Hay miles de denuncias al año y se atribuyen al crimen organizado
Los desaparecidos mexicanos
Publicado el 26 de Septiembre de 2011
Por Matías Morales
En otra demostración de lo poco que se cotiza la vida en México, desde 2006 se reportaron 15.171 desapariciones. Muerte violenta y trata de personas en el centro de esta situación.
Desaparecen personas de las carreteras mexicanas. Se esfuman como si nunca hubieran existido, mientras se desvanece el mito de que la “guerra” entre cárteles sólo cobra vidas de narcotraficantes y militares. Dan cuenta de ello los migrantes que cruzan el territorio mexicano todos los días, y los familiares del más de medio centenar de víctimas del casino incendiado por los Zetas en Monterrey. Sin embargo, son las 15.171 denuncias que se han hecho desde el 2006 por desaparición, extravío, privación ilegal de la libertad y secuestro, las que conforman el número más elocuente del desamparo que se vive en algunas provincias del país. El crimen organizado avanza sobre los civiles que tiempo antes se sentían seguros, extorsionando a los más diversos comerciantes.
De esta manera, la trata de personas se convirtió, no sólo en un ingreso extra del crimen organizado, o en un reclutamiento forzoso de este, sino también en un medio para cruzar la droga a Estados Unidos. La peligrosidad de las carreteras mexicanas está marcada por los falsos retenes, donde los narcotraficantes se hacen pasar por autoridades estatales y detienen a los autos que pasan por allí; pero también se suman los casos de gatillo fácil de los convoyes militares, que disparan ante cualquier sospecha. Esto influye significativamente en el turismo interno, y a su vez devalúa el valor de las propiedades de los estados más conflictivos. Se estima que el tráfico de vehículos en algunas rutas ha disminuido hasta un 20%, y este número se eleva mucho más durante la noche.
Del total de casos denunciados, el 80% corresponde a las provincias de Nuevo León y Tamaulipas, en donde se han registrado 4832 desapariciones. Dentro de estos dos estados, las carreteras que van de Monterrey y Reynosa a Nuevo Laredo son señaladas por el gobierno de Los Pinos como las de mayor peligrosidad. Después de las dos entidades que acaparan un tercio del total de casos, las siguen Michoacán, Coahuila, Chihuahua, Guerrero, Durango y Baja California. En tanto, las fuerzas armadas aseguran que la escalada de violencia en la zona tiene sus causas en la disputa entre el cártel del Golfo y Los Zetas por controlar las inmediaciones.
Con el hallazgo de fosas clandestinas en San Fernando, Tamaulipas y Durango, los familiares de los desaparecidos acudieron masivamente a las autoridades para ver si identificaban algún cuerpo. Esto encendió la alarma de los servicios de inteligencia de la Secretaría de la Marina, tomando conciencia de la gravedad de la problemática. Los casos de las personas que se esfuman junto con sus vehículos y el resto de sus pertenencias se suceden a pesar de la gran cantidad de puestos de vigilancia que han sido instalados últimamente por las autoridades federales. Por otro lado, a pesar de que el número total de víctimas se cuente desde 2006, el 80% de los casos tuvieron lugar desde el año pasado hasta lo que va de 2011. Cabe destacar también que el 90% de las desapariciones no han sido resueltas, y en muchos casos se carece de rastros, ya que no se han pedido rescates.
Fuente:TiempoArgentino
Horrendo asesinato de una periodista
Publicado el 26 de Septiembre de 2011
El cuerpo decapitado de la periodista mexicana María Elizabeth Macías Castro fue hallado en un monumento público en el centro de la ciudad de Nuevo Laredo, fronteriza a los Estados Unidos. Macías Castro, de 39 años, era jefa de redacción del diario local Primera Hora y denunciaba acciones criminales desde las redes sociales. Su cabeza fue encontrada en la estatua de Cristobal Colón, ubicada en la intersección de las principales avenidas de la ciudad mexicana, dentro de un macetero y junto con un teclado de computadora, un mouse, cables, audífonos y parlantes. En junio de este año, un informe de la ONU había señalado que México es el país más peligroso de América Latina para ejercer el periodismo.
Según la fiscalía que investiga el caso, una organización delictiva dejó un mensaje junto al cuerpo de la periodista en el que se mencionaba que su asesinato estaba vinculado a sus denuncias publicadas en Internet, que eran firmadas bajo el seudónimo “La nena de Laredo”.
Nuevo Laredo es considerada la “capital aduanera de América Latina” por el volumen de operaciones comerciales que registra. A su vez, tiene fuerte presencia narco y de fuerzas de seguridad estatales en la que los asesinatos y los secuestros se han vuelto moneda frecuente en la zona.
Fuente:TiempoArgentino
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