Derechos Humanos
Quedó detenido el ex camarista federal mendocino Carlos Pereyra González
Quedó detenido el ex camarista federal mendocino Carlos Pereyra González
Está imputado por la tortura y el crimen de una joven durante la dictadura en San Luis. Según la causa, fue testigo de todo mientras era funcionario judicial y no hizo nada para impedir el hecho ni por investigarlo años más tarde.
El ex camarista federal de Mendoza, Carlos Pereyra González quedó detenido en una unidad penitenciaria federal luego de presentarse con su abogado en San Luis.
El ex juez estaba prófugo luego de que se ordenara su pedido de captura por estar sindicado como partícipe de casos de delitos de lesa humanidad durante la última dictadura militar.
De acuerdo con la investigación, fue testigo de casos de tortura que terminaron con la muerte de dos militantes. No sólo no actuó como secretario del juzgado federal para evitar que los vejámenes continuaran, sino que tampoco hizo nada para evitar los homicidios.
Pereyra González era secretario del juzgado que estaba a cargo de Eduardo Allende. En tanto, el fiscal de la época era Hipólito Saá. Los tres están ahora presos y a la espera de que el proceso siga su curso.
El expediente se inició a partir de los testimonios escuchados durante el juicio contra los represores en Sna Luis, en 2008. Fue allí cuando testigos recordaron que los tres implicados fueron testigos de la tortura -abuso sexual mediante- de Graciela Fiochetti, de 19 años, quien un rato más tarde de haber sido vista por los funcionarios judiciales, fue ejecutada, luego trasladada a una morgue y finalmente enterrada.
Poco después de esa acusación, Pereyra González presentó su renuncia como integrante de la Cámara Federal de Mendoza. Fue el primer antecedente del desmembramiento ocurrido en ese tribunal por acusaciones de delitos de lesa humanidad. Luis Miret fue destituido y su causa irá pronto a juicio; Otilio Romano está imputado por ser auto de hechos de secuestros, torturas y homicidios y está bajo un régimen amplio de prisión domiciliaria en Chile (se espera que se resuelva su extradición), y Julio Petra renunció para jubilarse, acosado por las denuncias luego de haber beneficiado sistemáticamente a represores que actuaron en Mendoza.
Pereyra González se presentó el viernes con un abogado en San Luis y dijo que quedaba a disposición de la Justicia. Lo hizo después de que la Policía Federal lo fuera a buscar a su casa en Mendoza y a una clínica en Buenos Aires, donde supuestamente esta internada su esposa. Todas las medidas fueron con resultado negativo y el ex camarista fue considerada prófugo.
Fuente:ElSol.online
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