Para restituir a las arcas públicas cerca de 3 millones de pesos supuestamente mal habidos
La Corte ratificó la subasta pública de los bienes de María Julia Alsogaray
El máximo tribunal rechazó un planteo hecho por la ex polifuncionaria menemista, que quiso suspender la medida del tribunal que la condenó por "enriquecimiento ilícito". Entre los inmuebles a vender figura su famoso petit hotel.
Por: Néstor Espósito
Más allá del sentido específico del fallo, se trata de un fuerte aval de la cabeza del Poder Judicial al decomiso de bienes personales para restituir a las arcas estatales los fondos que le fueron sustraídos como producto de prácticas de corrupción.
La lujosa propiedad de 1000 metros cuadrados, situada en la calle Junín al 1400, fue subastada en noviembre de 2009 por 3.680.000 pesos, equivalentes en ese entonces a un millón de dólares. Poco más de dos años después, fue nuevamente vendida pero en esa oportunidad por el doble del dinero.
María Julia Alsogaray siempre resistió la decisión del Tribunal Oral Federal Nº 4 y "pretendía que se suspenda la subasta pública del inmueble".
Los jueces Leopoldo Bruglia, María Cristina San Martino y Jorge Luciano Gorini, basados en una pericia de expertos contadores de la Corte, establecieron que "el enriquecimiento injustificado ascendía a la suma de 1.122.000 dólares".
Convertida en el ícono judicial de los '90, la ex polifuncionaria fue condenada en 2004 a tres años de prisión (de los cuales ya había cumplido casi dos) porque, según el tribunal, no pudo justificar el crecimiento de su patrimonio. El de "enriquecimiento ilícito" es el único delito en el que se invierte la carga de la prueba.
Es decir: el funcionario acusado debe demostrar que el incremento patrimonial está justificado con sus ingresos. En caso contrario, se presume su culpabilidad.
La figura sólo es válida para quienes sean funcionarios estatales y se aplicó por primera vez con condena en octubre de 1999, cuando fue sentenciado a cinco años de cárcel el ex presidente del ex Concejo Deliberante porteño José Manuel Pico.
El tribunal que lo condenó estaba integrado, entre otros, por el entonces juez y luego secretario de Derechos Humanos, el fallecido Eduardo Luis Duhalde. La condena contra María Julia fue confirmada en 2008, pero quedaba pendiente un reclamo de Alsogaray por la subasta.
El 18 de agosto de 2011, la Cámara Federal de Casación Penal desestimó "el recurso de queja interpuesto contra la decisión del Tribunal Oral, que no hizo lugar a la solicitud de la defensa en cuanto pretendía que se suspenda la subasta pública de un inmueble de la imputada".
Para ello, consideró que, pese a que la defensa oficial de Alsogaray, a cargo de Pamela Bisserier, argumentó que "la resolución atacada es arbitraria por exhibir insuperables defectos que la hacen inaceptable", la crítica "no logra demostrar la arbitrariedad que alega, ni se advierte de la lectura de los párrafos del recurso extraordinario a estudio el yerro en el análisis de la admisibilidad del recurso, ni tampoco cuales serían los fundamentos utilizados para rechazar las pretensiones del recurrente, que no sean serios".
Quedaba aún abierta la instancia de la Corte Suprema. Pero en su último acuerdo de 2012 (el mismo en el que rechazó el per saltum planteado por el gobierno para el tratamiento de la Ley de Medios y avaló la prórroga de la cautelar que la mantiene suspendida para el Grupo Clarín), el máximo tribunal consideró que "el recurso extraordinario cuya denegación motiva la presente queja es inadmisible".
En total son tres resoluciones: además del petit hotel, la ex polifuncionaria tenía embargados una cochera y un departamento en la calle Basavilbaso. Los fallos fueron firmados por Ricardo Lorenzetti, Elena Highton, Enrique Petracchi, Raúl Zaffaroni y Carmen Argibay.
Fuente:TiempoArgentino
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