EL MIERCOLES COMIENZAN ALEGATOS EN JUICIO CONTRA GUARDIACARCEL
07 de noviembre de 2011
El Tribunal Oral Federal 1 de La Plata comenzará a oir el próximo miércoles los alegatos en el juicio que se sigue contra un ex guardiacarcel de la unidad carcelaria 9 de La Plata, por las torturas infligidas a 15 detenidos durante la última dictadura militar.
Se trata de Pedro Guerrero, acusado de tormentos agravados, quien es juzgado desde el 25 de octubre último por el Tribunal, integrado por los jueces subrogantes Jorge Chávez, Mario Reynaldi y Héctor Acuña, con la Secretaria a cargo de Maria Verónica Michelli y Karina Yabor.
Una fuente judicial confirmó que "el próximo miércoles comenzará la etapa de alegatos y que ese día se oirán los argumentos de la fiscalía y la querella".
"Y el próximo viernes será el turno para los alegatos de la defensa", detalló la fuente.
Durante la última dictadura, Guerrero se desempeñó como guardia de la unidad penal 9 de La Plata, cuyos detenidos lo apodaban "El Loco y el sátiro de la zapatilla, ya que una de las modalidades de tortura que aplicaba a sus víctimas consistía en golpear con una zapatilla la planta de los pies de los presos de manera intermitente.
Así lo relataron los detenidos en el juicio que se realizó el año pasado, donde 14 penitenciarios de la Unidad 9 fueron condenados por delitos de lesa humanidad.
Guerrero no pudo ser juzgado en ese juicio porque permaneció dos años prófugo y al ser detenido ya estaba cerrada la instrucción contra los 14 penitenciarios, no aceptando el Tribunal incorporarlo ya iniciadas las audiencias.
La fiscalía imputó a Guerrero 15 hechos de tormentos agravados, presuntamente cometidos mientras se desempeñaba como guardia penitenciario en la Unidad Penal 9 de La Plata.
Guerrero, al declarar en este juicio, afirmó que "los testigos dijeron haber sufrido golpes de zapatilla, de puños, de patadas....¿hay algún certificado médico de eso?. ¿Cómo puedo defenderme si no hay un solo certificado médico?".
Aseguró que el sistema que regía en el penal para con los presos "no era duro, era apegado a las reglamentaciones".
En esa época, la unidad 9, ubicada en las calles 76 entre 9 y 11, de La Plata, funcionó como un centro de detención legal en el que se albergaron a presos comunes y políticos que eran blanqueados al ser puestos a disposición del Poder Ejecutivo Nacional, a pesar de lo cual no cesaba la aplicación de torturas.
Guerrero recién fue separado del Servicio Penitenciario bonaerense en el 2004, cuando ocupaba la jefatura del penal de Dolores y dos presos denunciaron que los había contratado para matar al camarista de San Isidro Fernando Mariotto y el fiscal general de San Martín, Luis María Chichizola a cambio de drogas, visitas de familiares, y mejoras en su situación.
Fuente:Telam
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