lo que hizo Menéndez es lo que no hizo la justicia de la democracia. La justicia de Menéndez era una farsa al servicio general.
Después del ´84, yo confié en la justicia argentina y me defraudó. Golpee las puertas de la justicia y me engañaron. Nunca quisieron investigar a fondo lo que había pasado con Mackentor entre 1976 y 1983. Los argumentos eran cínicos y casi burlescos.
Pero el mayor agravio fueron los honorarios que tuve que pagar como consecuencia de la prescripción que declararon sobre mis derechos a que se investiguen los crímenes de Mackentor.
En la década del noventa me embargaron todos los beneficiarios de estos honorarios regulados. Lo poco que quedaba desapareció con esos los embargos y si algo quedaba fue a la quiebra. La parte de los honorarios que no pude pagar regulados por la jueza Garzón fundaron y motivaron el pedido de quiebra de Mackentor. Quiebra declarada no obstante que se trataba de una causa de lesa humanidad y que estaba en proceso de investigación.
Hoy, tengo 89 años. Mi salud es cada vez peor. He perdido la vista, y solo me queda la esperanza de un acto de justicia después de 37 de injusticia. Necesito que se transparente al fin toda la verdad de lo ocurrido con la brutal persecución masiva de sus integrantes y que de una vez por todas se haga justicia y que los responsables, estén donde estén, no salgan impunes. Una sentencia judicial veraz, al menos, logrará honrar a los muertos”, conluye.
El debate continúa el próximo jueves a las 10hs. El juicio es oral y público. Toda persona mayor de edad puede asistir con el DNI. También pueden seguirlo por Internet a través de la transmisión del CIJ. En este sitio, abrir la pestaña Alegatos en vivo, ubicada a la izquierda de la pantalla, en la portada.
Fotografía Telam y La Voz
Fuente:www.prensared.org.ar
Envío:AgnDDHH

No hay comentarios:
Publicar un comentario