¡AISLADOS!

Por Alberto Pinzón Sánchez

“Cada uno habla de la feria como le va en ella”, dice el refranero popular y nada lo recuerda mejor que la publicitada cumbre de UNASUR en Bariloche el pasado 29 Agosto (2009).

La diversa, abundante o frondosa valoración que se ha hecho de ella; ha terminado por sepultar bajo una hojarasca de distorsiones lanzadas intencionadamente a montones por los “intoxicadores de opinión o spinn doctors del Imperialismo, y ha logrado tapar su único y real logro: El rechazo de los países Suraméricanos allí reunidos (excepto su punta de lanza del gobierno colombiano) a la ocupación militar gringa de Colombia y la advertencia (tímida es verdad ) al Pentágono, de que un nuevo Puerto Rico colombiano es inadmisible en el continente. Ojalá la Sra. Clinton haya tomado “atenta nota”.

Y es que una reunión de ese estilo, de la cual todos se declaran ganadores (y de qué manera), lo que muestra es que debemos reforzar y elevar aún más nuestra capacidad de crítica para asimilar y contextualizar históricamente este tipo de eventos. Consejo comunal, “reality show”, partido de fútbol (Colombia contra Unasur), debate electorero hacia la reelección. Culebron tele-novelado, gobierno de opinión, o como quiera que se desee valorar este visaje, nunca podrá obviar el hecho “geo-estratégico” continental que ha adquirido la resistencia y persistencia del conflicto social armado de Colombia.

Bien lo dijo el presidente del Brasil, uno de los más interesados en esa geo-estrategia continental y en una nueva polaridad internacional: “Desde 1952 existe un pacto militar oficial a gran escala entre EUU y el gobierno de Colombia, y ninguno de los problemas que ese pacto ha pretendido solucionar lo ha sido. Por el contrario, se han agravado hasta volverse una amenaza continental”, y eso que, a la reunión de Bariloche no asistió el gobierno de México, Estado ligado estrechamente a EEUU por medio de un TLC y a quien los mismos intoxicadores de opinión acusan de haberse “colombianizado”.

Repasando la Historia colombiana uno puede encontrar numerosas pistas para desentrañar la perversa y oscura relación de entreguismo, sometimiento, o cipayismo y humillación de los arrastrados oligarcas colombianos con el Imperialismo anglosajón, principalmente norteamericano, que se ha descarnado y convertido en conocimiento público y masivo en toda Latinoamérica durante esta Cumbre en Bariloche: Desde el “Santanderismo” de los conjurados para asesinar al Libertador Simón Bolívar y al gran Mariscal de Ayacucho, o sabotear el Congreso Anfictiónico Bolivariano. Pasando por la inicua solicitud que hiciera el Presidente de Colombia en el llamado recinto de la democracia o parlamento, durante los hechos del robo de Panamá, para que Colombia le declarara “oficialmente” la guerra a EEUU y una vez perdida esta, EEUU nos ocupara e incorporara como un Estado más de la Unión. Hasta el oscuro, inmoral y desconocido (hasta ahora) “acuerdo soberano bilateral” sobre las 7 bases Gringas que sellaron los tres representantes del bloque de clases fusionado que actualmente conforma la Oligarquía militarista colombiana: Uribe Vélez, Juan Manuel Santos y Padilla de León.

Santanderismo o aislacionismo, es el contrario dialéctico y objetivo de Bolivarismo o anfictionía americana. Y es un hecho Histórico probado que la provinciana oligarquía dominante en Colombia, nunca le han interesado nada más que sus pequeños intereses parroquiales; “las patriecitas” que ridiculizaba el Libertador, y que sirvieron como anillo al dedo a la geo-estrategia expansionista y divisionista del Imperialismo gringo, durante los Siglos XIX, XX y lo que va corrido del XXI en Nuestra América. No fue nunca un azar que el vocero más lúcido y viejo (por lo tanto más experimentado) de esa oligarquía Alfonso López Michelsen, criticara ese aislacionismo oligárquico y vendepatria, llamando a Colombia “el Tibet de Sur América”, y ridiculizara a sus más preclaros exponentes como “peones viajados”, cuyo horizonte mental no iba más allá de lo que alcanzara a divisar el campanario de su Iglesia. Recuerden también lo que decía el falangista Godo Laureano Gómez (el mismo que para lavar su falangismo firmó como dictador el pacto militar con EEUU mencionado por el presidente brasileño): Dos cuadras más allá de la catedral de Bogotá, no hay sino fiebre amarilla”.

Ahora, todas las revistas del ministerio de propaganda del régimen narco-paramilitar colombiano, especializadas en culebrones mediáticos, al comprobar el único resultado de la cumbre (que he mencionado arriba); al unísono se rasgan las vestiduras y gritan: ¡Estamos aislados! cuando debieran preguntarse mejor ¿Cuando han estado integrados? ¿Cuando han dejado de mirarse ensimismados el ombligo de su indigna posición supina o de plegaria mahometana? ¿Cuando han tenido un gesto integrador conciente o anfictiónico para con los pueblos y países vecinos a quienes incluso “culpan” de todos los males y plagas que ellos no han podido resolver en su largo y sangriento dominio oligárquico?

Entonces Donald Rumsfeld, el terrorífico ex secretario de defensa de EEUU, creador de la Guerra Asimétrica e Infinita de Bush y principal accionista de Gilead Sciences Inc, es decir dueño del Tamiflu curalotodo, sonreirá satisfecho y dando su autorizada opinión; dirá que la reunión de Bariloche, no sólo ha servido para dividir Unasur y ocupar Colombia, sino para demostrar que el virus de la gripa porcina es trasnacional o mejor, Universal.

(Fuente:Argenpress).