24 de Mayo del 2016
Ouviña, sobre el Plan Cóndor: "Fue una asociación ilícita entre naciones"
Entre los países participantes figuraron Argentina, Brasil, Chile, Uruguay, Paraguay y Bolivia; y en los papeles, está documentado que Cóndor se lo llamó "a propuesta del representante uruguayo en homenaje al país anfitrión del encuentro donde se firmó el acta creadora, que era Chile", relató el fiscal.
"Las víctimas no tenían escapatoria. Una frontera es un límite, en lo geográfico y en otros ámbitos. El Plan eliminó esos límites y mediante el intercambio de información y de acciones, las fuerzas de seguridad construyeron un marco de coordinación regional, logístico e ideológico que quedó documentado en diferentes archivos de los que nos fuimos nutriendo durante la investigación", relató Ouviña.
Los documentos probatorios son precisos y provienen de diferentes países, ámbitos y trabajos. "Van del delito general de asociación ilícita, a los delitos particulares. Todo el tiempo. Por eso, cada uno de los hechos que tomamos en la investigación, además de documentar esa asociación, dan cuenta de algún otro ilícito en particular", especificó Moguilansky.
La fiscal relató que solicitaron al Museo de la Memoria de Paraguay los Archivos del Terror (descubiertos por el Premio Nobel Alternativo de la Paz y ex víctima del Cóndor, Martín Almada), los que fueron enviados "en parte".
Se sumó la colaboración de la agencia norteamericana NCA (una ONG), quien "aportó dinero para el escaneo de los archivos y una herramienta informativa para poder buscar los datos necesarios; y además, brindó los archivos desclasificados por la CIA bajo el gobierno de Bill Clinton".
También permitieron reconstruir la trama del Cóndor los papeles secuestrados durante la detención en Buenos Aires del agente de inteligencia chileno (espía de la DINA) Enrique Arancibia Clavel: "Un conjunto documental de características únicas", confió Ouviña.
Asimismo colaboraron la DIPBA- Comisión Provincial por la Memoria-; la COMIPAZ de Uruguay, la CONADEP, y el informe Retti. El juicio oral intentó probar la constitución del Plan Cóndor bajo la firma del acta de conformación inicial fechada el 28 de noviembre de 1975, y firmada por Manuel Contreras de Chile, Jorge Casas de Argentina, Carlos Mena de Bolivia, José Pons de Uruguay, y Benito Guanes de Paraguay, documento que especifica cómo recabar información de las personas a perseguir, entre otras indicaciones.
El juicio comenzó hace tres años y tres meses con 32 imputados, de los cuales sólo 17 tendrán sentencia (algunos fueron desvinculados y otros murieron por causas naturales). En su desarrollo "se entrecruzaron los datos de los archivos, por ejemplo, la fecha y lugar de un desaparecido con el responsable territorial de ese momento. Cada uno de los imputados estaba a cargo de un área o subárea", relataron los fiscales que documentaron unos "171 hechos".
En la región hubo otros juicios vinculados a delitos cometidos dentro de la coordinación represiva del Cóndor -incluso se realiza uno en Italia- pero sólo en la Argentina se llevó a juicio oral la investigación sobre la asociación ilícita que constituyó Plan Cóndor en sí mismo.
"Tenemos muchísima documentación", sintetizó Ouviña y recordó que la primera hoja que constituyó la causa fue, en 1999, "una querella presentada por víctimas paraguayas y chilenas, patrocinada por los doctores David Baigún y Alberto Pedroncini quienes solicitaron la apertura de la investigación en un contexto donde era muy difícil hacerlo por las leyes de Punto Final y Obediencia Debida", recordó el fiscal.
La defensa, en tanto, intentó sostener que existía un sistema exclusivo de intercambio de información, negó que hubiera sido un plan, y adjudicó todo el accionar a la necesidad de contar con datos de los 'subversivos' en cada uno de los países para lograr mayor eficiencia.
"Nunca pudieron responder a la pregunta: 'para qué era necesaria esa información'", manifestó Ouviña, y aclaró que "también se comprobó que la coordinación no se limitaba al intercambio informativo. Utilizaban un sistema de encriptamiento o los agregados a las embajadas como nexo, etc".
Consultado sobre la participación de Estados Unidos en el Plan, Ouviña respondió: "Se pudo probar que en un momento temprano del Cóndor, la CIA tomó conocimiento de la existencia del plan pero no se ha encontrado un documento o información explícita que pueda llevar a pensar a que propendió a que se creara o que lo hubiera sostenido de alguna manera".
"No hay dudas, por ejemplo, sobre el rol que tuvo EEUU en los golpes de la región y su influencia ideológica. Hay indicios para sostener que desde siempre se propendía a que los países compartieran información pero no hay elementos para determinar, ni por si, ni por no, que EEUU haya hecho acciones tendientes a generar lo que fue Cóndor ni que colaboró para que perdurara. Al contrario, los documentos que tenemos indican cómo empiezan a cambiar correos para ver cómo se posicionan frente a este descubrimiento", explicó.
"Hay quizá un pensamiento hasta infantil porque en esa época EEUU y Rusia eran soberanos de facto, pero pensar que un soberano de facto, acepte que en su patio trasero, varios gobiernos se junten, por ejemplo para realizar actos en tu territorio como fue el asesinato de (Osvaldo) Letelier en Washington, es dudoso.
Nosotros necesitamos algún documento, al menos para comprobar que eso fue así", explicó Ouviña. Y lo simplificó: "Si soy tirano, yo no quiero que mis súbditos se junten, a no ser que se encuentre algo probatorio de que eso sucedió. Cóndor fue una creación latinoamericana, y mucho usan la culpa del tío Sam para lavar las culpas propias. Lo que no cierra no cierra".
El juicio empezó el 5 de marzo de 2013 y el viernes el Tribunal Federal Oral N 1, de Comodoro Py dictará el veredicto que será escuchado por numerosa cantidad de familiares de víctimas que ya se encuentran viajando de diferentes partes del mundo para presenciar el acto.
Los imputados que lo escucharán son argentinos excepto el ex servicio de inteligencia militar uruguayo, Manuel Cordero Piacentini, para quien -junto a los otros- se reclamó una pena de 25 años como partícipe necesario del secuestro de once víctimas.
La fiscalía pidió también esa condena para los ex responsables de Institutos Militares, Reynado Bignone y Santiago Omar Riveros; el ex director de la escuela de Caballería, Rodolfo Feroglio; el ex jefe del Regimiento Patricios, Humberto Lobaiza; y el ex agente de la SIDE, Miguel Angel Furci, por su rol en el centro clandestino de detención en Automotores Orletti, uno de los principales lugares de reclusión de víctimas del Plan.
Ouviña reclamó además diez años de reclusión para el ex jefe del área militar 112, de La Tablada, Federico Antonio Minicucci; y para el ex jefe del Área 331, Carlos Horacio Tragant. ARGENTINA: Ouviña, sobre el Plan Cóndor: "Fue una asociación ilícita entre naciones"
Fuente:EntornoInteligente
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