El 23 de febrero comenzará el juicio contra el gendarme Víctor Rei por el robo del hijo de una pareja de entrerrianos desaparecidos. Rei estuvo en Campo de Mayo
El lunes 23 de este mes comenzará el juicio oral y público al ex Comandante del Servicio de Inteligencia de Gendarmería Nacional Víctor Enrique Rei, por la apropiación del hijo de Liliana Fontana y Pedro Sandoval, ambos entrerrianos desaparecidos durante la última dictadura militar.
El proceso debía realizarse en junio pasado pero en aquel momento fue suspendido por el Tribunal Oral Federal Número 6 de la Capital Federal por "cuestiones burocráticas", según denunciaron los organismos de derechos humanos. Alejandro Sandoval recuperó su identidad en septiembre de 2006.
El juicio contra Rei que se había suspendido en junio pasado se desarrollará a partir del 23 de febrero por el Tribunal integrado por José Martínez Sobrino, María del Carmen Roqueta y Adriana Palliotti.
Rei esta acusado por sustitución de identidad prevista en el artículo 139 inciso 2 del Código Penal de 1 a 4 años de prisión; y sustitución de menores de edad del artículo 146, que establece una pena de 3 a 10 años.
Liliana Fontana y Pedro Sandoval fueron secuestrados el 1 de julio de 1977. Ella tenía 20 años, era estudiante de peluquería, había nacido en la ciudad de Viale y estaba embarazada de dos meses y medio; el era oriundo de Nogoyá, tenía 33 años y era albañil.
La pareja vivía con Rubén y Chela Fontana, los padres de Liliana, en Caseros Provincia de Buenos Aires. Por testimonios de sobrevivientes se supo que los llevaron al centro clandestino Club Atlético, en Paseo Colón y Garay, y que la jóven fue sacada de allí varios meses después para dar luz. Alejandro Sandoval recuperó su identidad en septiembre de 2006.
Rei fue uno de los militares entrenados por las Fuerzas Armadas de Estados Unidos en Fuerte Gulick en Panamá, donde aprendió las tácticas de torturas, represión clandestina y desaparición de personas, aplicadas en Argentina, así como en otros países de América Latina en 1975.
En materia de inteligencia, se destacó en los grupos de tareas que llevaron adelante la represión ilegal durante la dictadura militar – tal como él mismo lo reconoció en Juicio a las Juntas 1985- y se desempeñó en el centro clandestino de detención que funcionó en la Cárcel de Encausados en Campo de Mayo.
Durante la dictadura, Rei también estuvo destinado a la seguridad del Mundial de Fútbol de 1978 y después se desempeñó en la Dirección de Operación de Inteligencia de Gendarmería.
Posteriormente cumplió funciones como Segundo Jefe del Escuadrón de Concepción del Uruguay. Además esta involucrado en la desaparición de directivos del Banco de Hurlinghan.

El proceso debía realizarse en junio pasado pero en aquel momento fue suspendido por el Tribunal Oral Federal Número 6 de la Capital Federal por "cuestiones burocráticas", según denunciaron los organismos de derechos humanos. Alejandro Sandoval recuperó su identidad en septiembre de 2006.
El juicio contra Rei que se había suspendido en junio pasado se desarrollará a partir del 23 de febrero por el Tribunal integrado por José Martínez Sobrino, María del Carmen Roqueta y Adriana Palliotti.
Rei esta acusado por sustitución de identidad prevista en el artículo 139 inciso 2 del Código Penal de 1 a 4 años de prisión; y sustitución de menores de edad del artículo 146, que establece una pena de 3 a 10 años.
Liliana Fontana y Pedro Sandoval fueron secuestrados el 1 de julio de 1977. Ella tenía 20 años, era estudiante de peluquería, había nacido en la ciudad de Viale y estaba embarazada de dos meses y medio; el era oriundo de Nogoyá, tenía 33 años y era albañil.
La pareja vivía con Rubén y Chela Fontana, los padres de Liliana, en Caseros Provincia de Buenos Aires. Por testimonios de sobrevivientes se supo que los llevaron al centro clandestino Club Atlético, en Paseo Colón y Garay, y que la jóven fue sacada de allí varios meses después para dar luz. Alejandro Sandoval recuperó su identidad en septiembre de 2006.
Rei fue uno de los militares entrenados por las Fuerzas Armadas de Estados Unidos en Fuerte Gulick en Panamá, donde aprendió las tácticas de torturas, represión clandestina y desaparición de personas, aplicadas en Argentina, así como en otros países de América Latina en 1975.
En materia de inteligencia, se destacó en los grupos de tareas que llevaron adelante la represión ilegal durante la dictadura militar – tal como él mismo lo reconoció en Juicio a las Juntas 1985- y se desempeñó en el centro clandestino de detención que funcionó en la Cárcel de Encausados en Campo de Mayo.
Durante la dictadura, Rei también estuvo destinado a la seguridad del Mundial de Fútbol de 1978 y después se desempeñó en la Dirección de Operación de Inteligencia de Gendarmería.
Posteriormente cumplió funciones como Segundo Jefe del Escuadrón de Concepción del Uruguay. Además esta involucrado en la desaparición de directivos del Banco de Hurlinghan.
(Fuente:Rdendh).
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