Para que los derechos crucen la tranquera
El proyecto fija ocho horas de trabajo poniendo fin a la jornada laboral de sol a sol, otorga la jubilación a los 57 años, reconoce horas extra, descanso semanal y condiciones adecuadas de higiene y seguridad. El Senado lo trata la semana próxima.
Por Sebastián Premici
El proyecto oficial beneficia a más de 1,3 millón de peones rurales distribuidos en todo el país.Imagen: AFP
El Frente para la Victoria aprobó ayer a la madrugada el proyecto que establece un nuevo régimen para los trabajadores rurales, por 174 votos afirmativos contra 4 negativos. Si la semana que viene el Senado lo convierte en ley, se reemplazará el actual sistema, que está vigente desde 1980. El proyecto fija ocho horas de trabajo poniendo fin al concepto de jornada laboral de sol a sol, fija la edad jubilatoria en los 57 años con 25 años de aportes, establece que las remuneraciones no podrán ser menores al salario mínimo, prevé horas extra, descanso semanal, condiciones adecuadas de higiene, seguridad y vivienda para los más de 1,3 millón de peones rurales. “Los trabajadores no permanentes del campo son las dos terceras partes de la totalidad de los peones rurales. Con esta nueva norma, tendrán nuevos derechos”, afirmó ayer la presidenta Cristina Fernández de Kirchner. El nuevo estatuto del peón rural fue rechazado por el titular del gremio Uatre, el duhaldista Gerónimo “Momo” Venegas. Los diputados de la CGT, Facundo Moyano y Omar Plaini, tampoco convalidaron la norma. Su principal objeción radica en que la ley disuelve el Renatre, que es un registro de trabajadores gestionado por el Momo. Los diputados radicales de la Federación Agraria, como Ulises Forte y Pablo Orsolini, también criticaron la medida, pero terminaron votando a favor.
El Congreso vivió una madrugada agitada. No tanto por la paridad en los votos –ya que el oficialismo se impuso con holgura– sino por la intensidad del debate. El proyecto de creación del nuevo estatuto del peón rural comenzó a debatirse a la una de la madrugada. La idea original –acordada en Labor Parlamentaria– era pasar a un cuarto intermedio luego de aprobar la ley penal tributaria. Sin embargo, Fernández de Kirchner había dado la orden de aprobar todos los temas esa misma noche.
El Momo Venegas estaba preparando una movilización para el viernes al mediodía en la puerta del Congreso. A partir de la movida del oficialismo, el gremialista se quedó sin demostración de fuerza. De todas maneras, el Congreso quedó totalmente vallado durante la madrugada.
–¡No se pueden cambiar las reglas de juego! –gritó el duhaldista Eduardo Amadeo, no bien Julián Domínguez, titular de la Cámara, anunció que seguirían debatiendo toda la noche.
–¡Chorros, son todos unos chorros! –acompañó Claudia Rucci con el exabrupto, también duhaldista y aliada del Momo Venegas.
Tras ese primer griterío, parte del bloque de la UCR se retiró del recinto, junto a los diputados del PRO y el Frente Peronista. El diputado Francisco de Narváez, ausente durante toda la jornada, llegó a la madrugada, se encontró en el pasillo con Amadeo y Omar Plaini, el diputado del FpV e integrante de la CGT. Los tres se retiraron de la Cámara juntos. “Este proyecto jerarquiza a los trabajadores, equiparándolos en su mayoría con los derechos generales de que gozan quienes se encuentran bajo la órbita de la Ley de Contrato de Trabajo, por lo que constituye un acto de inclusión social”, explicó el chubutense Juan Mario Pais (FpV).
El proyecto votado a la madrugada tiene dos ejes fundamentales. Por un lado, incorpora a los peones rurales dentro de la ley general de trabajo. Y por otro lado, deroga el Renatre y crea una nueva entidad bajo la órbita del Ministerio de Trabajo (ver aparte).
La norma especifica una serie de derechos para los peones de campo, que no estaban contemplados en la ley vigente, que lleva las firmas de Jorge Rafael Videla, Alfredo Martínez de Hoz y Albano Harguindeguy, entre otros. Si bien la oposición cuestionó la “celeridad” en el tratamiento del tema, el proyecto ingresó al Parlamento en junio de 2010, y estuvo frenado tanto tiempo por las comisiones de Agricultura, a cargo –en aquel momento– del radical Juan Casañas, y Trabajo (Héctor Recalde).
El tema que congregó a toda la oposición parlamentaria, al Momo Venegas y a los empresarios de la Mesa de Enlace fue el artículo que promueve eliminar el Renatre y crear una nueva institución bajo el ala de la cartera laboral. “El principal conflicto es que le quitan al gremio (Uatre) la caja que maneja el Renatre y la bolsa de trabajo. La entidad se plantea la defensa del trabajo en blanco, pero en realidad no ha hecho mucho y ha tenido poca coordinación con el Ejecutivo”, había dicho a este diario el diputado Juan Carlos Díaz Roig (FpV).
“Este proyecto tiene claros fines políticos al querer apropiarse de recursos y disolver el Renatre, reemplazándolo por un organismo estatal que deja afuera a los productores y trabajadores”, afirmó la Mesa de Enlace, integrada por la Federación Agraria, Sociedad Rural, Coninagro y CRA, a través de un comunicado.
El rechazo abroquelado también sumó a los diputados de la CGT, Omar Plaini y Facundo Moyano, quienes no estuvieron en la sesión de ayer.
“¿Creés que yo puedo levantar la mano para destruir una organización sindical? El tema es la situación política general (entre el Gobierno y la CGT), porque si no pareciera ahora que yo banco al Momo (y no es así)”, afirmó Facundo Moyano, ayer, en una entrevista por Radio Nacional.
El tratamiento del proyecto continuará el lunes en la Comisión de Trabajo y Previsión del Senado, a cargo de Ana María Corradi de Beltrán (FpV, Santiago del Estero). El proyecto podría convertirse en ley entre el miércoles y jueves de la semana próxima.
NUEVAS CONDICIONES LABORALES PARA LOS PEONES RURALES
“Dejará una marca histórica”
El ministro Carlos Tomada consideró que se ampliarán derechos y la protección del trabajador rural. Criticó la resistencia del gremio del sector, afirmó que “el Renatre tuvo escasos resultados” y manifestó desconcierto por la posición de los diputados de la CGT.
Por Tomás Lukin
Carlos Tomada, ministro de Trabajo, indicó que “en Argentina hay alrededor de 900.000 trabajadores rurales”.Imagen: Dafne Gentinetta
“El nuevo estatuto del peón rural amplía y consolida los derechos de los trabajadores, los vacíos legales de la legislación vigente permitían que los empleadores hicieran cualquier cosa en materia de condiciones laborales”, explicó el ministro de Trabajo, Carlos Tomada. El funcionario destacó la relevancia de los cambios para los asalariados rurales pero consideró que, después de 30 años de “desprotección”, la implementación de los cambios será lenta. A pesar de los cuestionamientos de las cámaras patronales y la Uatre, Tomada reivindicó la decisión de reemplazar el Renatre, el registro de los trabajadores rurales administrado por el sindicato que conduce Gerónimo Venegas y los empresarios del sector, por un organismo estatal. “En sus 10 años de funcionamiento a cargo de la Uatre y las patronales, el Renatre tuvo escasos resultados, no movió el amperímetro del trabajo no registrado que asciende al 62 por ciento y en algunos casos llega al 85 por ciento”, aseveró el ministro.
–¿Por qué es necesario un nuevo marco regulatorio para el trabajo rural?
–La ley que estaba vigente era de 1980 y tenía la firma de Jorge Rafael Videla y José Alfredo Martínez de Hoz. Era una legislación funcional a los intereses de las patronales rurales. La ausencia de condiciones de trabajo mínimas permitía que se llevaran a cabo todo tipo de abusos, como se observó en los distintos episodios de reducción a la servidumbre y condiciones de empleo infrahumanas detectadas a comienzos de año. Esos vacíos legales limitaban la capacidad de intervención del Estado en una actividad que abarca a un amplio grupo de trabajadores permanentes, migrantes y temporales.
–¿Cuántos trabajadores serán alcanzados por la legislación?
–En Argentina hay alrededor de 900.000 trabajadores rurales. Son un colectivo importante donde se registran niveles de trabajo no registrado al ascender al 62 por ciento, cuando la media nacional es 34,3 por ciento, y en algunas regiones la precariedad llega al 85 por ciento de los asalariados. Parece mentira que una actividad con niveles de rentabilidad elevados exhiba esos atrasos. Los empleadores tendrán que buscar nuevas formas de organizar la producción porque la rebaja de condiciones laborales como vía para mejorar la competitividad fracasó. Las nuevas condiciones no implican de-sequilibrios económicos imposibles de cumplir. En todo caso, en el sector de las pequeñas empresas buscaremos los mecanismos para facilitar el progresivo traspaso a la formalidad, pero esa es una lucha que estamos dando en todas las actividades económicas.
–¿Qué cambiará en las condiciones de trabajo de los peones rurales?
–La nueva legislación establece derechos individuales, colectivos y condiciones de trabajo. Son avances sustantivos que hacen a la mejora de la calidad de vida. Se establece la jornada de 8 horas diarias y el esquema de horas extra. Eso no figuraba en la norma anterior y estaba vigente el principio de trabajo de sol a sol. No había horarios establecidos. Pero no sólo se fijan las 8 horas sino que se establecen las 44 horas de trabajo semanales de lunes a sábado, recuperando el descanso semanal. Además, se disponen normas muy precisas sobre las condiciones del hábitat y alojamiento de los trabajadores, aspectos vinculados con la alimentación, el traslado y el acceso a la información, entre otros aspectos. En esas áreas, cualquier medida que quisieran disponer los empleadores era válida. La norma establece derechos colectivos que los trabajadores rurales tenían restringidos. No tenían derecho de huelga y ahora se establece claramente. No tenían negociación colectiva paritaria entre patronales y sindicato. Acá se da un paso concreto y definitivo reconociendo ese instrumento. También se creó una oficina pública de empleo por donde va a pasar todo contrato de trabajo temporario que será un instrumento central para controlar el empleo no registrado.
–El titular de la Uatre, Gerónimo Venegas, consideró que se trata de una “ley malintencionada porque destruye al gremio del trabajador rural”.
–Esta ley forma parte de un grupo de tres proyectos que la Presidenta envió al Congreso para resolver el problema de tres colectivos con altos niveles de precariedad laboral como son el rural, los trabajadores de casas particulares y el empleo a domicilio. No se envió sólo buscando efectos políticos, como plantea Venegas. Nadie conoce quiénes son los secretarios generales de los colectivos comprendidos por las otras dos leyes. Esta ley va a dejar una marca histórica, es la recuperación de los derechos de los trabajadores rurales, pero también es un hito para el resto de los colectivos precarizados. El objetivo de las iniciativas es restituir derechos laborales, en el sector rural son normas que incluso la Uatre propuso en algún momento. Pero además hay que saber que en el medio agrario intervienen diversos sindicatos, muchos de los cuales serán aliados para asegurar el cumplimiento de la ley.
–Los diputados vinculados a la conducción de la CGT no apoyaron la medida y se ausentaron de la votación.
–Me resulta difícil entender por qué los diputados de origen sindical no votaron una ley que amplía y consolida los derechos de los trabajadores.
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“El Renatre no fue eficaz”
El punto más resistido por la Uatre y las cámaras patronales era la eliminación del Registro Nacional de Trabajadores Rurales y Empleadores (Renatre) que era controlado por el gremio.
–El Renatre no fue eficaz para el colectivo de los asalariados rurales. No incidió en la reducción del trabajo no registrado. Tuvo resultados muy pobres. El Renatre se sustituye por un organismo estatal; no se elimina. Hoy el registro es un ente público no estatal donde gobiernan la Uatre y las patronales del campo. El nuevo registro estará a cargo del Estado y los distintos actores participarán de un Consejo Consultivo. El Renatre se creó en 1999 durante el final del gobierno menemista con el objetivo de administrar el sistema de prestaciones por desempleo, fiscalizar las condiciones de trabajo y otorgar la Libreta de Trabajador Rural. El ente se financia con un aporte del 1,5 por ciento de la remuneración por trabajador que debe pagar el empleador. Los ingresos anuales rondan los 340 millones de pesos, pero como el 66 por ciento de los trabajadores son temporarios y la informalidad llega en algunas actividades al 85 por ciento, muy pocos trabajadores accedieron al seguro de desempleo. Las otras actividades que realiza son cursos de capacitación y la contratación de la obra social de la Uatre para dar prestaciones a los trabajadores registrados. Esperamos contar con la colaboración de los sindicatos y empresarios para terminar con el trabajo precario.
El recuerdo de Perón
La presidenta Cristina Fernández defendió el proyecto que crea un nuevo estatuto del peón rural, el cual tuvo media sanción ayer por la madrugada. “La ley que todavía rige sobre el trabajo de los campesinos tenía 147 artículos y solamente ocho se referían a los trabajadores no permanentes, que son las dos terceras partes de la totalidad de los trabajadores del sector. Esta iniciativa restituye derechos para todos los campesinos”, afirmó la Presidenta. Durante el acto que encabezó en Mendoza, la primera mandataria celebró la media sanción al recordar que la primera legislación sobre este tema fue impulsada por Juan Domingo Perón en 1944, la cual permitió que “por primera vez nuestros hombres y mujeres del campo pudieran tener derechos”. Después recordó que los gobiernos militares terminaron con esos derechos adquiridos. En este sentido, el actual régimen fue sancionado en 1980 y lleva las firmas de Jorge Rafael y José Alfredo Martínez de Hoz. Fernández de Kirchner también auguró que la norma pueda convertirse en ley la semana próxima. El texto ya fue remitido al Senado. El lunes, la Comisión de Trabajo y Previsión podrían emitir dictamen.
FuentedeOrigen:Pagina12
Envío:Cecilio M. Salguero
1 comentario:
pres muy especial este anuncio ya que siempre fuimos los ultimos.seria bueno que tambien tengamos un sueldo digno porque somos los marginados del pais -sociedad gobierno y nuestros propios representantes sindicales que no conocen lo que es el trabajo bajo el sol ni el frio.seamos dignos de nuestro trabajo como dice la palabra de DIOS ya que juran por los santos evangelios y no conocen siquiera un versiculo biblico.no connocen verdad alguna para hacer lo que es justo ante los ojos de nuestro PADRE como dicen todos ellos QUE DIOS Y LA PATRIA SE LO DEMANDEN
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