Documento inédito: el legajo del D2 de Cecilio Kamenetzky
Allí constan los seguimientos al estudiante asesinado y los informes reservados sobre sus actividades y vínculos.
Recortes de los avisos necrológicos publicados en el diario EL LIBERAL con las personas que acompañaban a la familia Kamenetzky en el duelo, que fueron incluidos en el legajo.
- Desde hace un tiempo nos están vigilando.
- ¿Quién?
- ¿Ves aquella pareja que está allá al frente? Fijate, en un rato van a venir otras dos personas y los van a reemplazar.
El diálogo en el que se enmarca esta conversación podría estar extraído de cualquier novela del género policial negro, sin embargo forma parte de una de las etapas más oscuras de la historia reciente del país.
La escena se desarrolla desde la ventana de una vivienda ubicada en la esquina de Roca y Catamarca y continúa con el relevo de dos de los policías “encubiertos” que vigilaban día y noche todos los movimientos que sucedían en el domicilio de la familia Kamenetzky.
La conversación la protagonizan Cecilio -el hijo menor de Elena y Samuel- y su hermana Adela, días antes de que el joven estudiante de Abogacía fuera detenido y trasladado hasta el Departamento de Informaciones Policiales (DIP), denominado la “Side santiagueña”.
El hecho fue narrado por Adela Kamenetzky en las instancias del proceso oral y público y confirmado con el testimonio de Delia Miriam Carreras, una ex policía arrepentida que desempeñó sus funciones en la DIP y que afirmó que junto con Ramiro López Veloso, fueron dos de los policías que realizaron el seguimiento a la familia del estudiante desde una casa vecina ubicada en calle Catamarca.
Los movimientos de “Cacho”
Recortes de los avisos necrológicos publicados en el diario EL LIBERAL con las personas que acompañaban a la familia Kamenetzky en el duelo, que fueron incluidos en el legajo.
A horas del reinicio del juicio en el que se investiga el asesinato de Cecilio Kamenetzky por el que se encuentran imputados Musa Azar Curi, Tomás Garbi y Ramiro López Veloso, responsables del aparato represivo local, EL LIBERAL tuvo acceso exclusivo al legajo que será incorporado como prueba documental y en el que se realiza un informe exhaustivo con cada uno de los movimientos que realizaba el joven.
En el “Archivo ‘I’ Nº 11850” se describe minuciosamente la filiación “civil, morfológica y cromática de Kamenetzky”, así como también se adjuntan recortes periodísticos de la época en el que se informa que la Justicia Federal “dispuso la prisión preventiva de 20 integrantes del proscripto Partido Revolucionario de los Trabajadores que desarrollaban ilícitas actividades en nuestra provincia”.
“Cacho”, tal cual el alias con el que identifican a Kamenetzky, es descripto por el personal policial de cutis blanco, cabello castaño, cara afeitada, de estatura mediana, ojos marrones, boca mediana y labios medianos, entre otras características físicas.
El detallado documento se complementa con los informes en los que se narran las actividades sociales que desarrollaba el joven estudiante hasta ser detenido sin orden judicial en su casa y trasladado hasta las dependencias de la “Side”, lugar en el que viviría la última etapa de su vida y seguramente las más dolorosa no sólo de él y de sus seres queridos, sino también de la vida institucional de un país que 34 años después intenta cerrar sus heridas.
Las declaraciones de Cecilio a la Justicia
Cecilio Kamenetzky fue indagado por la Justicia federal el 2 de septiembre de 1976, casi un mes después de haber sido detenido ilegalmente por el grupo de tareas de Musa Azar Curi. Según el acta, el estudiante declaró que había participado como colaborador y luego como simpatizante del Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT) a través de un frente juvenil, con participación de estudiantes universitarios.
De acuerdo con la indagatoria, su primer acercamiento con la organización política fue a fines de 1974, cuando conoció a Julio César “Lito” Salomón, quien lo introdujo al partido. Indicó que la misión asignada, ya en el 75, era sumar estudiantes universitarios- a un frente estudiantil. También comentó que debía usar un nombre falso por seguridad, y que el suyo era “Cacho”, mientras que el de Salomón era “Alejo”.
En la universidad conoce a quien sería su “responsable”: Mary Noemí Gardella, que se identificaba como “Lucía”.
Tras fracasar en el armado del frente, Cecilio es asignado a un nuevo responsable de nombre supuesto “Carlos” (de apellido Únzaga) y que estudiaba en la Unse, aunque después los roles se invirtieron entre ellos. La actividad del joven universitario –siguiendo con lo consignado en el texto- continuó con un trabajo en el barrio Villa Grimanesa, con el propósito de “captar amigos”.
En la parte final del documento, el joven agregó que también participó de cinco encuentros de comités zonales y que nunca recibió instrucción militar.
PROCESADO - Roberto Díaz integró el grupo de tareas de Azar Curi y está imputado por homicidio en el caso Abdala Auad
Preocupación en organismos de DD.HH. por la excarcelación de un ex represor
Presentarán una queja ante la Corte Suprema y el Consejo de la Magistratura de la Nación en la que objetarán la actuación de la Cámara de Apelaciones que otorgó el beneficio.
El Tribunal Oral Federal (TOF) en función de Cámara de Apelaciones otorgó anteayer la excarcelación de Roberto Díaz, ex integrante del grupo de tareas que comandó Musa Azar Curi en el Departamento de Informaciones Policiales (DIP). Díaz está procesado por delitos de lesa humanidad en varios casos de tortura y por el homicidio del abogado Abdala Auad (durante la dictadura), situación que generó preocupación y el repudio de los organismos de derechos humanos locales que conforman el Colectivo Juicio y Castigo.
A raíz de este fallo, adelantaron que presentarán una objeción ante la Corte Suprema y el Consejo de la Magistratura de la Nación a la actuación que vienen mostrando los integrantes de la Cámara, Pedro Ibáñez, Carlos Jiménez Montilla y Gabriel Casas, al señalar que no es la primera vez que conceden el beneficio de excarcelación a un represor. La defensa de Díaz ya hizo efectivo el pago de la caución real y el ex policía ya gozaría de libertad.
Las asociaciones consideraron un “enorme retroceso” la medida de la Justicia Federal, y un contrasentido a la realización del juicio Kamenetzky, el primero de lesa humanidad en la provincia."
“Estamos preocupados por esta resolución porque Díaz está imputado por las querellas y por la Fiscalía del delito de homicidio del Dr. Abdala Auad”, manifestó Cristina Torres, presidenta de la Asociación por la Memoria, la Verdad y la Justicia, institución donde los organismos brindaron una conferencia de prensa.
“También nos preocupa –agregó- no sólo como víctimas o familiares sino como ciudadanos en general, que a partir de la sustanciación del juicio por el crimen de Cecilio Kamenetzky, hemos empezado a tener el valor de relatar y dar testimonios de los hechos acaecidos por el terrorismo de Estado, e iniciado un proceso de reconciliación del valor Justicia”.
Torres expresó su rechazo al fallo, al decir que obliga a víctimas y familiares de víctimas de delitos de lesa humanidad “a caminar y transitar por los mismos lugares que estos represores lo hacen”. Señaló que Díaz estaba detenido con prisión preventiva desde 2008, en virtud de los numerosos testimonios que acreditan su participación en los grupos de tareas de Azar Curi. “Estos hechos no hacen más que reafirmar un camino de impunidad que habíamos comenzado a quebrar con el juicio Kamenetzky”, se quejó.
Cuestionamientos
Además, cuestionó el modo en que se constituyen los tribunales que deben juzgar y dictaminar sobre estos casos. “Apelamos a quienes tienen que decidir sobre los mismos, al Consejo de la Magistratura y la Corte Suprema, a través de la Comisión de Seguimiento de Juicio de Lesa Humanidad, para que los jueces que intervengan en estos casos tengan probado compromiso, capacitación y solvencia profesional para intervenir”, solicitó Torres, quien adelantó que los grupos de DD.HH. denunciarán las excarcelaciones a imputados en delitos de lesa humanidad ante estos organismos judiciales.
Luis Garay, presidente del Instituto Espacio de la Memoria, se sumó al malestar contra la actuación de la Cámara, y en particular apuntó contra Pedro Ibáñez, al decir que desde su presencia se han comenzado a dar estos tipos de fallos, como por ejemplo la excarcelación a ex militares vinculados a estos delitos. “Hay que tener cuidado con la elección de los jueces”, advirtió.
Julia Aignasse, abogada de la Asociación, expuso que el fallo se basa únicamente en un artículo del Código de Procedimiento Penal que habla sobre la posibilidad de fuga como impedimento para otorgar la libertad a una persona (al considerar que Díaz no se fugaría y que tampoco interferiría en el accionar de la Justicia, como por ejemplo amedrentar a los testigos).
Al respecto, la letrada consideró que es un argumento “sumamente débil”, el expresado por los jueces: “Estamos hablando de cosas que son más importantes, estamos hablando de derecho penal internacional, de los derechos humanos. O sea que todas las medidas judiciales deben ser conforme a este derecho que el Estado está obligado a cumplir por los pactos internacionales y los convenios firmados con otros países”.
Manifestó que Díaz saldrá libre como cualquier excarcelado del derecho común, cuando no reviste la misma situación. “Esto es como un retroceso de la Justicia, cuando habíamos dado un paso enorme al iniciar el debate por el asesinato de Cecilio Kamenetzky”, lamentó.
Los organismos emitieron un documento en el que expresaron su repudio a la excarcelación de Roberto Díaz. El texto tiene la firma de la Apdh; la Asociación por la Memoria, la Verdad y la Justicia, Agrupación La Cámpora, Corriente política Discépolo, Movimiento Libres del Sur, Movimiento Universitario Sur, Barrios de Pie, Secretaría Diocesana para los DD.HH., Pastoral Social-Diócesis de Santiago del Estero, Servicio de Educación Popular y Desarrollo, Red por la Identidad de Abuela de Plaza de Mayo. También cuenta con la adhesión del Instituto Espacio de la Memoria.
El fiscal Gimena apeló el fallo ante Casación
Disconforme con la resolución de la Cámara de Apelación, el fiscal federal general Gustavo Gimena apeló el fallo ante la Cámara Nacional de Casación Penal. En los pasillos judiciales se comentaba el desconcierto que generó la medida a favor de Díaz, ya que está procesado por homicidio. “La Cámara entiende que no es peligroso, que no pone en peligro la acción de la Justicia y que no hay riesgo de que se fugue. El solo hecho que puede aplicársele la prisión perpetua ya hace posible que la persona se fugue”, manifestó el fiscal.
ENTREVISTA - Integrantes Plan de Acompañamiento a Testigos y Querellantes
Caso Kamenetzky: “Se están diciendo muchas cosas que antes estaban silenciadas”
Las revelaciones que ofrecieron los testimonios en el juicio instalaron en la sociedad santiagueña un debate sobre la historia reciente, dijeron desde el equipo de psicólogos.
En diálogo con EL LIBERAL, Susana Habra, Lorena Yanacón y Juan Cantos, integrantes del Plan de Acompañamiento a Testigos y Querellantes de Victimas de Terrorismo de Estado que trabajan en el juicio, advirtieron que “dar el testimonio implica revivir, no es solamente contar sino también volver a pasar y en ese sentido se están diciendo cosas muy fuertes que durante mucho tiempo estuvieron silenciadas y que en muchos casos ni siquiera en sus familias se conocían algunas de estas situaciones, hay una exposición muy grande por parte ellos y de su intimidad. En el caso de las mujeres particularmente estamos viendo situaciones muy dolorosas y muy fuertes, de tener que reconocerlo”.
En el proceso en marcha, están siendo juzgados Musa Azar Curi, Ramiro López Veloso y Tomás Garbi como responsables del crimen del estudiante de 18 años ultimado el 13 de noviembre de 1976.
El plan implementado desde la Subsecretaría de Derechos Humanos de la provincia y del Programa Verdad y Justicia de la Nación está conformado por un equipo interdisciplinario de profesionales propuestos por los organismos de derechos humanos.
Los profesionales explicaron que la tarea que llevan adelante es la de acompañar, asistir y contener.
En ese sentido, los integrantes del equipo destacaron la cobertura y los informes publicados en EL LIBERAL referidos al caso Kamenetzky, porque brindaron “la posibilidad de que puedan aparecer otras historias y que la sociedad pueda conocer lo que pasó, ya que hay mucha gente que a partir de estos testimonios comenzó a reconocer o a contar sus historias, entonces desde ese lugar el valor que tiene el respeto hacia la manera de publicar esos testimonios es fundamental”.
Asimismo sostuvieron que los testimonios producen un gran efectos a nivel social, debido a que luego de ello, “estas personas tienen que volver a vivir, volver a trabajar, tienen que encontrarse con sus vecinos y eso implica muchas cosas”.
“Estamos hablando -añadieron- de personas que han sufrido en su momento un trauma político, una marca muy fuerte con situaciones límite para cualquier ser humano y que eso, ante las políticas de impunidad que hubo en el país, hoy tienen la oportunidad de poder dar a conocer, poder hablarlo y enfrentar una instancia que los legitime para que se haga justicia, que es lo que se necesita para poder empezar a cerrar estas heridas”.
Los profesionales afirmaron que “hubo una sociedad que no se ha querido enterar y que no se ha querido hacer cargo de lo que estaba ocurriendo, otros resistieron y fueron solidarios; pero el mandato del estado terrorista ha sido muy fuerte en ese sentido, entonces es muy importante que se pueda acompañar desde los medios y desde el resto de la sociedad porque es una manera de ir reparando ese entramado que ha sido tan atravesado por el terror”.
Además destacaron que hoy existe una sociedad mucho más dispuesta a escuchar y enterarse. “En otro momento mucha gente no quería conocerla o lo ponía en duda, muchas veces se pensaba que eran inventos o una exageración, los militares se encargaron de decir que se trataba de una campaña de desprestigio”, expresaron.
Insistieron en resaltar el rol que cumplen los medios “porque no toda la sociedad tiene la posibilidad de estar dentro de la sala escuchando y viendo todo lo que pasa, la única posibilidad que tienen de conocerlo que tienen es a través de lo que transmiten los medios, entonces con cuánta responsabilidad y cuidado hay que tratar esta información de cómo la damos, para que los efectos sean positivos y sirvan para construir, sanar, curar, crear lazos y no que tengan efectos negativos”.
REPUDIO A LA EXCARCELACION DE REPRESOR ROBERTO DIAZ
Expresamos nuestro enérgico rechazo a la decisión tomada en el dia de ayer por el Tribunal de Apelaciones para los casos de delitos de lesa humanidad que se tramitan por ante el Juzgado Federal de Santiago del Estero, compuesto por los jueces de la Cámara federal de Tucumán (Dres. Casas y Jiménez Montilla) y presidido por el juez AD HOC santiagueño (elegido por listado de postulantes a conjueces “ad hoc” en la justicia federal), DR. PEDRO IBAÑEZ. Mediante la misma, se concede la excarcelación al represor ROBERTO DIAZ, SOLICITADA POR SU DEFENSOR DR. BAGLI. La excarcelación del represor Roberto Díaz, imputado por la Fiscalía Federal y las querellas de homicidio calificado en el Grupo 3 (correspondiente a las desapariciones forzadas de personas posteriores al 24 de marzo de 1976) en perjuicio del letrado Dr. Abdala Auadt no solo es una decisión que rechazamos sino también fuente de seria preocupación.
Es preocupante no solo para los testigos-víctimas y familiares sino para la sociedad en su conjunto que en este momento y gracias a la sustanciación del juicio por el asesinato de Cecilio Kamenetsky estamos animándonos a denunciar y testimoniar las gravísimas violaciones a los derechos humanos de que hemos sido víctimas y/o testigos (antes y después de la dictadura militar) y que empezábamos a reconciliarnos con el valor justicia y con el poder judicial -que es quien la imparte- pero que hoy, lamentablemente, ante esta decisión de este Tribunal de Apelaciones tenemos la obligación de cuestionar ya que prolonga la impunidad contra la que venimos luchando desde hace más de 30 años .
Santiago del Estero, 08 de octubre de 2010
Firman:
- Asamblea Permanente por los Derechos Humanos
- Asociación por Memoria, Verdad y Justicia – Familiares de Desaparecidos y Ex presos políticos de Santiago del Estero
- Agrupación LA CAMPORA
- Corriente política DISCEPOLO
- Movimiento Libres del Sur
- Movimiento Universitario Sur
- Barrios de Pie
- Secretaría Diocesana para los Derechos Humanos
- Servicio de Educación Popular y Desarrollo.
- Red por la Identidad de Abuelas de Plaza de Mayo
ASOCIACION POR LA MEMORIA, LA VERDAD Y LA JUSTICIA, EX-DETENIDOS POLITICOS Y FAMILIARES DE DESAPARECIDOS
SANTIAGO DEL ESTERO
FuentedeOrigen:ElLiberal
Fuente:Agndh
Juicio por el crimen de Cecilio Kamenetzky:
Un potencial acto colectivo de expiación
Por: Julio Carreras
Las descomposturas de los abogados, que provocaron sendas postergaciones de las audiencias, bien podrían ser una táctica para demorar el fallo, que cada vez se presume con más nitidez como adverso para los represores. O pudieran ser resultado, como en pasillos se comentó, del stress suscitado por las turbadoras declaraciones de los testigos.
Estos brindaron el panorama muy vívido de un infierno de torturas, violaciones, repugnantes abusos, aberraciones maníacas, por parte de los represores, sobre jóvenes y niñas indefensos, que hasta ahora prácticamente se desconocían.
La magnitud de las violaciones a los Derechos Humanos cometidas en el Departamento de Informaciones Policiales y otras dependencias del Estado, durante ese periodo, provoca una conmoción profunda en personas que no las padecieron. El moño negro sobre la puerta del horror lo añadieron la Justicia y la Iglesia Católica. También, durante poco más de un año, un poder político cómplice de aquella máquina de perversa destrucción humana. Supongo que para abogados con verdadero respeto por su profesión, debe resultar como un puñetazo en el plexo solar la constatación de que un juez, designado por poder civil, pueda presenciar torturas a detenidos e incluso participar en ellas. Cuanto más para un sacerdote católico, educado en el ideal de la Imitación de Cristo -quien entregase su cuerpo a los torturadores para la salvación de la Humanidad. Presenciar la conducta de algunos de sus semejantes, haciendo causa común con los representantes del Demonio, para un sacerdote vocacional, debe de ser profundamente desmoralizador.
Dispersión en la tropa defensiva
La estrategia de la defensa parece haber sido preparada como podría hacerse, ordinariamente, para afrontar las evidencias de un crimen común. Por otra parte, las acciones de los defensores se desarrollan bajo parámetros individualistas. Con algo más de coherencia entre Barrojo y Lindow -abogados de López y de Garbi, respectivamente-. Mientras que el defensor de Musa Azar, Pablo Lauthier, hasta ahora atina de vez en cuando a introducir alguna pregunta, que no obtiene mejoras en la posición de su defendido. Este hombre -tucumano, designado por la Justicia-, por momentos parece hondamente conmovido por lo que escucha, de parte de los sobrevivientes, de tan crueles torturas o vejaciones como las que se narran.
Los querellantes, en tanto, ofrecen una impresión absolutamente distinta. Se posicionan sobre el escenario con la actitud de un grupo coherente, cuyas acciones han sido meticulosamente preparadas. Sus intervenciones son precisas, demoledoras para las intenciones de la defensa y las esperanzas de los represores acusados. Hasta el momento, los abogados contrarios no ha podido hallar la más mínima fisura en el poderoso equipo querellante, como para permitirles introducir una cuña desestabilizadora. Por ello la impresión generalizada de que la única expectativa en la que coinciden al menos dos de los defensores, Barrojo y Lindow, es en demorar la sentencia.
años antes de su detención.
Un Cordero conducido al matadero
De los testimonios y pruebas exhibidas surge claramente otro aspecto espeluznante de los crímenes represivos. Mario Giribaldi, de quien los policías acusados dijeran que se había fugado, representa un paradigma vívido del método perverso aplicado contra miles de detenidos por aquellos años. Que superaba en su horror al mero propósito de "obtener datos", con el cual algunos represores, como Seineldín, justificaron a veces las torturas. Ese método era un procedimiento de destrucción escalonada, a través de laceraciones crueles, pero fríamente medidas, aplicadas de un modo regular sobre la víctima, con un propósito diferente al de obtener información policial.
Tal propósito era, posiblemente, utilizar a la víctima como emblema intimidatorio, a la vez de ejercer con él la omnímoda voluntad imperiosa de los depredadores.Era mostrar a los centenares, miles de prisioneros indefensos un desgarrador emblema de lo que eran capaces de hacer sobre cualquiera que osase siquiera la más mínima resistencia hacia sus dictámenes. Y por su intermedio, inmovilizar a toda la sociedad bajo la suspensión de cualquier derecho civil, bajo el fantasma del Terror.
La descripción de Mario con los pies lacerados, cubierto de heridas sin cicatrizar y siendo llevado nuevamente hacia las salas de torturas, toca el máximo límite de comprensión al que pueden llegar las consciencias humanas. Pero no sólo no es nuevo -lo aplicaron los asirios hace tres mil años, los nazis hace setenta-, sino tampoco irracional. Aun siendo abominable, es parte de un plan genocida.
Que se aplicó de modo semejante en todo el país. No después del golpe de 1976, sino ya desde el gobierno peronista, sólo con grados de diferencia, de acuerdo con quien gobernase cada provincia. De tal metodología, Musa Azar era un profesional adelantado. Por eso la semejanza de su conducta con la de otro salvaje represor, quien se hacía llamar "El Chacal": Luciano Benjamín Menéndez.
Jueces, políticos y curas
Si hay algo que desbarata para siempre el equilibrio psicológico de un niño es la perversidad de una madre. Las niñas o niños pueden esperar transgresiones de sus padres, dentro de una cultura machista, además, bastante permisiva hacia sus componentes varones. Pero lo que resulta fatalmente traumático para el superyó es la presencia en el hogar de una madre desleal.
De un modo arquetípico, los poderes públicos representan esa proyección simbólica. Pese a que los argentinos tuvieron numerosas interrupciones militares de sus gobiernos constitucionales, habíamos sido instruidos con una Educación Democrática.
En el inconsciente colectivo aparecía, pues, la figura de la Justicia como una madre, severa a veces pero confiable, ante la cual los ciudadanos comunes podían esperar, aunque más no fuera, una mínima protección contra los abusos de otros poderes desquiciantes.
Incluso en épocas de dictaduras militares, donde -con fallos como el dictado en 1971 por el juez Salvador María Lozada en el caso Swift-Deltec- la Justicia emergía, ante el imaginario colectivo, con un nivel de independencia capaz de sostener el arquetipo.
Pero esta vez fue espantosamente diferente. Y no sólo con la Justicia, sino también con los poderes públicos legítimamente instituidos, como el Ejecutivo entre 1973-76.
Así, los nombres de Antonio Robin Zaiek -ministro de Gobierno de Carlos Juárez-, Santiago Grand, Arturo Liendo Roca, Santiago Olmedo De Arzuaga, Lorna Hernández, emergieron una y otra vez como malsanos partícipes de gravísimas violaciones, no sólo a los Derechos Humanos fundamentales. Sino también a normas legales vigentes en el mundo entero desde hace más de dos siglos atrás.
Con mayor impacto psíquico aún, es figura materna una Iglesia -en este caso, la Católica, mayoritaria y parte del poder estatal durante siglos, en la Argentina. La actuación del presbítero Carlos Luis Marozzi y del canciller del Obispado, Juan Antonio Muñoz, no necesitan argumentación alguna para ser consideradas aberrantes. La ocultación de datos a los prisioneros, por parte de Marozzi, y la acción colaboracionista con los represores, mostrada en los actos de ambos expuestos durante las audiencias, aparecen claramente opuestos a todo precepto cristiano.
Sin duda es necesario, luego de la conclusión de este histórico juicio, donde se analiza el fusilamiento del joven Cecilio Kamenetzky, la continuidad de las actuaciones hacia todos los ámbitos sobre los que se proyectan responsabilidades innegables.Únicamente dicha acción de la Justicia, podrá seguir abriendo el camino para la reconstrucción del Espíritu colectivo de los argentinos. Tan profundamente dañado por el abismo diabólico, en que cayeron casi todas las instituciones del Estado y sus detentadores, durante gran parte de estos últimos años de nuestra Historia.
Fuente:JulioCarreras.
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