El represor Jorge Olivera arremetió en contra de la jueza Margarita Camus este lunes durante una nueva jornada de juicio por los delitos de Lesa Humanidad. Aseguró que la magistrada le habría armado una causa en su contra.
martes, 08 de agosto de 2017
"La jueza le habría ofrecido que declarara en contra mío a cambio de favorecerlo en sus salidas transitorias y libertad condicional". Las palabras corresponden al represor Jorge Olivera y fueron vertidas este lunes, durante una nueva jornada de juicio por los delitos de Lesa Humanidad que se desarrolla en San Juan. La jueza a la que hace alusión es Margarita Camus, quien durante la dictadura militar fue víctima y ahora fue nombrada por el represor para involucrarla en una maniobra ilegal.
"En el 2008 tuve la opción de poder ejercer mi propia defensa como abogado en causa porpia. Me lo permitió el juez Rago Gallo. Concurría día por medio al juzgado para trabajar en la causa. En una de esas oportunidades que voy al Juzgado me encuentro con la declaración del señor Grecco que manifestaba que me había visto en el penal y me mencionaba como que yo fui uno de los torturadores", comenzó relatando Olivera frente al tribunal federal que lleva el juicio en el edificio del rectorado de la UNSJ.
Olivera explicó que dentro del penal de Chimbas, tenía buena relación con Grecco con quien solía hablar de libros "porque le prestaba muchos" títulos. "Además el señor Grecco me consultaba sobre su detención. Tal es así que una vez a la semana tenía entrevista con los presos comunes del Penal y como anécdota recuerdo haber influido con mi consejo y con alguna documentación que les hice hacer para que salieran en libertad. Pero luego se me prohíbe por la juez Margarita Camus", prosiguió Olivera.
El represor contó que un día cuando regreso del Juzgado Federal, después de haber leído la declaración de Grecco, se acercó al alambrado del Penal de Chimbas para hablar con éste. Allí le preguntó por qué había declarado en su contra y él le manifestó que "no era un tema personal y que tenía que comprender la situación que se encontraba, que llevaba muchos años preso y que la jueza le habría ofrecido que declarara en contra mío a cambio de favorecerlo en sus salidas transitorias y libertad condicional".
En el 2013, Olivera recibió condena con prisión perpetua por los delitos de lesa humanidad cometidos en la última dictadura militar. En este 2017 es uno de los acusados que está en el banquillo por nuevas causas en el contexto del mega juicio que se desarrolla en la provincia.
Fuente:LaProvincia
Un testigo vio como sacaban a la jueza Camus de una sesión de tortura
Lunes, 07 Agosto 2017
Horacio Alejo Maza, uno de los testigos que prestó testimonio ayer en el tercer juicio de lesa humanidad que se realiza en San Juan, declaró haber visto a la actual jueza de Ejecución Penal, Margarita Camus, salir supuestamente de una sesión de tortura en el Penal de Chimbas.Horacio Alejo Maza, uno de los testigos que prestó testimonio ayer en el tercer juicio de lesa humanidad que se realiza en San Juan, declaró haber visto a la actual jueza de Ejecución Penal, Margarita Camus, salir supuestamente de una sesión de tortura en el Penal de Chimbas.
Maza, quien en ese momento estaba detenido en el Servicio Penitenciario por delitos comunes y que trabajaba en la panadería de la institución carcelaria, señaló que a través de una ventana observó como dos personas vestidas de civil sacaban a Camus, quien tenía vendados los ojos y no podía mantenerse en pie, del lugar donde supuestamente los militares torturaban a los presos políticos.
“Muchas veces los presos comunes teníamos que limpiar los pasillos manchados con sangre”, dijo el testigo, quien afirmó también que escuchaba los gritos de las personas que torturaban y que las bajas de tensión en la electicidad del Penal coincidía con las sesiones de interrogatorios a los presos políticos.Maza también reconoció haber visto cuando traían a detenidos encapuchados en un camión del Ejército y que él también fue llevado al RIM 22, lugar en donde sufrió torturas, por recibir entre sus visitas a una militante de la JP, que después desapareció en Buenos Aires durante la última dictadura militar.
Otros de los testigos, Rubén Greco, quien compartió durante un tiempo pabellón con los militantes apresados por la dictadura, también indicó que éstos eran llevados a una sala para ser torturados y que no volvían en muy buen estado.Tanto Greco como Maza señalaron que las personas encargadas de los interrogatorios llegaban al Penal vestidas de civil, portando un maletínPor otra parte, uno de los imputados, el exteniente Jorge Olivera, solicitó un careo con Greco y atestiguó ante los jueces que la actual jueza María Julia Camus trató de direccionar en el año 2008 la declaración de Greco y de otro detenido de apellido Váldez, con el objetivo de que atestiguarán contra los militares a cambio de beneficiarlos con el régimen de salidas transitorias.
En la audiencia de ayer, también declararon, en la llamada causa Nívoli, una de las seis causas que integra el proceso, Ramón Páez, Carlos Astudillo, Víctor Hugo de los Ríos y María Celia de los Ríos.
Fuente:ElZonda
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