Bajo las ramas de los viejos árboles, pintados sobres telas blancas, las caras de los 35 desaparecidos de Junín sirvieron de telón para el acto 16 por la memoria en Junín. A 36 años del golpe cívico-militar la Plaza 25 de Mayo volvió a cobijar a aquellos que buscan seguir adelante con la profundización de los juicios, por eso se pidió el avance sobre los participes civiles del genocidio.
El acto estaba convocado para las cuatro de la tarde, pero como pasa siempre empezó un rato más tarde. A pesar de ello desde muy temprano las distintas organizaciones sociales y políticas fueron llegando a la plaza, que se transformó en los últimos 16 años en el espacio para la memoria en Junín. En un lugar ganado a la pueblerina costumbre de mirar para otro lado, de no querer ser parte de los reclamos populares.
Con la lectura de un escrito hecho para un desaparecido de Ameghino, cuyo cuerpo fue encontrado por el trabajo del equipo Argentino de Antropología Forense, empezó el acto por el 36 aniversario del golpe. Tras esto la primer oradora fue Susana Nazer, de la agrupación “Memoria, militancia y justicia”, organizadora del acto.
Después Flavio Bojko leyó la solicitada que publicó La Verdad, y se refirió al silencio cómplice de algunos medios de Junín por no publicarla. Además se recordó al artista plástico Horacio Alonso, fallecido el último viernes.
El espíritu del “flaco” sobrevoló todo el tiempo el acto, su recuerdo se hizo presente en cada una de las intervenciones. En el triangulo de la memoria, a pocos metros del improvisado escenario, su escultura quedó plasmada para la eternidad.
Alguna vez esa escultura de Alonso también desapareció. Cuando la colocaron en el año `96, para realizar el primer acto como los conocemos hoy, el Municipio (en aquel momento bajo la orbita de Abel Miguel) lo quitó a los pocos días y los mantuvo “cautivo” sin dar explicaciones. Hizo falta una ordenanza para que el espacio de la Memoria quede oficializado en la plaza.
Maximiliano Torreta, hijo de Hugo Ramón Torreta, habló como todos los años. El recuerdo de su padre, junto al de Norberto Meza y Adrián Romie, tuvo especial importancia ya que son los únicos tres personas desaparecidas y asesinadas en alguno de los centros clandestinos de detención de nuestra ciudad.
También dejó sus palabras el representante del Partido Comunista de Junín, Claudio Torres. Lo mismo que la docente Estela Centeno. Su discurso fue doblemente emotivo, ya que para finalizarlo leyó el poema de Pablo Neruda y Eduardo Carrasca, “Pido Castigo”.
Como todos los años la encargada de cerrar los discursos del acto fue la presidenta de Madres de Plaza de Mayo Junín, Azucena “Coca” Prieto. Como el resto pidió empezar a ahondar en la búsqueda de los cómplices civiles del golpe, de aquellos que fueron participes necesarios de la tortura, del robo y de los asesinatos.
Durante la mañana en el Concejo Deliberante se realizó una sesión especial, en homenaje a los desaparecidos de Junín y para que la memoria no quede fuera del Municipio. Lamentablemente más tarde, un “olvido” hizo que, a pesar de tenerlo pedido desde hace varias semanas, el escenario para el acto nunca llegó.
Fuente:LaVerdad
No hay comentarios:
Publicar un comentario