Los camaristas Martín Irurzun y Eduardo Farah ratificaron, de esa manera, lo resuelto en primera instancia por el juez federal Sergio Torres quien se opuso a la soltura del represor que actuaba en el centro clandestino de detención que funcionaba en la Escuela Superior de Mecánica de la Armada (ESMA).
En una resolución de tres carillas, firmada el 28 de octubre último y a la que Télam tuvo acceso, los magistrados rechazaron el beneficio solicitado por considerar que en caso de que Siffredi, alias "Pancho", recuperase la libertad existen "indicios objetivos demostrativos de los riesgos procesales de fuga y entorpecimiento de la investigación".
Entre otros centenares de secuestros perpetrados por el grupo de tareas que operaba en la ESMA, el ex jefe naval fue procesado por la privación ilegal de la libertad de la joven sueco-argentina Dagmar Hagelin, en un fallo que fue confirmado por la misma Cámara el 16 de septiembre de 2009.
En esa oportunidad los mismos magistrados tuvieron por acreditada la intervención del marino en los episodios registrados en la mañana del 27 de enero de 1977, en la vivienda de Sargento Cabral 317 de la localidad bonaerense de El Palomar cuando la muchacha, por entonces de 17 años, fue secuestrada "luego de ser herida de un disparo en la cabeza -según surge de la causa hasta aquí efectuado por Alfredo Ignacio Astiz-".
En las 38 carillas de aquel fallo los camaristas afirmaron que Hagelin luego fue "conducida al centro clandestino de detención que funcionaba en la Escuela de Mecánica de la Armada, donde fuera vista hasta aproximadamente fines de febrero de 1977, permaneciendo `desaparecida` hasta la fecha".
Para los jueces el represor "debe responder como partícipe necesario en la privación ilegal de la libertad a la que fuera sometida Dagmar Ingrid Hagelin, al haber brindado con su accionar, una colaboración indispensable manteniendo en el tiempo tal situación".
La Defensora Oficial Natalia Romina Ferrari había apelado la denegatoria de excarcelación afirmando que no se había evaluado "las circunstancias expuestas oportunamente por el encausado que -entiende- aventarían el supuesto de riesgo de fuga, a la vez que consideró injustificada la invocación del riesgo de `distorsionar las pruebas`”.
Sin embargo los camaristas sostuvieron que los argumentos de la defensa "no resultan suficientes para desvanecer la presunción de fuga oportunamente sostenida, máxime teniendo en cuenta que esas mismas circunstancias se verificaban ya a la época de sus incomparecencias ante el juzgado instructor y que motivaran la solicitud de captura a su respecto".
Fuente:Telam
No hay comentarios:
Publicar un comentario