Segundo Carafí, pertenece al gobierno porteño y es presidente de la Juventud PRO de San Isidro. Estuvo en la última protesta a favor de genocidas.
Un funcionario del macrismo porteño marchó junto a Cecilia Pando el pasado miércoles para pedir por la libertad de los represores preso. Además junta firmas para derogar la ley bonaerense que incorpora el término “dictadura cívico militar” y el número 30 000 junto a la palabra desaparecidos ya que considera que es una cuestión de “opinión”. Se trata de Segundo Carafí, quien es asesor del Ministerio de Desarrollo Urbano y además titular de la Juventud PRO de San Isidro.
El dirigente macrista subió varias imágenes a sus cuentas en donde se lo ve con la plana mayor del PRO: desde el presidente, Mauricio Macri, a la gobernadora María Eugenia Vidal, el alcalde capitalino, Horacio Rodríguez Larreta, el embajador argentino en Uruguay, Guillermo Montenegro o la mismísima vicepresidente Gabriela Michetti. También tiene instantáneas junto a Franco Moccia, el ministro de Desarrollo Urbano, en donde trabaja como asesor desde diciembre de 2016.
El joven también busca derogar la ley que reconoce a los 30 mil desaparecidos y que el parlamento bonaerense aprobó semanas atrás. “Intentar callar con una ley la voz de muchos argentinos que opinan distinto a la versión popular de los últimos años que habla de ‘los 30.000 desaparecidos’ es atentar contra los valores más profundos de la República”, explica Carafí en la página de change.org en donde subió su petición. “No es libre quien no puede opinar. No es libre quien es condenado por su opinión. No hay República en un país donde sus ciudadanos no son libres”, analizó Carafí y hasta el momento logró reunir casi 5500 firmas en el sitio que habitualmente se usa con fines solidarios.
El funcionario macrista bloqueó el acceso a su cuenta de Twitter. Desde allí había llamado “terroristas” a los trabajadores del Ministerio de Justicia que, nucleados en ATE, protestaron contra la presencia de la defensora de represores, Cecilia Pando. “Esta es la grieta. Defensores de los guerrilleros terroristas intentando frenar un pedido de justicia”, escribió.
La marcha en la que participaba había sido convocada para exigir la libertad de Emilio Nani, un represor que antes de caer preso este año, se definió como “un soldado que no retrocede, no huye y ni se esconde, un soldado que combate”. Según publicó Letra P Carafí invitó al acto para protestar por la “injusta persecución ideológica contra los miembros de las Fuerzas Armadas”.
Fuente:MisionesParaTodos
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