“Fue el único alzamiento que se hizo en cumplimiento de la Constitución”
Publicado el 10 de Junio de 2011
La Plaza Las Heras fue escenario ayer de un homenaje a los civiles y militares fusilados tras el levantamiento encabezado por el general Juan José Valle contra la dictadura encabezada por Pedro Eugenio Aramburu, al cumplirse ayer el 55º aniversario del alzamiento. Fue precisamente en Plaza Las Heras, donde la llamada Revolución Libertadora que derrocó el gobierno de Juan Domingo Perón en 1955 fusiló al general Valle.
Del homenaje participaron el secretario de Derechos Humanos de la CGT, Julio Piumato; el candidato a legislador porteño por el FPV, Alejandro Amor, y varios familiares de las víctimas, entre ellos la nieta y la bisnieta del general Valle, el hijo de Mario Brión fusilado en el basural de José León Suárez y algunos de los sobrevivientes de la toma del regimiento.
En diálogo con Tiempo Argentino, Piumato destacó que el del general Valle “fue el único alzamiento que hay en la historia de la Argentina que se hizo en cumplimiento de la Constitución, porque la Constitución manda tomar las armas para defenderla, y eso fue lo que hicieron y esto tiene que ver además con toda la historia del peronismo de los últimos 60 años, donde lo que algunos sectores hicieron fue tratar de destruir al movimiento”.
Piumato resaltó además que Valle y Aramburu habían sido compañeros de banco durante sus años en la Escuela Militar, y recordó que la mujer del general sublevado había pedido hablar con Aramburu antes del fusilamiento y como única respuesta obtuvo que no podía recibirla porque estaba durmiendo.
Los sublevados fusilados entre el 9 y el 12 de junio de 1956 fueron: Oscar Lorenzo Cogorno, Ramón Raúl Videla, Carlos Irigoyen, Rolando Zanetta, Alberto Juan Abadie, Blas Closs, Rafael Fernández (en La Plata); José Albino Irigoyen, Jorge Miguel Costales, Dante Hipólito Lugo, Norberto Ross, Osvaldo Alberto Albedro y Clemente Ross (en Lanús).
En tanto, en los basurales de José León Suárez fueron acribillados Carlos Alberto Lisazo, Nicolás Carranza, Mario Brión, Vicente Rodríguez, Francisco Garibotti, Aldo E. Jofré, Miguel Ángel Mauriño; en Campo de Mayo, Eduardo Alcibiades Cortinez, Ricardo Santiago Ibazeta, Néstor Dardo Cano, Eloy Luis Caro, Jorge Leopoldo Noriega y Néstor Marcelo Videla. Estos crímenes fueron recogidos por el periodista Rodolfo Walsh en su obra más conocida, Operación Masacre.
Y Miguel A. Paolini, Ernesto Gareca, Hugo Eladio Quiroga, José Miguel Rodriguez,en la Escuela de Mecánica de Ejército de Buenos Aires; e Isauro Costas, Luciano Isaías Rojas, Luis Pugnetti, en la Penitenciaría de Buenos Aires.
Piumato resaltó además que “los asesinatos no reconocieron ni ley ni nada, porque la ley marcial se impuso luego de que fueron capturados. Pero la verdad es que lo que querían era mandar un mensaje a los cuadros intermedios de las Fuerzas Armadas, especialmente al Ejército, que era profundamente peronista, para evitar posibles futuros levantamientos.” “Por supuesto –prosiguió–, este acto se encadenó con este momento particular en que se recuperó la memoria histórica que tantos quisieron esconder.”
Fuente:TiempoArgentino
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