“DESPUES DE UNA CHARLA CON ALICIA”

Hace unos días en una cena política (no podía ser de otra manera), conocí a Alicia, una compañera, cincuentona como yo. A poco de comenzar a charlar, encontramos un pasado militante común (peronista y montonero en mi caso, y peronista y allegada a Montoneros en el de ella). Y pese haber militado en lugares diferentes, ella en el Gran Buenos Aires, y yo en Rosario, en ámbitos diferentes universitario el mío y territorial el de ella, pronto la manera de contarnos nuestras distintas experiencias, la pasión que venía de allá lejos, de nuestra juventud, de la juventud de los ´70, fue la misma.

Después de ese encuentro, en el que se amontonaran en dos horas más o menos, hechos, situaciones diversas, nombres de compañeros, recuerdos alegres y tristes, yo sentí, y descuento que Alicia igual, que volvíamos a hablar un mismo idioma, el idioma de quienes, como jóvenes, asumimos la militancia política como una forma de vida.
Y me pregunté como era posible que me hubiera sentido así, y recordé que no es la primera vez que me ocurre, y no solo es una vivencia personal, sino que muchos compañeros lo comentan como un hecho constante, qué es?...lo que pese al tiempo, al desconocimiento personal anterior, a veces ( como en mi caso con Alicia), al dolor, a la cárcel, a los compañeros que no pudieron llegar a la madurez, que sí nosotros al- canzamos, nos hace sentir pertenecientes a algo que nos engloba, que nos cobija....

Y solo encuentro como respuesta: el que teníamos un proyecto común, que hacia de nuestra militancia, una tarea alegre y responsable, y en esa tarea todos los compa- ñeros eran uno. Por eso, hablar con Alicia, fue hablar con cualquiera de ellos.

Si nosotros pudiéramos transmitir esa comunión, esa convicción, esa pasión con base en la práctica política, de sentirnos contenidos en un proyecto popular, que busca la definitiva Liberación Nacional...si pudiéramos, repito, transmitir a los jóvenes militantes de hoy, algo de esa idea, nuestra militancia habrá tenido el sentido trascendente que siempre pretendimos.

Y gracias a Alicia, y en este gracias a vos, también va un gracias a todos los que me permitieron conocer el verdadero significado de la palabra COMPAÑERO.


Luis Megías