POEMA.

NOSOTROS, LOS MUERTOS
Nuestros cuerpos se secaron,¡ya pasaron tantos años!
Nuestras almas viajan libres por el sitio donde estamos.
Vamos todos siempre juntos,porque juntos nos mataron.
¡ Qué infausto aquel 18 en la sede de la Amia !
Terroristas asesinos nos mataron por la espalda,
sin conocernos siquiera,sin haberles hecho nada ,
se llevaron nuestras vidas,nos dejaron sin mañanas.

Siguió un juego muy macabro con la Causa de la Amia :
encubridores perversos,con órdenes escondidas,
entretejieron mentiras,silenciaron la verdad
y taparon todo el caso con la negra impunidad.
Nosotros lo vemos todo desde el infinito espacio,
esperando la Justicia que hasta ahora nos negaron.
Aguardando resultados estamos siempre al acecho,
¿ O acaso por estar muertos ya no tenemos Derechos?
Que nunca más en la Argentina detonen malditas bombas,
que todos los ciudadanos tengan fresca la Memoria ,
la conciencia popular,la memoria colectiva,
para que a nadie, jamás,le roben en un instante,
el presente y el futuro entre gritos de agonía.
¡Pobres nuestros familiares ! Nadie les tiene clemencia.
Son los únicos que sienten nuestra permanente ausencia.
Muchos ya fallecieron,la pena los destrozó.
Otros,siguen en la lucha cargando con el dolor.
Los ilusionan un día,los decepcionan al otro,
mientras claman exigiendo Justicia para nosotros.
Los meses desaparecen entre esperanzas y desengaños
y así,con mucho pesar,les van pasando los años.
El tiempo no trajo nada de esperados resultados,
para tan horrendo crimen, no hay ningún condenado.
Los asesinos,impunes,disfrutan de libertad,
sabiéndose protegidos,tranquilos y relajados,
viven felices la vida que a nosotros nos quitaron.
Nos mataron por la espalda,no nos dieron tiempo a nada.
no importaron nuestros miedos mientras la muerte llegaba.
Nos robaron los ayeres,el presente y el mañana
a 85 inocentes que hoy tenemos la palabra
porque somos para el mundo,” las víctimas en la Amia ”
Sofía Kaplinsky Guterman 

Este es el último poema escrito por Sofía Kaplinsky Guterman
mama de Andrea Guterman una de las víctimas de aquel 18 de julio