19 de junio de 2010

INGALINELLA, UNA BATALLA GANADA CONTRA LA IMPUNIDAD.

En 1955 la policía de Rosario secuestró y asesinó a Juan Ingallinela. El cuerpo nunca apareció. Cincuenta años después se publican por primera vez datos del expediente judicial.
Por Osvaldo Aguirre
Juan Ingallinella era médico y destacado militante del Partido Comunista. A los 43 años, había conocido la persecución y la cárcel por el hecho de ser opositor político.
En junio de 1955, un grupo de policías rosarinos lo detuvo en forma ilegal y lo condujo a la Jefatura de la Policía, donde murió mientras era torturado con picana eléctrica. Su cuerpo nunca fue hallado; por efecto de una extraordinaria movilización popular, los responsables fueran detenidos y condenados. A cincuenta años, ese episodio traumático de la historia de Rosario ofrece todavía datos y circunstancias desconocidas.
El 16 de junio de 1955 un golpe militar intentó derrocar al presidente Juan Domingo Perón. Aviones de la Marina y de la Aeronáutica bombardearon a la población en la Plaza de Mayo y provocaron una masacre que dejó 300 muertos y más de 2 mil heridos y mutilados. Esa misma noche grupos de civiles quemaron iglesias en distintos puntos de Buenos Aires -la Iglesia católica encarnaba la oposición al gobierno, después de haber sido durante años su firme sostén.Ese mismo día, en Rosario, el Partido Comunista distribuyó un volante titulado "Unidad popular contra el golpe oligárquico imperialista".
Era una breve declaración en contra del complot militar. Sin embargo, fue la excusa para que el entonces jefe de policía de Rosario, Emilio Venancio Gazcón, ordenara una cacería de comunistas.Los detalles del hecho se conocieron luego que un policía, Rogelio Luis Delfín Tixe, rompió el pacto de silencio que unió a los involucrados en la represión.
La historia comenzó el 16 de junio cuando el subcomisario Santos Barrera, subjefe de Orden Social y Político, y un grupo de policías detuvieron a los hermanos Víctor Hugo y Miguel Angel Riskin en barrio Las Delicias y "secuestraron panfletos comunistas y en los que se instaba al pueblo a mantenerse contra los golpes de estado".
Es decir que desde el principio estuvo claro para la policía el sentido de la posición comunista.El jefe de policía de Rosario ordenó a Félix Monzón, jefe de Orden Social y Político, continuar el procedimiento hasta encontrar el mimeógrafo utilizado para la impresión de los volantes, "que constituían un desacato contra el entonces Presidente de la Nación".
Así comenzaron las detenciones, que se realizaron en forma completamente ilegal: sin órdenes de allanamiento y con policías que actuaban de civil y sin identificarse, al estilo de los posteriores grupos de tareas.
Ese mismo día, además, se llevó a Leyes Especiales una mesa que fue utilizada para torturar a los detenidos. Nota completa: http://archivo.lacapital.com.ar/2005/06/12/seniales/noticia_202302.shtml
Otras notas: http://www.rodolfowalsh.org/article.php3?id_article=1416
http://es.wikipedia.org/wiki/Juan_Ingallinella
FuentedeOrigen:LaCapital
Fuente:CarlosOjeda

1 comentario:

Emilio Fuentes dijo...

Muchas gracias compañeros. Como siempre conservan ustedes el respeto y ejemplo que fueron y son nuestros compañeros que dieron su vida en la lucha por un país y un mundo mejor.
¡Compañeros asesinados y desaparecidos en la lucha, hasta la victoria siempre!
Carlos Ojeda
Partido Comunista Congreso Extraordinario
carloshugoojeda@gmail.com