ROSARIO: PEDIDO DE JUSTICIA PARA MERCEDES DELGADO.
Por justicia para Mercedes
Delgado, militante asesinada en barrio Ludueña
Por Indymedia
Rosario
El martes a la tarde fue asesinada la militante social
Mercedes Delgado, en un tiroteo entre narcos en el barrio Ludueña. Ella
realizaba su tarea en el Centro Comunitario San Cayetano. Una multitudinaria
movilización recorrió las calles del barrio cargada de dolor, reclamando
justicia, denunciando a las bandas del narcotráfico y las complicidades
policiales e institucionales.
Acompañados por el Pocho. Una y otra vez, en murales a lo largo de Ludueña
aparece la imagen de Claudio Lepratti, junto a las hormigas como símbolo de
organización colectiva, rostros de niños y frases que proponen “por un barrio
sin miedo ni violencia”. En ese entorno, en las calles humildes de Ludueña, la
marcha creció cuadra a cuadra, con las compañeras de Mercedes interpelando a
abandonar la indiferencia y acompañar el reclamo de justicia. Y el barrio
escuchó. Cuando llegó a las puertas de la Comisaría 12° eran sensiblemente más
las vecinas y vecinos movilizados.
Ante las cámaras de televisión y algunos efectivos de la seccional, los
familiares y compañeros de militancia leyeron un breve documento interpelando a
la policía y al gobierno: “desde la indignación y la tristeza de haber perdido a
una madre, una compañera, una vecina y una amiga”.
Allí, plantearon: “Mercedes Delgado, una trabajadora social, una mujer
comprometida que con su sonrisa y su fuerza nos empujaba día a día fue asesinada
habiendo recibido el impacto de dos balas el día martes en la esquina de Bielsa
y Garzón. Frente a esta situación exigimos Justicia y reclamamos el compromiso y
la responsabilidad de la policía en el asunto”.
“Decimos Basta. Basta de drogas en nuestras calles, basta de zonas liberadas,
basta de asesinatos, basta de violencia, basta de represión. ¿Hasta cuando los
vecinos tenemos que vivir estas situaciones? Este no es el primer caso que
padece en nuestras calles, pero esta vez nos toca de cerca y este dolor no nos
va a dejar paralizado, no nos va a dejar inertes, sino al contrario, a luchar
que defendamos con Mechu, hoy se hace carne y embandera nuestra causa. El dolor
y las lágrimas hoy nos movilizan para seguir adelante defendiendo nuestro lugar,
nuestros hijos, nuestra familia”.
“Hoy estamos acá pidiendo responsables y exigimos el compromiso de quienes
correspondan. Una vez más la impunidad se nos pega en los huesos, nos hace
lagrimas. La marcha duele en los pies, en la garganta y en el corazón. Una vez
más, pero con más fuerza que nunca decimos Justicia desde las entrañas”.
“Han unido a la pobreza con la maldad”
El sacerdote Edgardo Montaldo, histórico referente del barrio, estuvo
presente, aunque la jerarquía salesiana lo haya corrido de su lugar (y esté
intentando desmontar su trabajo militante, como demostraron ya con el despido de
su compañera Mari Suárez). “Si no reaccionamos vamos a seguir perdiendo gente”
planteó, “por eso este llamado. Lindo el número de gente que estuvo en la
marcha, la actitud que tuvo. Tenemos que trabajar todos. En general se pone la
culpa en los niños y niñas pobres, adolescentes pobres. Han unido a la pobreza
con la maldad, pero esto es un negocio grande que tiene bancada mucha gente, que
viene de arriba y que establecen complicidades entre ellos. Si no nos apuramos,
cada vez van a ser más los chicos que perdamos” concluyó Montaldo.
Por su parte, Gustavo Martínez, de ATE-CTA y compañero de Claudio “Pocho”
Lepratti, señaló que el narco está vinculado a la exclusión y la pobreza, porque
“se cree que no hay futuro, y porque también hay políticas nacionales,
provinciales, municipales que no tienden a devolver el futuro a nuestros pibes,
a nuestros jóvenes”.
“Estar acá es un reclamo contundente de justicia, pero no la justicia
solamente de los tribunales, como dice una bandera del comedor del Padre
Edgardo, que es lo que estamos reclamando, es vivir en dignidad, es simplemente
eso. Para algunos la dignidad, la justicia, el techo, la casa, la educación, la
salud pueden ser palabras vacías. Para los que estamos acá, para los que
rompemos el silencio, porque estar acá también es un compromiso y los que están
acá y los que viven acá saben que estar acá es asumir riesgo, levantar la voz es
asumir riesgos, pero no más riesgos de los que asumieron nuestros compañeros;
nuestros compañeros que entregaron su vida como Mercedes, como el Pocho, como
tantos otros compañeros que entregaron su vida y otros tantos que dedicaron su
vida para que este barrio pueda vivir con dignidad”.
Martínez también se refirió al ataque de los narcos que pocas horas antes
había tenido lugar en Nuevo Alberdi contra tres militantes del Movimiento Evita.
“Que no quede duda que esta pelea sigue, pero no alcanza con que se movilice
Ludueña, hay compañeros de otros barrios que están viviendo exactamente lo
mismo. Y esto va más allá de la bandera política. De acá también haremos mucha
fuerza para que se salve el compañero que está internado en este momento en el
Heca, baleado en la misma situación que lo de Mercedes, corre riesgo su
vida”.
“Hay que terminar con esto. Acá Ludueña ha dado ejemplo de muchas cosas y que
no nos gane el resentimiento, que convirtamos todo el odio en lo que se ha
convertido siempre Ludueña que es la fuerza para seguir peleando, la fuerza para
seguir andando”.
Tres personas identificadas, según la policía
El comisario inspector Santos Aranda escuchó impertérrito en la puerta de la
12° los cuestionamientos, en general, y las acusaciones de complicidad con el
narco, en particular, y aseguró a los familiares que había tres personas
identificadas en el caso y que el juez Alejandro Negroni había dado órdenes de
allanamiento.
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