27 de diciembre de 2009

IDENTIFICAN EN ESTADOS UNIDOS RESTOS DE DESAPARECIDOS EN ARGENTINA.

Identifican en EEUU más restos de desaparecidos en Argentina
sábado 26 de diciembre, 5:26 PM
WA
SHINGTON (AP) - Victoria Avila tenía un año cuando su padre desapareció, secuestrado por agentes de la dictadura militar argentina en 1977.Desde hace unos pocos meses, Víctor Hugo Avila ha dejado de ser un desaparecido.
Gracias a sofisticados análisis de ADN realizados en un laboratorio de Lorton, Virginia, científicos estadounidenses están ayudando a que familiares de personas desaparecidas hace tres décadas identifiquen los restos de sus seres queridos. Tan sólo en este año identificaron los de 42 personas.
Los análisis de este tipo no son nuevos, pero los avances en la tecnología hacen que resulten más baratos y rápidos, lo que ayuda a acelerar el proceso, alentando las esperanzas entre sus familiares de que en los próximos años la ciencia contestará las preguntas dolorosas que dejó la dictadura de Argentina, de 1976-1983.
Para Victoria Avila, quien tienen 33 años, el saber cuál fue la suerte de su padre le sacó una espina que tenía clavada.
"Fue una sensación extraña, una especie de felicidad. Si bien no está vivo, al menos tenemos sus restos", expresó Avila en su casa en las afueras de Buenos Aires. "Después de 32 años, mi madre finalmente puede decir que es una viuda. No es simplemente que ahora sepa adónde llevarle flores. En cierto sentido, finalmente está con nosotras".
La identificación de los restos de Avila comenzó con la exhumación de fragmentos de huesos en Argentina y terminó en el laboratorio del Bode Technology Group en las afueras de Washington, donde se están comparando los esqueletos de unas 600 personas con miles de muestras de sangre suministradas por familiares de desaparecidos.
Oficialmente, en Argentina se han reconocido 12.000 desapariciones, pero agrupaciones defensoras de los derechos humanos dicen que hubo unas 30.000.
Una agrupación independiente, el Equipo Argentino de Antropología Forense, encabeza los esfuerzos para exhumar tumbas e insta a los parientes a que suministren muestras de sangre.
Luis Fondebrider, presidente de la agrupación, le ha dado a muchas familias la noticia de que se identificaron los restos de un pariente y dice que a menudo le preguntan si fue torturado, algo que es casi imposible determinar. Dijo que se le da a los familiares la opción de ver los restos en el laboratorio.
No queda nada, ni cabellos, ni piel ni ningún rasgo típico de una persona, pero el contacto con los restos de todos modos genera emociones profundas, llanto y alivio.
Fondebrider dice que un individuo que pidió ver los restos de su padre llevó una guitarra y se puso a cantarle una canción al esqueleto, frente a su hijo presente. "Creo que el hombre, con esa canción, estaba tratando de vincular de algún modo las tres generaciones", comentó Fondebrider.
El equipo de antropólogos forenses funciona desde hace años y tiene proyectos en decenas de países, pero su campaña se intensificó hace dos años, cuando comenzó a exhortar a los familiares de desaparecidos a que entregasen muestras de sangre. Llegó a colocar avisos en la televisión y carteles en partidos de fútbol.
El Congreso estadounidense aportó 1,4 millones de dólares que costearon los gastos de los dos primeros años y el gobierno argentino se hará cargo del próximo año.
Bode es un laboratorio privado que hace análisis de ADN para las fuerzas de seguridad.
Los científicos almacenan los huesos congelados para preservar el poco ADN que queda luego de tres décadas expuestos a distintas temperaturas.Para extraer el ADN, pulverizan pedazos de hueso, mezclan al polvo con líquidos y provocan reacciones químicas que producen muchas copias del ADN.
Para evitar la contaminación, usan guantes, delantales y máscaras, y manipulan los huesos debajo de una campana.
"Es algo mucho más complejo que lo que uno ve en series como 'CSI'. Es un proceso de varios días, que requiere años de experiencia", expresó el ejecutivo de Bode Ed Huffine.
Extraer el ADN de las muestras de sangre es mucho más sencillo.Los científicos preparan fichas del ADN extraído de huesos y sangre y las comparan mediante computadoras. Cuantas más muestras de sangre de parientes de un desaparecido hay, mejores son las posibilidades de emparejar dos muestras idénticas.
Cuando hay dos muestras idénticas, se estudian en Argentina los datos personales y antecedentes médicos de la supuesta persona antes de confirmar su identidad. En estos momentos se trata de confirmar las identidades de un centenar de personas cuyo ADN coincidió con el de muestras de sangre.
Los antropólogos exhumaron restos enterrados en todo el territorio argentino y trataron de reconstruir los esqueletos. Algunos desaparecidos fueron arrojados al mar y sus restos aparecieron en las orillas, según Mercedes Doretti, fundadora del equipo de antropólogos forenses.
"Algunos restos son irrecuperables", manifestó Doretti.
La agrupación tiene muestras de sangre de unas 6.000 personas con familiares desaparecidos y cuenta ahora con un laboratorio genético en Córdoba, Argentina, que en el futuro podrá hacer los análisis.
Algunos familiares de desaparecidos se niegan a dar muestras de sangre por razones políticas o religiosas. Otros simplemente dicen que no quieren abrir viejas heridas.
La identificación implica que "ya no hay esperanzas de que la persona esté viva.
Es la confirmación de la muerte y eso es algo duro de aceptar", dijo Doretti.
Cuando se identifica a una persona, a veces surge información relevante. En el caso de Avila, por ejemplo, se determinó que su padre murió 10 días después de ser secuestrado, lo que implica que no sufrió mucho tiempo.
Los huesos del padre de Victoria Avila fueron exhumados de una tumba común a 20 cuadras de su casa.
"Me complace poder decir que está aquí", dijo la mujer.
Alicia Partnoy, profesora asociada de la Universidad Loyola Marymount de Los Angeles que estuvo presa en Argentina en 1977 y luego se fue exiliada, dice que la identificación de las víctimas representa una victoria sobre un régimen brutal.
"En el momento en que le damos un nombre a los restos, deja de ser un desaparecido", expresó. "Es una forma de contrarrestar lo que fue el objetivo de los militares, que era borrar a esta persona de la faz de la tierra".
(Fuente:Rdendh).

No hay comentarios: