28 de enero de 2011

MENDOZA: DOS NUEVOS TESTIGOS REITERAN ACUSACIONES CONTRA PROCESADOS.

Dos nuevos testigos reiteraron acusaciones contra procesados
En la jornada de hoy declararon dos abogados que relataron que fueron retenidos ilegalmente y torturados en el D2.
jueves, 27 de enero de 2011

Dos nuevos testigos, ambos abogados que padecieron prisión y torturas en cárceles y centros clandestinos de detención, declararon hoy en los juicios orales contra una docena de ex militares, policías y funcionarios judiciales procesados por delitos de lesa humanidad durante la última dictadura militar.

El Tribunal Oral Federal 1 de Mendoza que preside el juez Juan González Macías escuchó hoy las declaraciones de Gerónimo Morgante y de Héctor Rosendo Chávez, militantes en la década de los 70 en el Partido Auténtico.

Ambos testigos enfatizaron desde sus respectivas profesiones de abogados que fueron privados ilegítimamente de su libertad sin tener proceso en contra. Morgante, también dirigente en el ciclismo provincial, declaró que siendo funcionario del ex gobernador Martínez Baca antes del golpe de 1976 en Mendoza, repudió a través de un comunicado que "el ex brigadier Santuccione ordenara colocar una bomba en la casa del entonces mandatario, por lo que fue secuestrado y torturado".

El testigo indicó que en el D-2 sufrió graves torturas, acusación en las que coincidió mas tarde Héctor Chávez, con quien tras el golpe del 76 compartieron celdas y castigos en el U-9 de La Plata.

Chávez, que padeció casi siete años de cárcel, sostuvo que "el terrorismo de Estado le destruyó el vínculo con su familia hasta el punto que en la última etapa de su cautiverio fui trasladado al penal de Rawson".

Consultado por los abogados querellantes sobre pormenores de su captura, relató que fue secuestrado en General Alvear, cerca de la ciudad de San Rafael, en un operativo militar en el que vio al ex capitán Stulbelger, y luego fue trasladado "atado con alambre" en un camión con carpa.

Al terminar su declaración, la querella pidió "incorporar a compulsa al mencionado Stulberger" explicando que de acuerdo a anteriores declaraciones e investigaciones particulares "en San Rafael la cúpula militar estaba comandada entonces por el mayor Suárez, al que seguían en grado y responsabilidad Stulberger y el teniente Guevara".

"Años más tarde, al iniciarse los juicios y acusaciones, el teniente Guevara es condenado a perpetua y el que era su jefe inmediato, el capitán Stulberger, fue beneficiado por el entonces juez Julio Demetrio Petra que lo salvó `por falta de mérito`", fundamentaron los representantes de ex presos y familiares de desaparecidos.

La ronda de declaraciones de testigos continuará el martes de la semana próxima en los tribunales federales de esta capital a los que concurren desde mediados de noviembre amigos y familiares de los declarantes, militantes de organizaciones defensoras de derechos humanos y público en general.
Fuente:LosAndes.com


28 de Enero
LESA HUMANIDAD: EL JUICIO
“El aparato represivo no sólo funcionó con gorras”
Lo afirmó el ex detenido Héctor Chávez, apuntando contra la Justicia federal. También declaró un ex diputado que fue preso político.
Por DANIEL CALIVARES Y ALEJANDRA MOLINA

Gerónimo Morgante afirmó que era peronista desde niño.
Héctor Chávez y Géronimo Morgante fueron dos abogados peronistas detenidos durante la última dictadura militar, quienes, durante la jornada de juicio de ayer, detallaron ante el tribunal los tormentos que les tocó vivir en prisión. Ambos confirmaron que a los detenidos se les propinaban fuertes golpizas, pero Chávez fue un poco más lejos y cargó duro contra los ex jueces Gabriel Guzzo y Guillermo Max Petra Recabarren y el camarista federal Otilio Romano.

Morgante fue peronista desde los diez años, según explicó en el juicio por delitos de lesa humanidad. Su militancia lo llevó a ser diputado provincial en la década del 60 y funcionario de Alberto Martínez Baca durante la gobernación de este. Pero también lo llevó a ser uno de los tantos detenidos que pasaron por el D2 y por la Penitenciaría provincial y que tuvieron el raro “privilegio” de haber sido trasladados en el “vuelo de la muerte”, el mismo que llevó a un centenar de detenidos políticos de Mendoza a La Plata.

Por su parte, Chávez era apoderado del Partido Auténtico, línea ideológica de filo peronista, a la que también pertenecía Morgante. Fue detenido el 19 de marzo de 1976 y liberado el 19 de marzo de 1979. El día de su detención también el Ejército se llevó de su estudio a clientes que lo estaban esperando. Según el relato de Héctor Chávez, “el nivel de sofisticación en la crueldad era sorprendente”.

“A unos les pegaban más que a otros, yo era de los que cobraba parejito todos los días. Varias veces me desmayaba en los interrogatorios, por los golpes, y me despertaba en la celda sin saber cuántas horas de inconsciencia había pasado”, detalló el abogado. En su declaración, el hombre también explicó que estuvo detenido tres años, desde 1976 hasta 1979, sin conocer verdaderamente cuáles fueron los motivos de su aprehensión.

De allí que Chávez cargara duro contra la pata civil del golpe de Estado y, específicamente, contra los ex jueces Guzzo y Petra Recabarren así como contra el juez Romano. “En una oportunidad, con los ojos vendados, durante un interrogatorio personal del Ejército, me informan que habían amenazado al director del penal de Boulogne Sur Mer y que iban a realizar una pericia caligráfica para encontrar al responsable, así que después de golpearme me hicieron firmar.

Yo firmé en mayúsculas y sólo con mi nombre”, detalló Chávez. “Luego comprobé que a ese documento le dieron validez de declaración, era algo grosero en términos legales. Para mí, el aparato represivo no sólo funcionó con gorra, sino también con civiles, como estos jueces (por Petra, Guzzo y Romano), que hacían vista gorda de lo que realmente ocurría”, enfatizó el ex detenido.

LA DETENCIÓN DE MORGANTE. “Yo sabía diez días antes que venía el Golpe”, explicó Morgante, quien agregó que, una vez que se produjo, un grupo de militares fueron a buscarlo a la casa de su hermano y a la suya, pero él se encontraba en San Juan, por lo que, a través de la mujer, se comunicó con el Comando Militar, en donde le indicaron que se presentara en la Casa de Gobierno el 30 de marzo de 1976.

“Fui a la Subsecretaría de Comercio y me dijeron que fuera a la de Agricultura. Como a la media hora llegaron dos conscriptos, me llevaron detenido a la guardia, llegaron cuatro más de civil y me llevaron al D2, me pusieron en sala grande, pero no me golpearon, aunque tampoco me sacaban al baño y debía hacer mis necesidades en latas de leche Nido”, explicó Morgante. El testigo señaló también que, en una oportunidad, le hicieron creer que lo llevaban a Papagayos, lugar en donde, previo al Golpe, habían sido encontrados varios cuerpos. Incluso, le dijeron dos policías que lo acompañaban mientras él iba vendado que lo iban a fusilar.

Finalmente, le ordenaron que se tirara, pensando que había un pozo, lo hizo, y se encontró con que era ripio y que todo había sido un simulacro, ya que nunca se habían ido a Papagayos, sino que estaban nuevamente en la playa de estacionamiento del Palacio Policial. Morgante, quien era miembro del Partido Auténtico y creador de un comunicado en donde se acusó al jefe de Policía Julio César Santuccione de haber colocado una bomba en una farmacia perteneciente a Martínez Baca, explicó que lo interrogaron al menos en tres ocasiones y, en una de ellas, un hombre con acento porteño le preguntó por unas acciones de la bodega Calise, hasta hoy Morgante no sabe a qué se refería.

A los dos o tres días de ese interrogatorio, Morgante partió rumbo a la Penitenciaría, en donde estaría hasta el 25 de setiembre de 1976. “Nos subieron arriba de una camioneta, subimos al avión, algunos de los detenidos llevaban una cinta y les pegaban más que al resto, a otros nos pasaban por encima”, afirmó Morgante. Ese vuelo, al que hizo referencia el testigo, fue a bordo de un avión Hércules, en el que se trasladó a un centenar de presos políticos.

Entre ellos era conocido como “el avión de la muerte o del diablo” “En el avión estaba Di Benedetto, otro hombre de apellido Bonardel, yo y Chávez, también iba un pibe Aquaviva y al lado de él Bustelo”. El destino de todos ellos era la Unidad 9 de La Plata, donde fueron recibidos a los golpes por miembros del servicio penitenciario que los estaban esperando. “A los meses sale en el diario que yo debía salir, alguien dijo que yo era montonero y, por eso, no me fui.

El día que me lo dijeron se iban todos y, a las 21, me llevan a un salón, me dicen que había un problema y, a la medianoche, me dicen que no me iba, porque tenía una orden de captura del 27 de mayo de 1976, cuando yo ya estaba preso. Hoy estoy agradecido de que no me hayan dejado salir, porque los que se iban a esa hora no llegaban muy lejos”. Morgante fue finalmente trasladado a la Penitenciaría provincial en octubre de 1977 y el 2 de junio de 1978 fue puesto en libertad, Según explicó, él no sufrió torturas, pero dijo: “En el penal tengo entendido que a muchísimos los golpearon, eso era vox populi”.
FuentedeOrigen:ElSolDiario
Fuente:Agndh


27 de Enero de 2011
Declaró un preso del D2 que acusó a Santuccione, en los 70, de poner bombas

Gentileza Tribunales Federales
Gerónimo Morgante, ex funcionario de Martínez Baca.
En el marco del juicio por delitos de lesa humanidad que se desarrolla en Mendoza, este jueves prestó testimonio Gerónimo Morgante, un militante peronista de la década del setenta que también fue funcionario de Martínez Baca. Dijo que fue encerrado en el centro clandestino D2 por haber acusado a Santuchone de ser el autor intelectual de poner bombas en la casa del ex gobernador. También disparó contra Cazabán.

Este jueves se desarrolló una nueva jornada del juicio por los delitos de lesa humanidad ocurridos en Mendoza durante la última dictadura militar. Declaró un ex funcionario del ex gobernador Alberto Martínez Baca quien estuvo encerrado en el D2 por haber acusado al brigadier Santuccione de ser el autor intelectual de poner bombas en la casa del ex mandatario provincial

El testimonio fue de Gerónimo Morgante (foto abajo), quien fue militante peronista en la década del 40 y 50 e integrante del Partido Auténtico en los años 70, razón por la cual fue funcionario del gobierno de Martínez Baca.

A Morgante le abrieron una causa por desacato cuando sacó una solicitada en la que apuntaba contra Santuccione de ser el responsable del atentado contra la vivienda del ex gobernador.

Declaró que por esa razón el 30 de marzo o 1 de abril de 1976 (no lo recuerda con precisión) fue detenido y encerado en el centro clandestino de torturas y detención denominado D2.

Relató que allí permaneció poco más de una semana y luego fue pasado a la Penitenciaría donde estuvo un año preso a disposición del PEN (Poder Ejecutivo Nacional).

Lo que le aconteció después a Morgante fue extraño.

El 2 de junio de 1977 el PEN le otorgó la libertad pero permaneció un año más detenido porque la Brigada de Infantería de Montaña 8 no lo liberaba. Es decir, estuvo un año preso sin causa.

También durante su declaración sostuvo que Alejandro Cazabán, actual secretario General de la Gobernación, no era justicialista en 1986 cuando estudiaba derecho. Gerónimo Morgante dijo que el “Chiqui” pertenecía a la Democracia Cristiana y militaba para esa agrupación en la universidad.

La presencia de los acusados en la sala
El tribunal había autorizado a los imputados a no estar presentes durante el debate. El argumento se debía al estado de salud de los acusados debido a que no había médicos para que sean atendidos durante el juicio.

Esta disposición fue rápidamente cuestionada y de inmediato se tomaron medidas.

La Dirección de Derechos Humanos del gobierno provincia consiguió un médico para que haga los controles todos los días en las primeras horas del debate y que un enfermero con un equipo de emergencia y una radio para pedir ambulancias permanezca durante toda la jornada por si algún imputado se descompensa.

Ahora el tribunal debe reconsiderar la propuesta del Ministerio de Gobierno de la provincia.
FuentedeOrigen:Mdzol.com
Fuente:Agndh

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