El "Tigre" Acosta se queja por estar preso en una cárcel común
El ex capitán Jorge "Tigre" Acosta, procesado como supuesto jefe de los torturadores que actuaron en el campo de concentración de la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA), se quejó por estar detenido en una cárcel común.
Afirmó que su reclusión en la cárcel de Marcos Paz, en un pabellón especial para represores, le provoca "efectos psicofísicos" que le "suenan a tormentos". Lo hizo por escrito, mediante una carta que le entregó a su defensora oficial para que ella la presentara en las causas judiciales en las que está imputado.
Acosta se quejó de que su situación procesal representa una "persecución terrorista del Estado por medios gramscianos" (en alusión no explicada al líder del comunismo italiano, Antonio Gramsci), que ejecutan -siempre según su visión- "los terroristas que gestionan al respecto desde el Gobierno nacional".
La defensora oficial Verónica Blanco fue encomendada por Acosta para que, con esta carta, algún juez disponga su traslado a otro pabellón. "Me agravia en grado sumo y ataca mis derechos personalísimos", sostuvo, el estar detenido en el lugar donde se encuentra hoy.
Entre sus compañeros de pabellón, Acosta tiene al ex subcomisario Luis Patti, al ex cura Cristian Von Wernich y al ex agente de inteligencia Raúl Guglielminetti, entre otros.
Acosta cumple prisión preventiva como consecuencia de su rol como ex jefe operativo del Grupo de Tareas 3.3.2, que secuestraba guerrilleros y opositores políticos de la dictadura. Fue identificado por muchas de las víctimas de la ESMA y procesado por el juez federal Sergio Torres en una de las megacausas sobre crímenes de lesa humanidad.
Según testimonios de sobrevivientes de la ESMA, Acosta solía jactarse delante de ellos de "ser Dios" porque, según recordaron, decía "yo decido quién se va al 'cielo'", es decir quién subía a los "vuelos de la muerte" desde los cuales arrojaban prisioneros al mar y eran eliminados.
Fuente:Clarin
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