Los represores Antonio Domingo Bussi y Luciano Benjamín Menéndez afrontarán otro juicio por delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura militar en Argentina. El juez federal de Tucumán, Daniel Bejas, a cargo del Juzgado Federal Nº 1, elevó a juicio oral una nueva causa contra el ex interventor de Tucumán y el ex comandante del Tercer Cuerpo del Ejército, respectivamente, acusados por los delitos de violación de domicilio, privación ilegítima de la libertad con apremios y vejaciones, y tormentos en perjuicio de Emma del Valle Aguirre, ex detenida del centro clandestino de Nueva Baviera. En esta causa también está imputado el ex comisario Miguel Angel Moreno, por asociación ilícita agravada y tormentos. Emma del Valle Aguirre fue secuestrada de su domicilio ubicado en ruta nacional 38, antes de llegar al camino viejo que va hacia la localidad tucumana de Simoca.
Fuente:Pagina12
A pesar de que la habría incumplido
Confirman la prisión domiciliaria a Albornoz
Publicado el 4 de Agosto de 2011
Por R. R.
El represor y genocida Roberto Heriberto “El Tuerto” Albornoz recibió la venia de parte del Tribunal Oral en lo Criminal de Tucumán para seguir cumpliendo su condena a cadena perpetua por delitos de lesa humanidad desde su casa en la localidad de La Banda del Río Salí, municipio lindante con la capital tucumana. Es que luego de la publicación de Tiempo Argentino donde se demostró que el genocida no estaba en el lugar de detención cuando dos asistentes sociales fueron a realizar una vista de rutina, el fiscal federal Leopoldo Palma pidió que se le revoque el beneficio. Quienes también apoyaron el pedido de Palma fueron los los representantes de las querellas, Valentina García Salemi, Bernardo Lobo Bugeau, Laura Figueroa, Daniel Mendivil, Julia Vitar y Emilio Guagnini .
El beneficio les fue confirmado a pesar de la declaración de Noelia Tapia, quien relató la inspección que fue a realizar al domicilio de Albornoz el 17 de junio. Tapia indicó que arribó al domicilio de calle Martín Fierro 541 de la ciudad de Banda del Río Salí alrededor de las 18:00; y que tanto ella como la licenciada Cisterna al bajar a la entrada de la vivienda tocaron el timbre varias veces –aunque no pudo asegurar si este sonó– y golpearon insistentemente las manos. Agregó que luego bajó el chofer, quien también golpeó con insistencia las manos, pero tampoco obtuvo respuesta. Señaló que, seguidamente, se dirigieron a una vivienda ubicada al lado de la del imputado en la que los atendió una mujer que dijo no saber nada de Albornoz, porque no vivía en su casa. Por último, manifestó que no dejaron notificación o aviso de la visita porque llovía y las hojas se habrían mojado, y que tampoco podía recordar si en la vivienda había algún vehículo, pero no advirtió la presencia de personal policial en el domicilio, aseguró Tapia frente al juez federal Carlos Jiménez Montilla cuando la llamó a declarar.
Días después, los jueces federales llamaron a declarar a “El Tuerto” Albornoz. El ex jefe del Centro Clandestino de Detención Jefatura de Policía dijo que no lo encontraron cumpliendo condena porque “no le funcionaba el timbre” y por ende “no escuchó” la puerta. Además, ante la consulta de por qué no había custodia en la entrada de su domicilio el represor contestó que “había entrado a merendar”, por lo que ni el policía, supuestamente a cargo de Albornoz, ni el geronte, escucharon los golpes de manos de tres personas paradas en la puerta de una vivienda de pequeñas dimensiones.
Según el escrito al que tuvo acceso Tiempo Argentino, los jueces creyeron en parte la versión de Albornoz. “El Tribunal considera que de las actuaciones surgidas en Autos a propósito de la presunta violación de la prisión domiciliaria por parte del imputado Albornoz no resulta posible concluir fehacientemente que (...) el imputado Albornoz haya violado su prisión domiciliaria”, opinaron Carlos Jiménez Montilla y Gabriel Casas, quienes decidieron “no hacer lugar a la solicitud de revocación de la prisión domiciliaria del Albornoz, efectuada por el Ministerio Público Fiscal”.
Fuente:TiempoArgentino
Roberto Heriberto “El Tuerto” Albornoz
FuenteFoto:Web
Por torturas y vejámenes a una detenida
Bussi y Menéndez enfrentarán otro juicio en Tucumán
Publicado el 4 de Agosto de 2011
Por Ramiro Rearte desde Tucumán para Tiempo Argentino
La sobreviviente Emma Aguirre relató que el propio ex gobernador daba las instrucciones.
El juez Bejas tomó como eje central de su acusación la declaración de Aguirre, quien sobrevivió a los tormentos recibidos y pudo contar su historia. El tercer acusado es un ex comisario, Miguel Ángel Moreno, quien se desempeño como jefe de la comisaría de la localidad de León Rougés, pero además, el represor se encargó en persona de torturar a Emma Aguirre, lo que contó con detalle frente al magistrado. Es más, Moreno era el que le ponía una botella de agua en la boca durante la tortura.
Según pudo reconstruir Bejas, y consta en la elevación a juicio, “Emma del Valle Aguirre fue secuestrada de su domicilio ubicado en Ruta Nacional 38, antes de llegar al camino viejo que va hacia la localidad tucumana de Simoca. El día de su secuestro llegaron varias personas de civil y, encapuchados, tiraron la puerta de su casa a patadas y la sacaron con los ojos vendados y la subieron a una camioneta. Ya en su lugar de detención ilegal, una noche Aguirre fue sometida a torturas y se le cayó la venda”.
Según su testimonio, vio cómo el genocida Bussi daba las instrucciones mientras era vejada. En la madrugada del 6 de marzo de 1977, la dejaron en el campo, detrás de un montículo de áridos cerca de Acheral.
En la actualidad, tanto Bussi como Menéndez cumplen sus respectivas condenas en lujosas residencias privadas en la localidad de Yerba Buena. Cabe destacar que los dos ex jefes militares durante la dictadura siguen un tratamiento médico por el estado de salud que revisten desde que comenzaron los juicios por delitos de lesa humanidad en Tucumán. Menéndez fue separado del último juicio que se llevaba en su contra por una afección pulmonar (se le preparó una sala en donde siguió las instancias por teleconferencia desde su casa durante el mes de mayo), mientras que Bussi también fue separado de un juicio en su contra (y por ende no recibió condena alguna) por una dolencia cardíaca. Durante el mes de junio, el geronte tuvo que ser internado de urgencia en un sanatorio privado.
Si a partir de este proceso Menéndez es condenado, sumará una séptima sentencia en su contra, ya que fue juzgado en Córdoba y Tucumán por delitos de lesa humanidad.
Se descuenta que el abogado defensor de los genocidas, Cirnio Lo Pinto, pida la exclusión del proceso judicial en los próximos días para evitar que Bussi y Menéndez se siente nuevamente en el banquillo de los acusados.
Fuente:TiempoArgentino
No hay comentarios:
Publicar un comentario