19 de noviembre de 2009

CÓRDOBA: INSPECCIONAN LA QUE FUE LA SEDE DEL D2.

Los jueces inspeccionan hoy la que fue la sede del D-2
El horror y la memoria conviven en el edificio junto al Cabildo Histórico.
Por Federico Noguera
“El ‘tranvía’ era el depósito. En la puerta, un cana o dos para arrastrarnos a la pieza de tortura”. Con esas palabras, la cineasta Ana Mohaded describió el lugar previo al horror dentro el Departamento de Informaciones (D2) de la Policía.
Su testimonio ocupa hoy un enorme acrílico en medio de la habitación, que tenía con dos bancos de cemento que ya no existen y que era una suerte de “sala de espera” que conducía a la de torturas.
TERROR. Las celdas donde eran detenidos los secuestrados por el D2 (La Voz).

INSCRIPCIONES. De los detenidos en las celdas del D2 (La Voz).

Por aquí se estima que pasaron 1.000 personas. Los sobrevivientes Isolina Guevara y Oscar Samamé, testigos del actual proceso, aseguraron que pasaron por el “tranvía”, al igual que Juan Álvarez, ex delegado de Smata y víctima del D2, que recorrió el sitio junto a La Voz del Interior.
Es uno de los 13 espacios que los miembros del D2 utilizaban para las detenciones, las sesiones de tortura, oficinas y otras funciones en el edificio ubicado en el Pasaje Santa Catalina, al lado del Cabildo y frente a la Catedral.
Primero fue una casona familiar, luego sede de distintas dependencias policiales, incluida la del D2, y finalmente Oficina de Asistencia a la Víctima del Delito, hasta que en 2007 comenzó a funcionar el Archivo de la Memoria.
Según Álvarez, los detenidos escribían las paredes de las celdas como “una expresión de fe. Son grafitis con los que quisimos expresar lo que no pudimos expresar ante nadie, como prueba del cautiverio”.
A dos metros de allí, en el patio, hay una puerta y escaleras que llevan al derruido y húmedo sótano con un ventiluz. “Esto se llenaba y los presos permanecían de acuerdo al criterio de la guardia: bastante tiempo, poco tiempo”, dice este hombre, que estuvo prisionero aquí en 1974.
A un metro del ingreso al sótano sigue estando el altillo. Fue el lugar donde según Guevara, el imputado Miguel Ángel Gómez le ordenó: “Mirame, soy el ‘Gato’, tu torturador”.
Para Álvarez, era un “lugar de vigilancia”, desde el que a través de una ventana se puede ver todavía el patio y las celdas y un edificio de la Catedral. También se mantienen, con modificaciones, lo que fueron la cocina, el comedor, un baño, un sitio para interrogatorios y tormentos (hoy salas de Objetos y Vidas para ser Contadas) y oficinas.
“Reconocer el mapa de los lugares donde nos quisieron borrar como personas es un modo de persistir”, se lee en el acrílico que a metros de la sala de torturas reproduce las palabras de la sobreviviente Mohaded.

MARCAS. Que dejaron los presos del D2 (La Voz).

ESCALONES. Donde los policías del D2 hacían tropezar a los detenidos (La Voz).

"Ha sido un error, se va a tener que ir a su casa"
Una de las víctimas del D2 dijo que eso le dijeron los represores tras la tortura.
Por Federico Noguera
El sobreviviente Carlos Hugo Antón, una de las víctimas de este segundo juicio por la represión, aseguró hoy que fue secuestrado y detenido "por error", según le dijeron miembros del Departamento de Informaciones (D2) de la Policía al liberarlo.
El hombre declaró ante el Tribunal Oral Federal Nº1 que otra de las víctimas, sobreviviente Carlos Jacinto Moyano, fue torturado por ser "gremialista y por defender los derechos de los obreros".
Además, también declarará el policía Carlos Hugo Villarruel, un perito y también podría volver a hacerlo Carlos Arnau Zúñiga, un ex uniformado que fue torturado por el D2 y cuyo se analiza en otra causa.
A cara descubierta.
Antón relató que una tarde de enero de 1977 (el 19 de enero) estaba "comiendo una picada" junto a Manuel Ignacio Reynoso, Rubén Félix Gili y Moyano, en la casa de éste, cuando por la puerta, que estaba abierta, ingresaron "cuatro policías jóvenes a cara descubierta y de civil". "Nos pegan patadas y culatazos y nos ponen contra la pared. Peguntaron quién era Moyano y le empezaron a pegar. A Moyano le decían: ‘Vos sos comunista, del ERP (Ejército Revolucionario del Pueblo). Eran ñatos (policías) armados", narró.
Durante el allanamiento ilegal en el que les dijeron que cerraran los ojos, Antón recordó que "Gili pidió explicar que vivía al frente de la casa de Moyano y le pegaron".
Después contó que los maniataron y a él y a Gili lo introdujeron en una Renoleta y Moyano y Reynoso en un Falcon. "De allí, nos llevaron a la Jefatura (de Policía, al lado del D2)".
"Firmá acá". Según rememoró, los policías "tomaron (la avenida) Colón, Rivadavia, San Martín y a los cuatro nos bajaron en el Pasaje Santa Catalina. Nos pidieron el nombre, me sacaron 25 pesos y me dijeron. ‘Firmá acá’. Y yo firmé. Los cuatro firmamos".
"Ahí adentro nos vendan y nos maniatan", añadió y relató que a él a y Gili los sentaron en un "banco de mármol". "Gili me decía: ‘No hablés, no hablés’. Teníamos miedo", indicó.
Desde ese banco, según graficó Antón, "sentía a Moyano a dos ambientes más allá. Lo escuché llorar y quejarse. Me cagan de una trompada, y me dicen: ‘El turista este’. Pum, una patada porque yo estaba con short y ojotas".
Cuando Marcelo Arrieta, defensor oficial del ex policía e imputado del Miguel "Gato" Gómez le preguntó a Antón cómo sabía que había más detenidos que ellos cuatro en el D2, el testigo respondió que porque "sentía otras respiraciones".
El testigo manifestó además que tras permanecer sentado en el banco, lo interrogaron y que le dijeron: "Usted ha sido un error, no hay nada contra usted. Se va a tener que ir a su casa’". Luego de unas horas de permanecer en cautiverio, recuerda que le abrieron la puerta y a él y Gili, los dejaron en la plaza San Martín: "Salí con Gili, pero Moyano quedó. Y al otro día le avisé a la madre de Moyano que él estaba en la Jefatura".


Sobreviviente no reconoció a uno de los imputados
Por Federico Noguera

El sobreviviente Carlos Cristóbal Arnau Zúñiga, quien ya había declarado por su secuestro, no reconoció hoy al ex efectivo del Departamento de Informaciones (D2) de la Policía Luis Calixto Flores como uno de sus torturadores
Flores es uno de los imputados por el crimen del subcomisario Ricardo Fermín Albareda, ocurrido en 1979. Sin embargo, las partes buscan determinar más nombres de posibles torturadores que hayan actuado en distintos años, incluso durante el secuestro y detención de Zúñiga, en 1976, por el que Flores no está involucrado judicialmente.
La semana última, Zúñiga declaró que dos policías, "Chato" Flores y el "Gato" Flores, fueron dos de sus torturadores y que, tras su liberación, halló a "Gato" Flores en la calle.
En ese momento, lo describió como "bajo, moreno y alcohólico". En la audiencia de hoy, el Tribunal Federal Nº1 le preguntó a Zúñiga si identificaba a Luis Calixto Flores y si lo reconocía como el "Gato" Flores, a lo que respondió que "no".

El miércoles 25 comienzan los alegatos
Mañana ( por hoy) habrá inspecciones oculares en ex sedes del D2. No se pudieron completar los testimonios y habrá otros tres testigos el viernes.
El Tribunal Oral Federal Nº1 adelantó hoy que el miércoles 25 de este mes comenzarán los alegatos de la querella y está previsto que esa semana alegue también el fiscal del segundo juicio por la represión en Córdoba.
El juez Jaime Díaz Gavier dijo que se estima que la defensa de los imputados iniciará sus alegatos el martes 1º de diciembre, tras lo cual, el cuerpo judicial deberá fijar las fechas para el veredicto y los fundamentos de la sentencia.
Para el querellante de Hijos, Martín Fresneda, a mediados de ese mes se conocería la sentencia. Inspecciones.
Las inspecciones se realizarán mañana en la actual sede del Archivo de la Memoria, en el Pasaje Santa Catalina y al lado del Cabildo, donde funcionó el D2 hasta que se trasladó a Mariano Moreno y Caseros, donde hoy existen dependencias del Eter de la Policía.
Antes ya hubo una inspección en la Casa de Hidráulica, el ex centro clandestino de detención del D2 que funcionó a metros del paredón del dique San Roque.
Díaz Gavier rechazó los pedidos de la querella de que algunos sobrevivientes participaran de las inspecciones de mañana.
“Este Tribunal no estima necesaria la presencia de (los ex policías) Olegario Martínez y Luis Urquiza y (los sobrevivientes) Raúl Morales y Carlos Moyano, porque ya declararon”, dijo en respuesta a Martín Fresneda y María Elba Martínez.
De esta forma, sólo concurriría al ex D2, de calle Mariano Moreno, el imputado César Armando Cejas, ex segundo jefe de de la Dirección General de Inteligencia, según dispuso el Tribunal.
Por otro lado, la prensa sólo ingresaría al D2 de Pasaje Santa Catalina, ya que algunas versiones dijeron que no podría hacerlo donde hoy funciona el Eter.
Últimos testimonios.
El Tribunal tomará declaración este viernes a los sobrevivientes Juan José López, Lilia Piotti de Salguero y de un perito calígrafo.
El secretario Pablo Bustos Fierro solicitó que se incorpore por lectura el testimonio de Carlos Hugo Villarruel, ex policía del D2, quien debido a que está hospitalizado no podrá declarar. “Hoy se le va a amputar una pierna”, informó Bustos Fierro.
El jefe de Administración de Personal de la Policía, comisario inspector Jorge Omar Nieto, declaró esta mañana y continuará por la tarde cuando se lo interrogue por el período de licencia del imputado Miguel Ángel Gómez.
Gómez declaró la semana pasada que él no torturó a Isolina Tránsito Guevara, quien lo identificó como uno de sus verdugos, y que durante los días que la mujer dijo haber ingresado al D2 él estaba de licencia
(Fuente:Rdendh-Lavoz).

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