abril 17
El próximo 1 de junio comenzará el juicio contra la organización paramilitar de ultraderecha Concentración Nacional Universitaria (CNU). El tribunal estará conformado por los jueces Víctor Bianco, Elvio Osores Soler y Luis Imas. Los 12 acusados de haber integrado la CNU serán juzgados por los crímenes de ocho víctimas.
La CNU surgió a fines de la década de los 60 en La Plata como una agrupación universitaria de ultraderecha, cuyas raíces bebían del peronismo ortodoxo y el catolicismo preconciliar. Esta organización, fuertemente antisemita, pronto devino en un grupo de choque que se dedicó a perseguir e intimidar a militantes de organizaciones revolucionarias y peronistas de izquierda, principalmente en las ciudades de La Plata y Mar del Plata.
Su recordada aparición pública fue el 3 de diciembre de 1971, cuando una patota armada entró a los tiros a una asamblea que se estaba realizando en la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Mar del Plata y asesinó a uno de sus participantes, la estudiante Silvia Filler, de 19 años.
Pero eso no es todo. Como muestra la investigación que sobre esta organización viene desarrollando el periódico Miradas al Sur, la CNU participó activamente de la masacre de Ezeiza (1973) junto a otros grupos de la ultraderecha peronista apoyados logísticamente por el Ministerio de Bienestar Social de José López Rega y la Policía Federal.
Desde entonces la violencia paramilitar no se detuvo y hasta poco después del golpe de 1976 sus grupos de tareas cometieron atentados, secuestros y asesinatos amparados por el Estado, en algunos casos de manera conjunta con la Alianza Anticomunista Argentina (AAA o Triple A).
Algunos CNU al banquillo
Desde el 1 de junio, Juan Pedro Asaro, Raúl Arturo Viglizzo, Luis Roberto Coronel, Raúl Rogelio Moleón, Juan Carlos Asaro, Mario Ernesto Durquet, Fernando Alberto Otero, Roberto Justel, Marcelo Arenaza, Gustavo Modesto Demarchi y José Luis Granel serán sometidos a juicio por los crímenes de lesa humanidad que se les imputan como miembros de esa organización política. El tribunal estará integrado por Víctor Bianco, Elvio Osores Soler y Luis Imas y se espera la declaración de más de 180 testigos.
Aunque a algunos se los acusa de asociación ilícita y a otros del asesinato de militantes, todos serán sometidos a un juicio por ocho víctimas.
A Enquire “Pacho” Elizagaray, referente de la Juventud Universitaria Peronista, lo mataron de 23 balazos; a Jorge Enrique Videla Yanzi y sus hijos Jorge Lisandro y Guillermo Enrique también los asesinaron a disparos y arrojaron sus cuerpos en el paraje Montemar; al cirujano Bernardo Goldemberg lo asaltaron con ametralladoras en su casa, donde estaba su esposa: el cadáver apareció en las afueras de Mar del Plata con 42 heridas de bala.
El 25 de abril de 1975, dentro de un Peugeot 504 gris quemado, fueron encontrados los cuerpos calcinados del contador publico Daniel Gasparri y Jorge Alberto Stoppani.
Por último, el secuestro y posterior asesinato de María del Carmen Maggi, la decana de la Facultad de Humanidades y secretaria general de la Universidad Católica el 9 de mayo de 1975. Había pasado un mes del secuestro, no se había encontrado el cuerpo -que luego apareció en Mar Chiquita-, pero sí se había ordenado el archivo del sumario judicial. Demarchi era entonces el fiscal federal.
Fuente:Infonews
La CNU surgió a fines de la década de los 60 en La Plata como una agrupación universitaria de ultraderecha, cuyas raíces bebían del peronismo ortodoxo y el catolicismo preconciliar. Esta organización, fuertemente antisemita, pronto devino en un grupo de choque que se dedicó a perseguir e intimidar a militantes de organizaciones revolucionarias y peronistas de izquierda, principalmente en las ciudades de La Plata y Mar del Plata.
Su recordada aparición pública fue el 3 de diciembre de 1971, cuando una patota armada entró a los tiros a una asamblea que se estaba realizando en la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Mar del Plata y asesinó a uno de sus participantes, la estudiante Silvia Filler, de 19 años.
Pero eso no es todo. Como muestra la investigación que sobre esta organización viene desarrollando el periódico Miradas al Sur, la CNU participó activamente de la masacre de Ezeiza (1973) junto a otros grupos de la ultraderecha peronista apoyados logísticamente por el Ministerio de Bienestar Social de José López Rega y la Policía Federal.
Desde entonces la violencia paramilitar no se detuvo y hasta poco después del golpe de 1976 sus grupos de tareas cometieron atentados, secuestros y asesinatos amparados por el Estado, en algunos casos de manera conjunta con la Alianza Anticomunista Argentina (AAA o Triple A).
Algunos CNU al banquillo
Desde el 1 de junio, Juan Pedro Asaro, Raúl Arturo Viglizzo, Luis Roberto Coronel, Raúl Rogelio Moleón, Juan Carlos Asaro, Mario Ernesto Durquet, Fernando Alberto Otero, Roberto Justel, Marcelo Arenaza, Gustavo Modesto Demarchi y José Luis Granel serán sometidos a juicio por los crímenes de lesa humanidad que se les imputan como miembros de esa organización política. El tribunal estará integrado por Víctor Bianco, Elvio Osores Soler y Luis Imas y se espera la declaración de más de 180 testigos.
Aunque a algunos se los acusa de asociación ilícita y a otros del asesinato de militantes, todos serán sometidos a un juicio por ocho víctimas.
A Enquire “Pacho” Elizagaray, referente de la Juventud Universitaria Peronista, lo mataron de 23 balazos; a Jorge Enrique Videla Yanzi y sus hijos Jorge Lisandro y Guillermo Enrique también los asesinaron a disparos y arrojaron sus cuerpos en el paraje Montemar; al cirujano Bernardo Goldemberg lo asaltaron con ametralladoras en su casa, donde estaba su esposa: el cadáver apareció en las afueras de Mar del Plata con 42 heridas de bala.
El 25 de abril de 1975, dentro de un Peugeot 504 gris quemado, fueron encontrados los cuerpos calcinados del contador publico Daniel Gasparri y Jorge Alberto Stoppani.
Por último, el secuestro y posterior asesinato de María del Carmen Maggi, la decana de la Facultad de Humanidades y secretaria general de la Universidad Católica el 9 de mayo de 1975. Había pasado un mes del secuestro, no se había encontrado el cuerpo -que luego apareció en Mar Chiquita-, pero sí se había ordenado el archivo del sumario judicial. Demarchi era entonces el fiscal federal.
Fuente:Infonews
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