21 de julio de 2017

JUJUY: A 41 AÑOS DE LA NOCHE DEL APAGÓN EN LEDESMA.

21 de julio de 2017 
El camino que va de Blaquier a Morales
Los manifestantes reclamaron a la Corte por partida doble: por una definición sobre la responsabilidad del Ingenio Ledesma en delitos de lesa humanidad y por la libertad de Milagro Sala.
Por Alejandra Dandan 
Después de pasar por el penal del Alto Comedero, los manifestantes recorrieron a pie cinco kilómetros, de Calilegua a Ledesma. 
Como un reloj que se pone en marcha aún cuando nada parece estar en el mismo lugar, el territorio del poder real de la provincia de Jujuy volvió a ser pisado por una multitud que dice que sigue esperando justicia a 41 años de los secuestros de las siete noches interminables de apagones en Ledesma que siguen estremeciendo los cuerpos. Justicia porque ese mismo poder tiene encerrada en el penal de mujeres del Alto Comedero a Milagro Sala, líder de una organización que puso el cuerpo en la calle para que el dueño del Ingenio Ledesma, Carlos Blaquier, lograra al menos ser sentado en la silla de los acusados por los crímenes de lesa humanidad. El reclamo por la Noche del Apagón se dirigió a la Corte Suprema de Justicia porque esa multitud aguarda una definición sobre Blaquier, un pronunciamiento pendiente hace más de dos años. Y porque también aguarda una definición sobre la libertad de Milagro. Pero el reclamo también advirtió sobre las amenazas que se ciernen estos mismos días sobre el Sindicato de Trabajadores del Azúcar de Ledesma con una posible intervención en diálogo con los distintos escenarios del país y en un ciclo que vuelve todo al comienzo.

Alrededor de las 10 de la mañana, el ritual de la marcha legendaria de cada 20 de julio en Jujuy hizo una primera parada, esta vez, frente al alambrado que detuvo a los peregrinos a doscientos metros de Milagro Sala. “Presa Política”, escribieron en una bandera. “¡Estamos pidiendo por tu libertad!”, dijeron a los gritos las mujeres. Milagro, que había logrado salir al patio esperando el paso de la marcha, se llevó una mano al corazón y levanto el puño con la otra. Las mujeres paradas sobre la ruta levantaron los brazos. Gritaron. ¡Queremos poder liberarte!

En un audio con el que buscó hacerse presente, la Flaca le habló directamente a Blaquier. “Lamento mucho este año no estar marchando en la movilización de La Noche del Apagón”, se escuchó. Miles de personas acompañaron desde la Tupac Amaru cada una de estas marchas hasta diciembre de 2015. “Sé que hay muchísimos compañeros que han venido de otros lados –dijo–, muchísimos jujeños que no van a permitir que haya ni olvido ni perdón. Tengo claro que estoy presa gracias a Blaquier. Que hoy el payaso de Blaquier es Gerardo Morales. Y le pido a la juventud que defienda nuestro país, nuestra patria y nuestro Jujuy que es el que nos necesita”. “La marcha tiene que ser cada vez más grande –pidió Milagro– para que los jóvenes tomen conciencia que son el futuro de nuestro país. Compañeros fuerza. Y a seguir marchando por nuestra dignidad. Y por los 30 mil compañeros desaparecidos”. Pese al descuartizamiento de la organización, los militantes sumaron banderas a los grupos de organizaciones de derechos humanos locales y espacios territoriales y políticos que llegaron de distintos lugares del país.

“En Ledesma y Calilegua / una noche sucedió /se llevaron compañeros, / la Noche del Apagón / Los Blaquier y los milicos, / fueron dueños de este horror, / secuestraron, torturaron. / Ni olvido ni perdón. / Venimos aquí, / para acusarlos, / los compañeros jamás serán olvidados”.

Decía un canto repetido con la base de Cosas Mías, de los Abuelos de la Nada. Ricardo Arédez, hijo del intendente Luis Arédez, primera víctima del Ingenio, no podía parar de llorar. Llegó convencido que ésta iba a ser su última marcha. “Lloré muchísimo y pensaba que éste iba a ser mi último año, porque creí que yo ya había hecho todo. Estoy desde los 16 años en esto y tengo 57. Hicimos las denuncias, conseguimos que este hombre se bajara de su escalera de poder y se siente en el tribunal de la democracia, conseguimos los allanamientos, aparecieron las pruebas y lo que no funciona es la justicia. Creí que esta era una tarea cumplida, pero hoy siento que hay que seguir hasta que el cuerpo ya no te de”. El domingo pasado estuvo con Milagro. “Yo a Milagro le digo mamita Milagro. Ya no tengo madre, no tengo padre. Y a partir de ahora ella es mi madre. Le dije que la iba a seguir acompañando desde mi lugar hasta que recupere la libertad porque es nuestra esperanza. Milagro es una líder. Me di cuenta el domingo cuando la vi en medio del frío del patio del penal. Nos miramos los dos. Nos abrazamos. Y sentí a una líder que está siendo sometida injustamente por haberse atrevido a hacer cosas por los que menos tenían”.

La marcha salió en colectivos desde distintos puntos de San Salvador hacia Calilegua. Y de allí, la multitud recorrió a pie cinco kilómetros hasta Libertador General San Martín, centro residencial y operativo del Ingenio. Entre quienes caminaron estuvo Oscar Alfaro, ex detenido; Inés Peña, de Madres y Familiares de Detenidos Desaparecidos de presos políticos. Dora Weisz, esposa Jorge Weisz, vicepresidente de la obra social del Sindicato de empleados del Azúcar. Este año no estuvo Hugo “El Coya” Condorí, fundador de la obra social, él mismo sobreviviente, vitalicio militante de los juicios, muerto el último noviembre. “Esta es la primera marcha del Apagón sin mi abuelo”, dijo Santiago Hamud, su nieto, dirigente de la Juventud Comunista, parte de la Tupac, a quien la policía de Morales amenazó con ponerle tres tiros en la cabeza el año pasado. “Por ahí estoy un poco triste porque se fue sin ver a sus torturadores y carceleros presos, pero además porque se fue muy deprimido de ver cómo cambio todo de un día para otro. Pero me siento en la obligación y con la convicción de levantar la bandera por la cual luchaba mi abuelo”.

La marcha fue un espacio de legados y celebración a otros luchadores. En junio murió Eublogia Cordero de Garnica, Rita. Era la última Madre de Plaza de Mayo de Jujuy, secuestrada el 20 de julio de 1976 con dos hijos, luego de la detención de su esposo Agustín Donato Garnica, fundador del sindicato de zafreros de Ledesma. Rita estuvo seis meses secuestrada. Sus hijos siguen desaparecidos. El Ingenio le sacó la casa cuando se llevaron a su esposo. Ella declaró penitentemente contra el Ingenio desde el Juicio a las Juntas. Y esperó a sus hijos hasta el último día. “Por su lucha y sus gestos, no vamos a claudicar, querida”, la celebraron, más tarde, desde el escenario, con una placa que la nombra en el centro del poder del Ingenio.

Ya en el acto, se escucharon los nombres de los más de 30 desaparecidos de un número aún indeterminado de víctimas. La multitud respondió Presente. Y al escenario subió Paula Alvarez Carrera, del equipo de abogadxs de lesa humanidad y abogada de Milagro. “A 41 años del golpe cívico militar la impunidad se reedita en democracia”, dijo. “Con una Corte Suprema de Justicia que no resuelve si Blaquier y (el administrador del Ingenio Alberto) Lemos conocían o no la situación y la responsabilidad que les compete por el uso de las camionetas de la empresa durante esas noches de julio de 1976 y la finalidad última de ese uso. Una Corte cuya urgencia lejos está de la resolución sobre la libertad de una presa política en democracia, como es Milagro Sala. Una Corte que está más conmovida por la avanzada edad de los que torturaron y desaparecieron compañeros –explicó–, a quienes ya benefició para que vuelvan pronto a sus casas o para que recuperen su libertad. El retroceso es vergonzoso para un país que en otros momentos fue ejemplo y referencia internacional en el proceso de Memoria, Verdad y Justicia”.

Arriba y abajo hubo espacio para nombrar a los integrantes de la Sala IV de Casación, Juan Carlos Gemignani y Gustavo Hornos que dictaron la falta de mérito a Blaquier en 2015 y acaban de confirmar y agravar la condena a Milagro Sala por un escrache de huevos de 2009, acompañados por el voto de Mariano Borisnsky. El abogado de Milagro Sala Luis Paz comparó el rol del poder judicial del presente con los grupos de tareas de la dictadura. “Desde hace ya un par de años largos latinoamérica tiene sectores neofascistas integrados por distintos grupos económicos concentrados, de medios de comunicación dominantes y financieros, intentando usar al poder judicial como ariete para destruir las conquistas de los pueblos, conquistas sociales y de derecho. Y lo que está viviendo Argentina es parte ese contexto en el que Brasil desplaza a Dilma y condena a Lula con una intención de voto altísimo. La derecha latinoamericana está intentando usar al poder judicial como los grupo de tareas que se usaban en los años setenta, para encarcelar a los líderes sociales y políticos”.

El profesor Juan Manuel Esquivel, diputado del Frente Unidos y Organizados de Jujuy, dijo que “nos encontramos con el mismo escenario de los poderes económicos, los poderes reales, dominando toda la escena del país y utilizando las fuerzas represivas para controlar la lucha social y a los trabajadores porque ayer como hoy el modelo que se está implementando en el país es el de una economía conservadora neoliberal y por lo tanto de exclusión”. En el escenario se escucharon alarmas sobre el estado del sindicato que encabeza Rafael Vargas. “La consigna que más prevalece es en este momento la no-intervención del Sindicato del Azúcar, compañeros”, proclamó un representante de la Casa Cubana.

Más temprano, la Tupac había conseguido reagrupar fuerza propia en la casa de la organización en Calilegua. Un grupo de mujeres preparó algo de comida para los que llegaron de San Salvador. Durante el día se escuchó un audio con la voz de Alberto “Beto” Cardozo desde el penal de Gorriti, dirigente de la organización social Tekure, preso político de Morales. “Llevo un año y cuatro meses detenido. Siempre participé de estas marchas. Hicimos movilizaciones con mi organización, mi gente, con varias agrupaciones de toda la provincia. Ibamos de Calilegua a Libertador estando al lado de los familiares. Y hoy sé que la persona que es innombrable en Jujuy, Blaquier, sigue todavía en el poder, apoyando a nivel provincial y nacional. Y más dolor me da estar preso en el Penal de Villa Gorriti donde estuvieron los presos políticos en dictadura, y donde se dice que ya no se sufren torturas pero en mi caso lo sufrí cuando me ingresaron, cuando fui detenido y quedé preso en esta cárcel”.

Convocaron al acto Madres y Familiares de Detenidos Desaparecidos del departamento de Ledesma, Asociación Madres y Familiares de Detenidos Desaparecidos de Jujuy; Ex presos Políticos Regional Ledesma, H.I.J.O.S Jujuy, Capoma DDHH, Ricardo Aredez, ex mineros Mina El Aguilar, grupo de abogados de derechos humanos del NOA, Andhes, CTA y ATE Jujuy, CCC, Ctep, Seamos Libres Organización Tupac Amaru, PC, PTS, Coordinadora contra el Ajuste y la Represión, Movimiento Evita, Juventud Comunista, bloque de diputados del Frente Unidos y Organizados, Agrupación bolivariana Juana Azurduy, entre otros.






21 de julio de 2017 

Apagones de ayer hoy 
Por Luis Bruschtein

Es otra fecha, un aniversario. Para Mauricio Macri se trata del “curro” de los derechos humanos. El “curro” de Luis Aredez, el médico que contra viento y marea perdió todo, incluyendo la vida por ponerse del lado de los trabajadores golondrina esclavizados por Ledesma en los años ‘70. Es el “curro” de Rita Garnica, secuestrada durante la Noche de los Apagones, en julio del ‘76 cuando estaba preso su marido, el cañero Agustín Donato Garnica, fundador del sindicato de zafreros de Ledesma. Rita murió el 13 de junio pasado y se le hizo un homenaje ayer en la marcha por el aniversario de la Noche de los Apagones. Era la última Madre que quedaba viva en Jujuy. El gran “curro” de Rita (diría Mauricio Macri) fue que también se llevaron a sus dos hijos, Miguel Angel y Domingo Horacio, que todavía permanecen desaparecidos. Rita estuvo seis meses desaparecida y su marido siete años preso y perdieron hasta la casa por disposición del ingenio, cuyo dueño, Carlos Blaquier, puso los camiones de la empresa a disposición de los que secuestraron esas noches a casi 400 vecinos de Ledesma y Calilegua, de los cuales, 40 permanecen desaparecidos.

Según el gobierno, el “curro” de los derechos humanos incluye quedarse en el pasado. Pero en los derechos humanos el tiempo es uno solo, pasado, presente y futuro. Rita y su ejemplo de vida se apagaron hace unos días, Carlos Blaquier, el dueño del ingenio y figura de la provincia, hizo que el gobernador Gerardo Morales lanzara una furiosa persecución contra Milagro Sala que siempre ha sido una de las principales animadoras de la marcha por la Noche de los Apagones. Ayer a la mañana, la primera parada de los manifestantes que salían de San Salvador hacia Ledesma o Libertador General San Martin, fue en la cárcel de Alto Comedero, para homenajear y reclamar la libertad de la prisionera Milagro Sala. La presión del importante frente de organizaciones sociales que ella dirigía fue deteminante para que la justicia juzgara a Blaquier por su responsabilidad en la represión a sus trabajadores. Cambió el gobierno y Blaquier fue sobreseído de su responsabilidad en una masacre por una sospechosamente oportuna Cámara de Casación, y Milagro Sala pasó a ser perseguida, detenida, maltratada, difamada y demonizada. Es el famoso curro del que habló Macri. El tiempo hace que la libertad de Blaquier y la persecución contra Milagro Sala sean parte del mismo paquete. El que apoya a Morales, apoya a Blaquier, es cómplice de la represión y asume el lugar histórico que está planteado también en la Noche de los Apagones. Morales, uno de los gobernadores cercanos a la Rosada, gobierna Jujuy en alianza con el partido de Sergio Massa.

Hace 41 años, Blaquier, exponente del poder económico, quedó involucrado en una masacre. Milagro Sala, dirigente de los excluidos de la provincia, lo denunció y luchó por llevarlo a la justicia. El gobierno cambió, entró el radical Morales y Blaquier fue sobreseído y Milagro Sala encarcelada. No hay tiempo, el pasado se estira hasta el presente y proyecta sombras hacia el futuro. Ayer, la marcha que recordó aquella noche fue por Milagro a la cárcel. El tiempo juega como el viento en las Yungas.

Entre las víctimas de esa masacre estaba el ex intendente, el médico tucumano radical Luis Aredez que había elegido el pueblo de Ledesma para radicarse porque el lugar ostentaba el récord nacional de mortandad infantil a raíz de las condiciones de vida en los ingenios. El intendente defendió los derechos humanos de los zafreros, –un curro o una mafia diría Macri– y le costó la vida. Ahora, otro radical, el gobernador Gerardo Morales, hace yunta con el mismo Blaquier, que fue enemigo del radical Aredez.

Está Olga Aredez, viuda del intendente, la madre de Plaza de Mayo que durante años dio vueltas en soledad alrededor de la plaza del pueblo con un cartelito con el nombre de su marido, hasta que la marcha se hizo masiva. Olga murió de una afección pulmonar en una zona donde la bagazosis hacía estragos por la ceniza del bagazo de caña del ingenio Ledesma, cuyo dueño es Carlos Blaquier, el mismo que hace 41 años, cuando fue la Noche del Apagón. Jujuy echa una la luz brillante sobre escenas de oportunismo político, hegemonía del poder económico, avasallamientos judiciales y discursos mentirosos que se repiten en forma menos visible en el resto del país.
Fuente:Pagina12




Otro aniversario de la Noche del Apagón con Blaquier impune y Milagro tras las rejas 

Miles de personas se manifestaron en Jujuy para exigir juicio y castigo a los genocidas de la última dictadura cívico-militar, pero además libertad a todos los presos políticos de Mauricio Macri y Gerardo Morales. “Acá no hay Estado de Derecho, la situación es muy preocupante”, advirtieron a Contexto.
Por Fernando M. López 
Jul 21, 2017

A 41 años de la Noche del Apagón, continúan impunes los responsables de los 400 secuestros y las 33 desapariciones en las localidades jujeñas de Calilegua, Libertador General San Martín y El Talar. Carlos Pedro Blaquier, presidente del Ingenio Ledesma, y su entonces administrador, Alberto Lemos, participaron activamente de esos crímenes de lesa humanidad y fueron imputados, pero en marzo de 2015 la Sala IV de Cámara Federal de Casación Penal les dictó la “falta de mérito”.
Se trata del mismo tribunal que el mes pasado confirmó la condena a tres años de prisión en suspenso contra Milagro Sala por un escrache a Gerardo Morales en 2009, cuando era senador nacional. La líder de la Tupac Amaru no participó de la protesta y tampoco se comprobó fehacientemente que la haya instigado. A Casación le bastó con el testimonio de un empleado del ahora gobernador, René “Cochinillo” Arellano.
Milagro está presa desde el 16 de enero de 2016 por orden de Morales y con el aval del presidente Mauricio Macri, que desoye los pedidos de libertad de la ONU y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
La detención arbitraria de Sala, que viola sus fueros como parlamentaria del Mercosur y todos los estándares internacionales de derechos humanos, está pendiente de resolución en la Corte Suprema de Justicia. El máximo tribunal también debe emitir un fallo sobre la falta de mérito de Blaquier y Lemos, pero hace años que tiene el expediente archivado.
“Evidentemente, la Corte tiene otras prioridades que son dictar fallos en contra de trabajadores y beneficiar a los genocidas con la prisión domiciliaria o con el 2×1 para que puedan volver rápido a sus casas. Es bastante vergonzosa la situación”, dijo a ContextoPaula Álvarez Carreras, abogada querellante en causas por delitos de lesa humanidad.
La letrada también recordó que, en diciembre último, el Tribunal Oral Federal de Jujuy, integrado por los jueces Mario Juárez Almaraz, María Alejandra Cataldi y Federico Santiago Díaz, suspendió el juicio contra una veintena de gendarmes y policías imputados por la Noche del Apagón para poder condenar en primera instancia a Milagro Sala por el escrache a Morales.
“El tribunal demuestra que no quiere llevar a juicio a los responsables de la Noche del Apagón, aun cuando no están los responsables civiles. No tenemos demasiada expectativa de que pueda avanzar este año”, indicó Álvarez Carreras.
Frente a esta grave situación de impunidad, organismos de derechos humanos, gremios, partidos políticos y organizaciones sociales se movilizaron este jueves para exigir “juicio y castigo” a los genocidas de la última dictadura cívico-militar.
La multitud se concentró primero frente al Penal de Mujeres del Alto Comedero, en reclamo de la libertad inmediata de Milagro y de las otras dirigentes de la Tupac arbitrariamente detenidas: Gladys Diaz, Mirta Guerrero, Mirta Aizama y Graciela Lopez.
“Tengo claro que estoy presa gracias a Blaquier, que hoy el payaso de Blaquier es Gerardo Morales. Le pido a la juventud que defienda nuestro país, nuestra patria y nuestro Jujuy, que es el que nos necesita. La marcha tiene que ser cada vez más grande para que los jóvenes tomen conciencia que son el futuro. Compañeros fuerza, y a seguir marchando por nuestra dignidad y por los 30 mil compañeros desaparecidos”, dijo Milagro a través de un mensaje grabado desde la cárcel.
Más tarde, se marchó desde Calilegua hasta Libertador General San Martín, donde se encuentra la sede del Ingenio Ledesma. Allí se hizo un homenaje a la fallecida Rita Cordero de Garnica, una de las mujeres secuestradas durante la semana del 20 al 27 de julio de 1976, cuando estaba preso su marido, Agustín Donato Garnica, fundador del sindicato de zafreros. Se la llevaron junto a dos de sus hijos, Miguel Angel y Domingo Horacio, quienes aún continúan desaparecidos.
“En la época de la dictadura, con la complicidad de Blaquier, han secuestrado a los obreros que luchaban por reivindicaciones laborales. Hoy esto se recrudece y se vuelve a poner en el tapete la relación de la empresa contra los trabajadores. Hay una complicidad entre los empresarios y la corporación judicial para ir en contra de los derechos de los obreros, con la flexibilización laboral en marcha”, sostuvo durante el acto Inés Peña, referente de Madres y Familiares de Detenidos Desaparecidos de Jujuy.
Precisamente, el Sindicato de Obreros y Empleados del Azúcar del Ingenio Ledesma (SOEAIL) resiste las maniobras intervencionistas de Morales y Blaquier, que cuentan con la asistencia del ministro de Trabajo de la Nación, Jorge Triaca. El secretario general del gremio, Rafael Vargas, ratificado por casi el 90% de los trabajadores en unas elecciones internas desconocidas por Triaca, también sufre una dura persecución judicial.
“Hoy Ledesma se siente respaldada por las políticas del presidente y del gobernador de la provincia y están dispuestos a encarcelar a los dirigentes sindicales y sociales poniendo todo el sistema judicial y laboral a favor de la patronal”, explicó Vargas a la multitud.
De la misma manera son amedrentados los empleados del Ingenio La Esperanza, que luchan por los 1080 puestos de trabajo de la planta. El sindicato SOEA llamó a un paro en las últimas horas al conocer que las negociaciones de Morales para el traspaso de la empresa al grupo colombiano Omega, sólo incluyen a la mitad del personal.
“Si no completamos la venta del ingenio por responsabilidad imputable al gremio, que se hagan cargo”, los amenazó ayer el gobernador para luego increparlos: “¡Déjense de hacer paros!”.
Consultada sobre el tema, la abogada Álvarez Carreras señaló a este medio que en “acá no hay Estado de Derecho”, y añadió: “Lo que hay es una embestida que está impidiendo que los trabajadores ejerzan sus legítimos derechos a protestar, a manifestarse públicamente y a tener elecciones autónomas. La situación es muy preocupante en Jujuy”.
Fuente:Contexto                      

Marcha del Apagón: “El Poder Judicial garantiza la impunidad a los cómplices civiles”

21 julio, 2017
El reclamo para que se juzgue a los responsables civiles de la Noche del Apagón, Carlos Blaquier y Alberto Lemos; el repudio a la persecución y criminalización de la protesta social, en particular del sindicato de trabajadores del Ingenio Ledesma, y la demanda de liberación inmediata de Milagro Sala y el resto de los presos políticos en Jujuy, fueron los ejes centrales de la Marcha del Apagón, que una multitud protagonizó este jueves entre Calilegua y Libertador Gral. San Martín. Desde el penal de Alto Comedero, Milagro Sala envió un mensaje grabado.
“Juicio y castigo, con vida los llevaron, con vida los queremos”, reclamaban los organismos de Derechos Humanos en 1983, cuando comenzaron a marchar en Jujuy en contra de la impunidad por los hechos ocurridos en lo que se conoce como la Noche del Apagón.
Con el tiempo, las consignas se fueron ampliando. Este jueves, a 41 años de aquellos sucesos, las exigencias ya no apuntan solamente contra los responsables civiles y militares de la dictadura. Se denuncia también la relación que tienen en la actualidad los mismos empresarios cómplices del Terrorismo de Estado con el Poder Judicial, como si hoy jueces y fiscales hicieran la tarea que hacían las fuerzas de seguridad durante la dictadura para beneficio de los mismos sectores económicos. Criminalizar, reprimir, privar ilegalmente de la libertad a los dirigentes sociales, disciplinar a la clase trabajadora.
La jornada comenzó con un acto frente al penal de mujeres de Alto Comedero donde están privadas arbitrariamente de su libertad Milagro Sala, Gladys Diaz, Mirta Guerrero, Mirta Aizama y Graciela Lopez. La diputada del Parlasur, a través de un mensaje de audio estuvo presente en el acto, al igual que Alberto Cardozo, otro de los presos políticos de Gerardo Morales y Mauricio Macri, en plena democracia.
“En la época de la dictadura con la complicidad del Ingenio Ledesma, de Blaquier, han secuestrado a los obreros que luchaban por reivindicaciones laborales. Hoy esto se recrudece y se vuelve a poner en el tapete la relación de la empresa contra los trabajadores. Hay una complicidad entre los empresarios y la corporación judicial para ir en contra de los derechos de los obreros, con la flexibilización laboral en marcha”, aseguró Inés Peña, de Madres y Familiares de Detenidos Desaparecidos de Jujuy.
La movilización, multitudinaria, partió desde Calilegua y, como todos los años recorrió siete kilómetros, hasta la plaza central de Libertador, donde se realizó el acto de cierre.

Persecución al sindicato

Uno de los ejes de la jornada fue la situación por la que atraviesan los dirigentes del Sindicato de Obreros y Empleados del Azúcar del Ingenio Ledesma (Soeail) que resisten el embate del Poder Judicial y del Ministerio de Trabajo de la Nación y de la provincia, una vez más a favor de los intereses del Ingenio.
Los representantes del gremio ya habían denunciado la judicialización y la criminalización de la protesta en mayo de este año, cuando se presentaron ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), en Washington, buscando -como en las épocas más oscuras de nuestra historia- auxilio en el exterior.
En estas últimas semanas se agregó el desconocimiento por parte de las autoridades de la cartera laboral de las elecciones que revalidaron el mandato de los actuales dirigentes. A pesar que los gremialistas sostienen su representatividad, la empresa, con el aval del gobierno, los desconoce y la amenaza de intervención del sindicato está en ciernes. Suspensiones por supuesto bajo rendimiento, sobrecarga de tareas e incorporación de nuevos equipos en el campo, que reemplazan la mano de obra, son algunas de las situaciones que padecen los trabajadores del Ingenio Ledesma.
“Hoy la patronal se siente respaldada por las políticas del Presidente y del Gobernador de la provincia y están dispuestos a encarcelar a los dirigentes sindicales y sociales poniendo todo el sistema judicial y laboral a favor de la patronal”, reclamó Rafael Vargas, secretario general del Soeail.

Reclamo de justicia

Durante la movilización se escucharon los reclamos históricos: el fin de la impunidad civil, empresarial y eclesiástica; cárcel común, perpetua y efectiva a todos los genocidas; juicio y cárcel común a Carlos Pedro Blaquier y a Alberto Lemos, responsables civiles del golpe genocida del 76; justicia para los compañeros detenidos desaparecidos.
Pero también hubieron duras críticas a la situación del Poder Judicial, tanto a nivel provincial como a nivel nacional, con una Corte que hace dos años tiene en su poder un recurso para decidir sobre la falta de mérito que benefició a Carlos Pedro Blaquier que dictó la Sala IV de Casación Penal, la misma que agravó la pena contra Milagro Sala por unos huevos que no tiró ni instigó a tirar. “Que las vidas no valgan menos que unos huevos”, reclamaron.
Paula Álvarez Carreras, abogada querellante en los juicios por delitos de lesa humanidad les dijo en la cara a los jueces Gustavo Hornos y Juan Carlos Germigniani que eran responsables de la impunidad de los cómplices civiles de la dictadura, en la misma audiencia en la que defendió a Milagro Sala y Graciela López de un fallo vergonzoso que había emitido el Tribunal Oral Federal de Jujuy y que esos magistrados junto a Mariano Borinsky potenciaron.
“A 41 años del golpe cívico militar la impunidad se reedita en democracia. Con una Corte Suprema de Justicia que no resuelve si Blaquier y Lemos conocían o no la situación, la responsabilidad que les compete por el uso de las camionetas de la empresa durante esas noches de julio de 1976 y la finalidad última de ese uso. Una Corte cuya urgencia lejos tiene la resolución sobre la libertad de una presa política en democracia como es Milagro Sala. Una Corte que está más conmovida por la avanzada edad de los que torturaron y desaparecieron compañeros, a quienes ya benefició para que vuelvan pronto a sus casas o para que recuperen su libertad. El retroceso es vergonzoso para un país que en otros momentos fue ejemplo y referencia internacional en el proceso de Memoria, Verdad y Justicia”, describió la abogada.

‘Presa por Blaquier’

“Por una justicia independiente en Jujuy; repudio a la justicia jujeña por garantizar la impunidad en la noche del Apagón; repudio a la Corte Suprema de Justicia de la Nación por beneficiar durante este gobierno a los genocidas; libertad a Milagro Sala y a todos los presos políticos”, también formaron parte de las consignas plasmadas en un documento consensuado por los organismos de derechos humanos, organizaciones sociales y sindicales.
El Tribunal Oral Federal, que integran Mario Juárez Almaraz, María Alejandra Cataldi y Federico Santiago Díaz, debía iniciar el juicio por los hechos de La Noche del Apagón en diciembre pasado. Sin embargo, suspendió el proceso por el que esperan las víctimas desde hace más de cuatro décadas para sentar en el banquillo a Milagro Sala, respondiendo así a los caprichos del gobernador, que recibió durante su campaña el apoyo y el financiamiento de Ledesma.
En pleno acto, a pesar de su ausencia física, Milagro Sala estuvo presente. No sólo en las consignas.
“Lamento mucho este año no estar marchando en la movilización de La Noche del Apagón. Sé que hay muchísimos compañeros que han venido de otros lados, muchísimos jujeños que no van a permitir que haya ni olvido ni perdón. Tengo claro que estoy presa gracias a Blaquier, que hoy el payaso de Blaquier es Gerardo Morales y le pido a la juventud que defienda nuestro país, nuestra patria y nuestro Jujuy que es el que nos necesita. La marcha tiene que ser cada vez más grande para que los jóvenes tomen conciencia que son el futuro de nuestro país. Compañeros fuerza, y a seguir marchando por nuestra dignidad y por los 30 mil compañeros desaparecidos”, dijo a través de un mensaje grabado desde la cárcel.
Reproductor de video
00:00
00:50
Inés Peña recordó a Página 12 cuánto significó la presencia de la Tupac Amaru en las calles para poder comenzar con los juicios por los crímenes de lesa humanidad. “Una intervención de miles de personas que logró arrancarle a la Corte Suprema una declaración de emergencia judicial para la provincia, designar a un nuevo juez federal y, luego de décadas, realizar los primeros allanamientos en los edificios del Ingenio Ledesma que condujeron a las indagatorias, procesamientos y finalmente, en marzo de 2015 a la falta de mérito dictada por la Sala IV de Casación Penal de la Nación”.
Alberto Cardozo, dirigente de la organización social Tekure, preso político en el penal de Gorriti, también envió un mensaje desde la carcel. “Llevo un año y cuatro meses detenido. Siempre participé de estas marchas. Hicimos movilizaciones con mi organización, mi gente, con varias agrupaciones de toda la provincia, íbamos de Calilegua a Libertador estando al lado de los familiares. Y hoy sé que la persona que es innombrable en Jujuy, Blaquier, sigue todavía en el poder, apoyando a nivel provincial y nacional. Y más dolor me da estar preso en el Penal de Villa Gorriti donde estuvieron los presos políticos en dictadura, y donde se dice que ya no se sufren mas torturas pero en mi caso lo sufrí cuando me ingresaron, cuando fui detenido y quedé preso en esta cárcel”, aseguró en el audio.
“Después de 41 años de lucha de los organismos de derechos humanos y de haber intentado llevar a buen puerto las banderas de la Memoria, la Verdad y la Justicia, nos encontramos con el mismo escenario de los poderes económicos, los poderes reales, dominando toda la escena del país y utilizando las fuerzas represivas para controlar la lucha social y a los trabajadores porque ayer como hoy el modelo que se está implementando en el país es el de una economía conservadora neoliberal y por lo tanto de exclusión. Este modelo ahora tiene una novedad que es la utilización de la justicia para judicializar a los dirigentes gremiales, sociales, políticos, y a todos los que luchan por mejores condiciones de vida. Es el mismo esquema que ha privado de la libertad en forma arbitraria a Milagro, y a muchos otros luchadores a lo largo y ancho del país”, aseguró Juan Manuel Esquivel, diputado del Frente Unidos y Organizados por la Soberanía Popular.

Vuelta al pasado

Durante la jornada, los tiempos que se viven hoy en el país en general y en la provincia en particular, fueron también analizados en el marco de la situación regional y vinculados directamente con lo que se vivió en plena dictadura con el Plan Cóndor. Hace pocos días, el ex juez de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, Eugenio Raul Zaffaroni había planteado que hoy ese acuerdo regional se plasma no a través de los militares, sino de un poder judicial que actúa coordinadamente con el económico y el mediático con el fin de avasallar los derechos conquistados.
En ese contexto, Luis Paz, que también integra el equipo de defensa de Milagro Sala, señaló que este proceso “se inició en Paraguay con el golpe blando contra Lugo, con un intento contra Correa en Ecuador, luego con la destitución de Dilma en Brasil y la persecución judicial contra Lula. Ahora en la Argentina existe una clara estrategia de neutralizar a opositores electorales, usando al poder judicial como ariete, lo cual contribuye al desprestigio de la política. La idea es aniquilar al opositor, visto como enemigo, por vía judicial  y para ello basta algún juez servil a los servicios de inteligencia y a los medios hegemónicos. Hoy el Poder Judicial, salvo contadas y honrosas excepciones, son los grupos de tareas que otrora desaparecían a los compañeros y compañeras. Solo la unidad y la lucha en la calle es la clave para sostener y profundizar la democracia a la que estos grupos están empeñados en destruir”, analizó.

Presentes ahora y siempre

Durante el acto en Libertador se hizo también un homenaje a Rita Cordero de Garnica, una de las mujeres secuestradas durante esas noches oscuras, cuando estaba preso su marido Agustín Donato Garnica, fundador del sindicato de zafreros de Ledesma. El 20 de julio de 1976, los camiones se llevaron a ella y a dos de sus hijos –Miguel Angel y Domingo Horacio-de su casa. Rita estuvo secuestrada seis meses, los hijos aún permanecen desaparecidos. Su marido pasó siete años en la cárcel. Y ella perdió la casa por disposición del Ingenio.
“Es un ícono de la lucha contra la impunidad”, dijo Inés Peña. “Una de las representantes de la lucha contra la dictadura y contra la impunidad civil y empresarial. Siempre en sus denuncias nombraba a la empresa Ledesma, pero además está todo lo que ella misma sufrió: en sus recuerdos siempre contaba cómo cuando lo detienen al marido, inmediatamente la empresa le quita casita donde vivía. A él lo detienen por sindicalista”, dijo Inés sobre las prácticas de la empresa a la que se la acusa hoy de mantener su impunidad amparada por el Poder Judicial.
La movilización, encabezada por los organismos de derechos humanos y de la que participaron organizaciones sociales, gremiales, políticas, estudiantiles, repudió los hechos ocurridos en 1976, durante las noches de la última semana de julio, cuando fuerzas policiales irrumpieron en Calilegua, Libertador General San Martín y El Talar para secuestrar a más de 400 personas en medio de un corte energético que se prolongó durante 7 noches. 33 de esas personas todavía continúan desaparecidas.
“Se lograron avasallar entonces los derechos de los trabajadores. Todos los dirigentes gremiales y luchadores sociales habían sido secuestrados dejando a los obreros completamente desamparados, producto también de la imposición del terror”, recordaron.
Hoy la historia vuelve a repetirse. Una vez más, como tragedia.
Fuente:ElSubmarino

No hay comentarios: