SANTA FE: OTRA VEZ, PRISIÓN DOMICILIARIA PARA UN GENOCIDA.

31 de diciembre de 2016
LOS CAMARISTAS RIGGI, CATUCCI Y GEMIGNANI LO HICIERON DE NUEVO 
Otro regalito de Casación 
La sala 3 de la Cámara Federal concedió en el Día de los Inocentes la prisión domiciliaria al coronel Carlos Enrique Pavón, condenado por suprimir en la dictadura la identidad de la niña Paula Cortassa, tal como antes hizo con Vera Candioti El coronel Pavón al ingresar al tribunal. Ya está en su casa.

El coronel Pavón al ingresar al tribunal. Ya está en su casa. (Imagen: Eduardo Seval )
Por Juan Carlos Tizziani 
Desde Santa Fe 
La misma sala 3 de la Cámara Federal de Casación Penal que la semana pasada otorgó la prisión domiciliaria al ex juez de Menores Luis María Vera Candioti, ahora le concedió el mismo beneficio al coronel Carlos Enrique Pavón y con el mismo libreto de la defensa: "elementales razones humanitarias". Los dos cumplían sus condenas en el penal de Ezeiza ‑Vera Candioti, a 15 años de prisión, y Pavón, a 13 años‑ por borrarle la identidad a una niña desaparecida, Paula Cortassa (María Carolina Guallane), en 1977; pero sólo estuvieron presos ocho meses. El ex juez salió porque tiene 76 años y "salud frágil", y Pavón, de 67, por dolencias cardíacas, "hipertensión" y "hemorroides", entre otras. Los jueces Eduardo Riggi, Liliana Catucci y Juan Carlos Gemignani firmaron la salida de Vera Candioti antes de Navidad, el 23 de diciembre, y la de Pavón, el 28, Día de los Inocentes, para que ambos puedan festejar el Año Nuevo en casa.

Un relevamiento de la unidad del Ministerio Público a cargo del fiscal Martín Suárez Faisal que investiga los crímenes del terrorismo de estado precisó que en Santa Fe hay 41 detenidos por delitos de lesa humanidad, entre procesados y condenados, pero ‑con la salida de Vera Candioti y Pavón‑ la mayoría tiene arresto domiciliario: 25 sobre 41. La lista no incluye a las dos condenadas por la apropiación del nieto 120: Cecilia Góngora de Segretín (a ocho años de prisión) y la médica Elsa Gladys Nasatsky (a seis años), que seguirán en libertad hasta que la sentencia quede firme.

Paula Cortassa tenía un año cuando sobrevivió a la masacre de su familia, en febrero de 1977, en Castelli al 4500. Su mamá, Blanca Zapata, estaba embarazada a término y su papá, Enrique Cortassa, sigue desaparecido desde entonces. El Tribunal Oral de Santa Fe que juzgó el caso sentenció que la niña también estuvo desaparecida "dos meses junto a su padre en algún centro clandestino" y concluyó que Vera Candioti y Pavón participaron en "un plan general destinado a privar a la menor de su identidad y alejarla de sus familiares biológicos". El tercer condenado por el hecho es ex coordinador del Area 212, Juan Calixto Perizzotti, a prisión perpetua, por el homicidio de 16 militantes montoneros, entre ellos los padres de Paula.

El último fallo de Casación del Día de los Inocentes completó el cuadro. Los tres condenados por el "plan" que "privó" de su identidad a Paula Cortassa por más de 20 años están en prisión domiciliaria: Vera Candioti, Pavón y Perizzotti, este último en su casa en el barrio de Guadalupe, donde cumple tres condenas, la última a perpetua. El Tribunal Oral de Santa Fe le había negado la domiciliaria a Pavón porque "no existen razones" y tiene menos de 70 años. Sin embargo, Casación se la concedió por su "delicado estado de salud" y mencionó las dolencias: "patología coronaria", "hipertensión", "hemorroides" y "divertículos", entre otras. "Ante este cuadro de situación no se requiere mucho esfuerzo para advertir que el estado de salud de Pavón, a quien se le practicó un doble 'by pass' en 2011, permite que su caso" pueda incluirse en el régimen de "detención domiciliaria", dice el voto del juez Riggi. En el verano de 2013, Pavón había pedido autorización para viajar a Brasil cuando estaba excarcelado por el caso Cortassa desde 2009. Según Riggi, "son exclusivamente elementales razones humanitarias y de salud las que imponen conceder el arresto domiciliario a Pavón" para "paliar los riesgos que representa para su salud la detención en un penal". Y acerca del "peligro procesal", dijo que el Tribunal omitió "explicar cómo una persona de 67 años, con las serias patologías médicas que padece, se encontraría en condiciones de fugarse y sobrevivir en la clandestinidad". Sus colegas Gemignani y Catucci coincidieron con Riggi.
Fuente:Rosario12