Renunció ante el Gobierno Nacional y el Consejo de la Magistratura fue notificado de esta decisión. Desde allí se confirmó la dimisión. Aunque el juez se obstinó en desmentir la verdad, los hechos y los documentos fueron más fuertes que sus argumentos distractorios. Pereyra González está sospechado de encubrir crimenes de lesa humanidad.
Carlos Guillermo Pereyra González renunció como juez de cámara federal. La renuncia fue presentada ante la presidenta Cristina Fernández a través del Ministerio de Justicia de la Nación.
La novedad la advirtió Radio Nihuil y luego de desmentirlo en dos oportunidades el juez lo terminó admitiendo ante MDZ.
El magistrado dimitente está sospechado de haber callado ante torturas que él mismo presenció en época de la dictadura en San Luis cuando era secretario de un juzgado puntano. Su caso se ventiló durante el juicio que se desarrolló en la provincia puntana. Por ese motivo quedó apuntado por encubrimiento por el mismo tribunal.
Pero también pesaba sobre el juez un pedido de jury junto a otros dos camaristas por dilatar las causas por delitos de lesa humanidad y liberar detenidos acusados de cometer esos crímenes en Mendoza durante la última dictadura militar.
Con su renuncia se congelaría el proceso de enjuiciamiento que está planteado en el Consejo de la Magistratura desde los organismos de Derechos Humanos de Mendoza y del mismo gobierno provincial.
El último movimiento contra Pereyra González estaba por acaecer. En San Luis se prepara una denuncia en su contra, algunos allegados al juez apuestan que esta demanda en ciernes, hizo precipitar la decisión de dimitir.
Las dos falsas desmentidas de González de su renuncia ante este diario, fueron desmantaledas por un miembro del Consejo de la Magistratura quien ratificó que se presentó en el organismo colegiado un escrito del Poder Ejecutivo donde se piden los antecedentes del juez por la presentación formal su renuncia.
Por eso en la trecera y última consulta Pereyra finalmente dijo: -Antes de desmentir o admitir prefiero esperar la ratificación.
A lo que este diario le preguntó: -¿Qué ratificación?
Entonces el juez soltó: -La ratificación de mi renuncia.
(Fuente:Rdendh)
Carlos Guillermo Pereyra González renunció como juez de cámara federal. La renuncia fue presentada ante la presidenta Cristina Fernández a través del Ministerio de Justicia de la Nación.
La novedad la advirtió Radio Nihuil y luego de desmentirlo en dos oportunidades el juez lo terminó admitiendo ante MDZ.
El magistrado dimitente está sospechado de haber callado ante torturas que él mismo presenció en época de la dictadura en San Luis cuando era secretario de un juzgado puntano. Su caso se ventiló durante el juicio que se desarrolló en la provincia puntana. Por ese motivo quedó apuntado por encubrimiento por el mismo tribunal.
Pero también pesaba sobre el juez un pedido de jury junto a otros dos camaristas por dilatar las causas por delitos de lesa humanidad y liberar detenidos acusados de cometer esos crímenes en Mendoza durante la última dictadura militar.
Con su renuncia se congelaría el proceso de enjuiciamiento que está planteado en el Consejo de la Magistratura desde los organismos de Derechos Humanos de Mendoza y del mismo gobierno provincial.
El último movimiento contra Pereyra González estaba por acaecer. En San Luis se prepara una denuncia en su contra, algunos allegados al juez apuestan que esta demanda en ciernes, hizo precipitar la decisión de dimitir.
Las dos falsas desmentidas de González de su renuncia ante este diario, fueron desmantaledas por un miembro del Consejo de la Magistratura quien ratificó que se presentó en el organismo colegiado un escrito del Poder Ejecutivo donde se piden los antecedentes del juez por la presentación formal su renuncia.
Por eso en la trecera y última consulta Pereyra finalmente dijo: -Antes de desmentir o admitir prefiero esperar la ratificación.
A lo que este diario le preguntó: -¿Qué ratificación?
Entonces el juez soltó: -La ratificación de mi renuncia.
(Fuente:Rdendh)
No hay comentarios:
Publicar un comentario