9 de abril de 2017

SALTA: PARA EL FISCAL FEDERAL AMAD - LA POLICÍA "SOCIO INSOSLAYABLE" PARA LA REPRESIÓN DE LOS 70.

PARA EL FISCAL FEDERAL AMAD 
La Policía "socio insoslayable” para la represión en los '70
El fiscal general Carlos Amad sostuvo ayer que la Policía de Salta “era el socio insoslayable” de las Fuerzas Armadas para llevar a cabo la represión en la provincia, dado que contaban con el conocimiento del lugar y su estructura desplegada en todo el territorio. 04 abr 2017 

Marcos Romero, Juan Manuel Sivila y Carlos Amad. 
“(La Policía) fue el mejor socio que pudieron haber tenido las fuerzas usurpadoras que causaron el golpe del 24 de marzo de 1976”, aseguró el fiscal, quien insistió en que la represión se ensañó particularmente con personas que tenían sensibilidad social que militaban en partidos de orientación izquierdista y que llevaban a cabo tareas solidarias.

El fiscal acusó a los ex jefes policiales Miguel Raúl Gentil, Virtom Modesto Mendíaz, Joaquín Guil y Arturo Madrigal. Los alegatos fiscales concluirán en lunes próximo. Amad, que alcanzó a exponer sobre 18 víctimas de los crímenes de lesa humanidad que se juzgan en este noveno proceso oral y público ante el Tribunal Oral en lo Criminal Federal 1 de Salta, comenzó alegando sobre seis detenidos de-saparecidos vinculados a la Universidad Nacional de Salta (UNSa): Carlos García, su mujer Nora Saravia; Carlos Rivero; Pedro José Tufiño, Raúl Machaca y Daniel Loto Zurita.

Por los secuestros y desapariciones de García, Saravia, Rivero y Tufiño, cometidos entre el 14 de mayo y el 13 de agosto de 1976, acusó a Gentil, ex jefe de la Policía salteña, y al ex jefe de Inteligencia policial, Guil. Por Loto Zurita y Machaca, secuestrados en septiembre y octubre respectivamente, acusó al sucesor de Gentil, Mendíaz, y a Guil.

Sobre los tres, el fiscal aseguró que tenían el dominio funcional de los hechos porque ocupaban una posición tal que no podían desconocer los secuestros y de-sapariciones de estas personas. “Los jefes ordenaron esto (…) desde sus posiciones de poder y de socios insoslayables de la muerte”, afirmó.

El fiscal aseguró que estas personas hoy desaparecidas “eran el oponente que se quería destruir” por el solo hecho de que “eran integrantes de centros de estudiantes, del claustro de profesores (…), esa es la verdadera relación entre ellos (…), eran personas jóvenes, (…), que podrían ser nuestros hijos, ejerciendo sus derechos”. Dijo que por razones ideológicas sufrieron “una férrea persecución” y “no sólo que los desaparecieron (a ellos), fueron destruidas sus familias”. 

“Aquí no se ha mostrado el respeto por la humanidad del otro. Aquí se ha cometido la aberración más grande que puede cometer una persona, la desaparición”, aseguró. El fiscal también alegó sobre secuestros y de-sapariciones en el norte de la provincia, hechos por los que está acusado el ex jefe del Regimiento de Monte 28 (con asiento en Tartagal) y jefe del área 322-1, Héctor Ríos Ereñú. Por el caso de Sylvia Sáez de Vuistaz, lo acusó junto a Gentil y a quien era comisario de Embarcación, Arturo Madrigal. También acusó a Ríos Ereñú por la desaparición de la policía María del Carmen Buhller Gómez, en Orán Operativo septiembre.

El fiscal destacó que entre el 2 y 3 de septiembre de 1976 se llevó a cabo un operativo represivo que incluyó secuestros en Orán y Embarcación. En total fueron secuestradas y desaparecidas seis personas: el 2, fueron arrancados de sus casas Sergio Wenceslao Copa y Sáez de Vuistaz; el 3, Gregorio Tufiño (hermano de Pedro), Santos Abraham Garnica (en El Ocultar), David Reina León y Mario Bernardino Luna.

El fiscal los califica de "cobardes"
El fiscal Carlos Amad también acusó a Miguel Gentil y al comandante de Gendarmería Diego Alejandro Varas por la detención ilegal y la desaparición de Osores, de quien dijo que los golpistas lo vieron como un oponente a eliminar precisamente por estas actividades.

El fiscal calificó reiteradamente de “cobardes” a los represores que en 1976 extorsionaron a Osores para que se entregara a cambio de la libertad de su compañera, Pía Vilte, promesa que no cumplieron.
Envío:AgnDDHH

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