MASACRE DE CAFFERATA Y AYOLAS.
El sábado 24, entre tantas actividades a las que fuimos invitados, asistimos con nuestra adhesión , a un Acto por la Memoria, realizado en calles Cafferata y Uruguay, organizado por el AREA EN DDHH, FACULTAD DE ARQUITECTURA, PLANEAMIENTO Y DISEÑO DE LA UNR.
Fue enorme nuestra sorpresa cuando al llegar al lugar , nos enteramos, que este grupo comenzó su elaboración de propuesta ..."con las intervenciones en el espacio público para la reflexión sobre nuestra historia reciente"...en el caso de ésta masacre, con el mural que habíamos pintado nosotros y del que no teníamos fotos y repintaríamos oportunamente, como quedó dicho en éste blog, porque fuera tapado. Al conversar con la profesional a cargo Arquitecta Alejandra Buzaglo, (mientras el grupo de estudiantes de arquitectura, terminaba la obra, -que quedó en la acera de la ochaba-) nos dijo que comenzaría su exposición a la concurrencia nombrando al Colectivo, y que tenían muchas fotos de dicho mural.
Acordamos que nos las enviaría y cumplió. Aquí están las fotos.
Pero eso no fue todo. En el lugar estaban presentes el hermano de Héctor Luis Fluxá-el estudiante de Arquitectura asesinado-, Carlos Fluxá y el hermano de Mónica Cristina Woelflin-estudiante de Medicina-, Félix Woelflin; y cantidad de amigos y conocidos de los compañeros masacrados, en aquella madrugada del 23 de enero de 1977. Quienes nos agradecieron, emocionadamente el mural que pintamos, en aquella oportunidad.
Como en el auto de nuestro compañero Hugo Papalardo teníamos la muestra de "Poesías e Imágenes ", que montaríamos por la tarde en plaza San Martín, acompañamos hasta él , a Carlos para mostrarle el panel que tenemos realizado con los compañeros de ésta masacre.
Las emociones, los encuentros, los agradecimientos fueron muchos, las anécdotas y las promesas de encontrarnos también.
Como "frutilla del postre" les contamos a Uds. lectores del blog, que la Arquitecta Alejandra Buzaglo, es mamá de una compañera de todo el primario, de la hija del matrimonio de nuestros compañeros Luis Megías y Mónica Garbuglia.¡No tienen idea la sorpresa que se llevaron todos!.
Los agradecidos somos nosotros, que con hechos como éste vamos tomando dimensión del espacio de reflexión y construcción de memoria que logramos con los murales que pintamos, por todos los compañeros muertos y/o desaparecidos en el mismo lugar dónde cayeron o en su cercanías, o donde militaban.
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