Resumen Latinoamericano*, 25 marzo 2020 .
Suecia es el país que mantiene una estrategia diferente frente a la pandemia de coronavirus. ¿Es mejor o peor que la que tomó Argentina? ¿En base a qué compararlas? Ante una situación que muta cada día y obliga a gobiernos a redefinir políticas sanitarias, la fundadora de lavaca, Claudia Acuña, le escribió una carta a la dramatruga América Vera Zabala, hija de exiliados -padre chilenos, madre peruana, nacida en Rumania y ciudadana sueca desde pequeña-, quien además en los últimos años vivió sus dos licencias por maternidad en Argentina , país que conoció por primera vez en 2001 junto a Naomi Klein y Avi Lewis. Le propuso así mantener una correspondencia periódica para comparar resultados de ambas políticas sanitarias y sus consecuencias. Este es el primer intercambio sobre cómo se vive la pandemia en dos países muy diferentes.
Buenos Aires, Argentina 21 de marzo
Querida América:
Mientras escribo estoy escuchando la voz metálica que emite el parlante del patrullero policial, que le ordena a una pareja “ingresar inmediatamente a su domicilio”. Hace una hora dos policías me interceptaron a mí, cuando iba con el changuito de compras hacia la farmacia. Me preguntaron dónde vivía y anotaron en una planilla mi nombre, dirección y número de documento. En la siguiente esquina, había otros dos policías que recibían a través de un handy los datos de quienes habíamos sido interceptados en la otra cuadra: se los dictaba una voz masculina, en voz alta.
La calle está desierta, pero hay un sol espléndido.
Miro hacia el cielo celeste, despejado, brillante, para tranquilizarme: quizá la salud de ese cielo sea suficiente motivo para padecer los traumas de quienes en este país sobrevivimos a una dictadura.
Quizá.
¿Cómo saberlo?
El tercer día de encierro obligatorio tiene estas companías: angustias, remordimientos, viejos traumas y nuevos miedos.
Estar encerrada no es el problema para quien siempre está acompañada por el ejercicio de la escritura. Lo que es un gran, enorme problema, es encerrarse con este contexto de película de ciencia ficción, que produce una inquietud permanente, que no descansa.
¿Esto es real?
Es decir:¿esto es lo que tenemos que hacer para salvarnos?
¿Cómo saberlo?
El periodismo me dio herramientas para buscar información, pero soy vieja y las que me enseñaron, practiqué y enseñé hoy son tan imposibles de usar, como una grabadora a casette o una Remington.
Como editora, oficio que ejercí durante largos años en diversos medios y que, con recursos o sin ellos, me obligó a chequear la información antes de publicarse, he tenido que enfrentar muchas veces momentos opacos, operaciones de prensa, filtraciones, delaciones, denuncias, off the records y todos esos virus que infectan los medios. Estoy entrenada para eso.
Tres fuentes. Esa es la regla.
¿Cuál serían entonces las tres fuentes de esta información que nos ordena al “aislamiento social”, so pena de morir o infectar a otres?
Una, claramente, es la gubernamental.
La voz del Presidente en cadena nacional y la de los ministros del área responsable de responder a una pandemia ordenaron quedarse en casa. Son ellos entonces los responsables de haber tomado las medidas más drásticas de los países que, según la información que recojo en diferentes medios, han tenido que enfrentar el virus. Más que China, incluso, que solo aisló a las ciudades foco de la infección. Las autoridades argentinas, en cambio, han decidido aislar al país, con sus 44 millones de habitantes.
Hasta ahora las cifras le dan las razones para justificar estas medidas sanitarias extremas: a este día y hora, hay 158 infectados y cuatro muertos.
En Chile, país en el que apareció el mismo día que en Argentina el caso número 1, los infectados son 536. Hoy tuvo su primera muerta, una mujer de 83 años.
Las medidas que tomaron en Chile: desde el 18 de marzo cerró todas las fronteras y se declaró el Estado de Excepción, que le permite al gobierno restringir libertades constitucionales, en un contexto de permanente movilización social de protesta.
Toda América Latina suma 1.600 infectados y 14 fallecidos. Estamos hablando de países con situaciones de gobernabilidad muy distintas y que tomaron diferentes medidas restrictivas, pero ninguna tan extrema con la Argentina.
En todos los casos, son datos, cifras y caracterizaciones que provienen de una misma fuente: la gubernamental.
La segunda fuente proviene de instituciones y profesionales expertos en salud, epidemias y pandemias. Estamos hablando, por ejemplo, de la Organización Mundial de la Salud, la misma que negó hasta hace unos pocos años que el glifosato sea cancerígeno. Y lo hizo por presión de las corporaciones farmacéuticas. No extiendo automáticamente este dato a lo que está informando hoy, pero es un antecedente que en Argentina significó una larga lucha por parte de científicos que sufrieron agravios y discriminaciones por discutir en su momento este posicionamiento de, nada menos, la máxima autoridad sanitaria global. Es decir: Argentina fue pionera en revelar qué representaban los agrotóxicos para la salud de la población y por eso mismo, aprendimos –como periodistas, como editores- cómo la corporación farmacéutica global infecta a la información.
Es por eso mismo que reclamamos que los llamados expertos identifiquen públicamente qué relación mantienen con esas corporaciones, para saber así qué tipo de fuente está hablando: ¿es una voz de las corporaciones o de la salud pública? Imposible distinguirlas hoy.
Más allá de que esta opacidad siembre o no sospechas, estamos hablando en cualquier caso de una segunda categoría de fuentes: las institucionales/profesionales.
¿Cúal sería entonces la tercera fuente?
Vos.
Mi tercera fuente sos vos.
Vivís en Suecia, un país que frente al mismo panorama tomó otras medidas, y conocés muy bien Argentina.
Si establecemos un diálogo cotidiano, para ver a dónde nos conduce cada camino, quizá podamos comprender mejor qué estamos haciendo y hasta, quizá, por qué.
Sé que la situación de la que parte Suecia es muy diferente: un sistema de salud pública capaz de atender una demanda mucho mayor que a la que puede responder nuestra Argentina, tras cuatro años de un gobierno que despreció ese sistema y lo condenó al desfinanciamiento, el deterioro y el vaciamiento.
Este gobierno no tuvo ni tiempo para comenzar a recomponerlo, y ese no es un dato menor: ubica a esta pandemia en uno de los peores momentos del sistema. Pero como ya sabrás, la larga tradición de excelencia y dedicación de los profesionales de salud argentina hacen también una diferencia. Dependemos entonces de ese tesoro: el humano.
Así las cosas, así estamos.
Con bares, cines, teatros, librerías, kioscos, peluquerías y comercios cerrados; calles desiertas, y colas en la calle, un metro de distancia entre una y otra persona, en las puertas de hipermecados y cadenas farmaceúticas. No deja de ser una ironía que la mayor de esas cadenas pertenezca a un funcionario del anterior gobierno.

Estocolmo, Suecia, 22 de marzo de 2020
Querida Claudia:
Recuerdo que cuando estuve en Buenos Aires fui hacerme la manicura en un local de Palermo Hollywood, muy cerca de donde vivía. La chica, muy joven, cuando le dije que era de Suecia me respondió:
-Ah! Ahí hay socialismo.
Noté un tono de sueño en su voz. Suecia nunca fue un país socialista. Pero, ponle que entre los años 50 y 91 sí tenía un sistema diferente, especialmente durante el gobierno de Olof Palme, que le otorgó a este país una voz particular que lo diferenció de los otros países europeos y occidentales. Hubo, sí, en esa larga época, una sociedad de bienestar muy desarrollada.
Marcó el fin de esa etapa ensoñada en el año 1991 porque esa es la única crisis que pasé en este país durante toda mi vida. Es ese tiempo tenía 15 años y era muy chica para ver el macro. Solamente vi el micro: mi madre perdió su trabajo, cosa que generó en nuestra familia muchas cosas malas. 1991 fue el año que el neoliberalismo hizo su entrada en Suecia y el país pasó así de ser una sociedad de pleno empleo a soportar los peores momentos de desempleo, que rondaron entre el 10 y el 12%. En 1991 Suecia dejó de ser el país diferente. Lo interesante es que ahora vuelve a serlo. El coronavirus nos distingue. En este país tenemos algo que se llama Folkhälsomyndigheten, la autoridad de salud pública me dice googletranslate que se llama. Ellos han decidido no hacer como los otros países. No hemos cerrado escuelas ni hemos prohibido la gente salir de sus casas, aunque en estos días un decreto real recomienda tomar medidas de “aislamiento social”. El mensaje es: “Lávate las manos, quédate en casa si tienes síntomas, aunque sean mínimos, y evita las visitas a hospitales y residencias de anciano”. Guarderías, escuelas y universidades permanecen abiertas, los negocios también, y lo único que se ha prohibido por decreto son los actos con más de 500 personas. El epidemiólogo jefe de la Agencia de Salud Pública, Anders Tegnell, la principal voz científica al mando , ha puesto en duda reiteradamente las medidas drásticas que están tomando la mayoría de países europeos, argumentando que no son sostenibles en el tiempo. “Esta situación se alargará meses; no podemos simplemente decir que todo estará cerrado durante varios meses. No funcionará”. Tegnell argumenta que la propagación del virus en Suecia está aún en una etapa temprana y es posible retrasarla si todo el mundo sigue los consejos de protección. “El equilibrio entre política y ciencia en nuestro caso es un poco diferente que en otros países”, ha dicho a la prensa.
En sus mensajes públicos, el primer ministro, Stefan Löfven, apela a la “solidaridad” y a la “responsabilidad individual”.
Hay países como China, hay expertos y gente que juega a ser experta que están muy enojados con Suecia por ser diferente, y eso me pone orgullosa, sin saber nada ni de virus ni de pandemia, pero me hace recordar porqué hay gente que piensa que este país es socialista. No es por nuestros gobiernos, sino por nosotras, las personas responsables que habitamos esta parte del mundo.
¿Si?
Eso es lo que nos están diciendo hoy nuestros gobernantes.
Conocí Argentina en 2001, cuando viajé con Naomi Klein y Avi Lewis, y vi en las calles cómo desafiaban un Estado de Sitio. No debe ser fácil en un país así que desde el Estado se convoque a la “responsabilidad individual” , pero tampoco debe ser nada fácil acatar una orden de aislamiento social en un contexto de desigualdades sociales. Ojo: no lo digo como crítica, sino para que lo pensemos juntas.
Los efectos del coronavirus comenzaron a llegar a mi vida el martes 11 de marzo. Lo recuerdo perfectamente porque a una de mis mejores amigas le han detectado cáncer de mama y tenía ese día su primer chequeo. Quedamos en vernos después e ir juntas al Museo de Arte Moderno para ver la exposición del artista libanés Walid Raad, quien no solamente es un genio, sino un creador fantástico, que narra historias de las guerras que azotaron su país a través de un colectivo de ficción que creó con el nombre Grupo Atlas. Su manera de contar esas historias me hizo recordar mucho a Borges.
Aquel día estábamos casi solas en el museo, pero nuestra crisis era el cáncer y el coronavirus ni estaba en nuestros pensamientos.
Al día siguiente se cancelaron las visitas guiadas.
Al tercero, cerró el museo.
Al día de hoy hay 16 muertos y 1.439 infectados por el virus.
Las cifras nos dicen que son las más bajas de Europa, actual foco de la pandemia.
Hoy creo que mi síntoma de infección de coronavirus es sentirme intelectualmente mutilada.
No estoy encerrada, pero leer el decreto de recomendación de “distancia social” me alerta: ¿cambió algo importante?
No saberlo me da miedo.
*lavaca
Se congelarán por 180 días alquileres e hipotecas/ Coronavirus: suspenden las repatriaciones de argentinos varados
Resumen Latinoamericano*/ 25 de marzo 2020 .
La iniciativa oficial será girada al Congreso Nacional
Se congelarán por 180 días alquileres e hipotecas
El presidente Alberto Fernández anticipó que el Gobierno prepara un proyecto de ley para congelar por seis meses los alquileres, así como las cuotas de las hipotecas y las ejecuciones por falta de pago. Es en respuesta a la emergencia sanitaria.

El presidente, Alberto Fernández, anunció que enviará al Congreso un proyecto de ley para congelar el precio de los alquileres por 180 días y suspender los desalojos por falta de pago. Además, la iniciativa fijará las cuotas mensuales para los deudores de créditos hipotecarios UVA y prohibirá las ejecuciones (Ver aparte). El proyecto lo trabaja la Secretaría Legal y Técnica, a cargo de Vilma Ibarra, e ingresará al Congreso a través de la Cámara de Diputados. Se trata de una nueva medida económica que lanza el Gobierno para contener la crisis económica a raíz de la cuarentena y el freno de la actividad que implica el coronavirus. Tanto Estados Unidos como Francia y España dispusieron medidas especiales, como la suspensión de desalojos y el freno al pago del alquiler. A la batería de anuncios de la semana pasada se sumaron en estos días el ingreso de emergencia para los monotributistas y la prohibición del corte en los servicios públicos.
“Le pedí a Sergio Massa que se ponga a estudiar el tema”, aseguró Fernández en una entrevista televisiva en el canal Telefé. El diputado ya cuenta con un proyecto de ley de este tipo, pero este jueves se reunirá con Ibarra de la secretaría de Legal y Técnica para delinear un proyecto único. Establecido el documento, se lo enviarán a los presidentes de cada bloque y el viernes realizarán una reunión de labor parlamentaria por videoconferencia entre las autoridades de los bloques para ver cómo podrían sesionar la semana que viene. “Se podría sesionar en forma digital, con aplicaciones como Zoom”, explicaron a este diario desde el entorno de Massa. Fuentes parlamentarias no descartan implementar un sistema mixto, con algunos legisladores en el recinto y otros conectados al debate de manera virtual. La medida deberá aprobarse por el Congreso porque así es como deben modificarse las cuestiones tributarias y penales. “Lo ideal es que tenga la fuerza de la ley”, agregaron las mismas fuentes.
Los anuncios del presidente implican que los inquilinos mantendrán el mismo valor del alquiler por los próximos seis meses, aún cuando tengan en ese plazo el ajuste semestral que establece el contrato. “El congelamiento es fundamental, porque una vez que termine el desastre sanitario los problemas en la economía doméstica van a seguir. En la Ciudad el 60 por ciento de las personas gana menos de 30 mil pesos, y el alquiler de un departamento dos ambientes es de 15 mil pesos en promedio”, aseguró a PáginaI12 Fernando Muñoz, de la Defensoría del Inquilino. “La incidencia de los ingresos en el alquiler puede llegar al 50 por ciento por cómo se depreció el salario en estos años”, agregó. En la Ciudad, el 53,2 por ciento de los hogares es inquilino y sólo un 19,3 por ciento es propietario de vivienda y terreno, según un informe realizado a fines de 2019 por la ex Secretaría de Vivienda de la Nación y la consultora Hábitat para la Humanidad.
Por otro lado, Muñoz celebró el anuncio de la suspensión de desalojos. “Hay 35 mil familias, es decir 100 mil personas, que alquilan en hoteles-pensiones y están ligados al mercado informal de trabajo, por lo que es una población que dejó de tener ingresos y que a fin de mes les van a decir que se vayan”, indicó Muñoz. Además, el defensor del pueblo de la Ciudad, Alejandro Amor, le entregó al gobierno un pedido para que haya prórrogas automáticas a fin de mes de los casi 20 mil contratos que terminan en Capital. “Hay gente a la que le están pidiendo 100 por ciento para renovar y quedarse, especulan con que no se van a poder mudar”, informó Muñoz.
Desde la Cámara Inmobiliaria prepararán un documento para entregarle al Gobierno para que consideren otro tipo de medidas. Una de las propuestas podría ser la segmentación de las medidas, para que sea tomada para los que más lo necesitan y no de manera universal, tal como se estableció con la prohibición del corte de los servicios públicos. Además, buscarán digitalizar todos los pasos para que continúe el mercado inmobiliario en caso de que se extienda la cuarentena. “Queremos que se puedan hacer tours virtuales para conocer una propiedad, que los contratos puedan hacerse con firmas online, hay que aplicar la modernidad en forma urgente”, informó a este diario Alejandro Bennazar, presidente de la cámara. Buscarán entregarlo el lunes que viene tras consensuarlo con las cámaras de todas las provincias. “Estimamos que el 50 por ciento de los propietarios viven de la renta, porque muchos son jubilados o parejas que ahorraron para tener un complemento al salario”, aseguró Bennazar.
Alberto Fernández dijo que por el momento solo se tendrán en cuenta «situaciones excepcionales”
Coronavirus: suspenden las repatriaciones de argentinos varados
«Los iremos a socorrer cuando el riesgo argentino sea manejable”, explicó el Presidente.

El presidente Alberto Fernández anunció que «por ahora los regresos» de argentinos que quedaron varados en el extranjero «están suspendidos», con la excepción de los mayores de 65 años y aquellos con riesgo de salud.
Hemos decidido no ingresar más gente, por lo tanto he instruido al canciller (Felipe Solá) para que ayude con recursos a los que estén en el exterior hasta que podamos ordenar este tema», anunció este miércoles por la tarde el jefe de Estado.
En una entrevista con el canal Telefé, el mandatario subrayó que «por ahora los regresos están suspendidos», al responder una consulta sobre los argentinos que se quedaron varados en el exterior en medio de la pandemia de coronavirus. «Estamos tratando de reglamentar solamente el ingreso de los mayores de 65 años porque son los que más riegos tienen», precisó el Presidente, quien indicó de esta manera cuál será la prioridad para la repatriación de ciudadanos que viajaron al exterior en las últimas semanas.
Además, Fernández dijo que las personas que se encuentran fuera del país «salvo algún caso excepcional que lo justifique van a tener que esperar el momento del regreso» y que eso va a ocurrir «cuando el riesgo en Argentina sea manejable».
El jefe de Estado informó también el aeropuerto internacional de Ezeiza «no está operativo» y que las autoridades argentinas no están autorizando vuelos en esa estación aérea. «No es que se cierre, simplemente no vamos a generar vuelos. No está operativo. No se cerró nada, por ahora no está operativo porque no estamos autorizando vuelos», explicó.
*Fuente: Página12
La defensora del genocida Antonio Bussi, flamante funcionaria en Tucumán
Por Ramiro Rearte */ Resumen Latinoamericano/ 25 de marzo 2020 .—
Gilda Pedicone será asesora letrada del parlamento
Gilda Pedicone de Valls es macrista. Tendrá mucho poder dentro de la legislatura provincial y podrá iniciar sumarios internos contra los empleados de la Legislatura. Quiénes acompañaron la decisión del vicegobernador. El silencio de los medios locales.
El vicegobernador de Tucumán, Osvaldo Jaldo, designó como funcionaria a la ex fiscal de Estado y defensora del genocida Antonio Domingo Bussi: se trata de la abogada Gilda Pedicone de Valls.
El cargo creado es “Dirección de Asesoría Letrada” del parlamento tucumano. Jaldo tuvo la iniciativa hace diez días, acompañado por la mayoría de los legisladores que pertenecen al cuerpo, que guardaron silencio igual que la mayoría de los medios de comunicación locales.
Las funciones de la defensora del genocida Bussi comprenden asesorías letradas, administrativas, legislativas, judiciales e investigaciones administrativas dentro de la Legislatura provincial. Pedicone de Valls no sólo tendrá mucho poder interno dentro de la legislatura, sino que también podrá iniciar sumarios internos en contra de los empleados y trabajadores legislativos.
Jaldo se vio envuelto en un escándalo a principios de este año, cuando el constitucionalista Luis Iriarte, por carta documento, le pidió al presidente de la Cámara que se difunda el listado de empleados y sueldos que tienen cada uno de los legisladores. Aún Iriarte espera la respuesta. La Legislatura tucumana está segunda en el ranking de los mayores gastos parlamentarios. En 2019, tuvo un presupuesto de 5.300 millones de pesos.
La nueva funcionaria legislativa fue fiscal de Estado durante el gobierno del represor, condenado por delitos de lesa humanidad, Antonio Domingo Bussi, durante el período 1995-1999. También fue abogada defensora del mismo genocida cuando se realizó el juicio político en su contra y le descubrieron cuentas secretas en Suiza. Por entonces, Bussi inmortalizó la frase “ni lo niego, ni lo afirmo”. Durante el proceso que se llevó adelante, Gilda había realizaciones declaraciones como abogada defensora del ex militar.
En 1998, cuando Bussi fue acusado por falta a los deberes de funcionario público, Pedicone de Valls declaró que «en tiempo y forma, el señor gobernador había dado cumplimiento a las disposiciones de la ley 3981 y sus decretos reglamentarios, presentando la declaración jurada patrimonial al asumir su cargo y, posteriormente, su actualización en febrero de 1998».
Pero el fiscal federal Paul Starc descubrió, en ese momento, la existencia de dos cuentas bancarias más en Estados Unidos y en Alemania y detectó 16 inmuebles familiares. Aún así, Pedicone de Valls aseguró que Bussi era inocente.
A pesar de no haber tenido cargos públicos desde la retirada del represor en 1999, Pedicone no perdió el tiempo. Desde que comenzó la campaña de Mauricio Macri para presidente en 2014, trabajó para Cambiemos en Tucumán junto al ex funcionario de Aysa Pablo Walter. Es más, estuvo a cargo de la filial local de la Fundación Pensar, órgano de pensamiento del macrismo en todo el país.
Cuando el vicegobernador Osvaldo Jaldo, compañero de fórmula de Juan Manzur, juró como diputado nacional en 2013, lo hizo por “el mejor gobernador de la historia de Tucumán”, en alusión al ahora senador acusado de violación de su sobrina, José Alperovich.
Cuando fue designada, hace pocos días, Pedicone de Valls dijo que, “asumí esta oportunidad con compromiso y dedicación. Es mi deseo hacer un aporte serio y comprometido y estoy muy conforme con el equipo y el desafío”. Lo curioso es que cuando se difundieron sus antecedentes profesionales y académicos sólo se puso en valor su paso por cátedras universitarias y no su vinculación y pasado con el bussismo.
Tucumán tiene antecedentes en la designación de funcionarios con poder a civiles colaboracionistas con los genocidas de la peor dictadura militar argentina. En 2008, el ex gobernador Alperovich quiso designar como vocal de la Corte Suprema de Justicia a Francisco Sassi Colombres, colaborador letrado del torturador Bussi. Fue por la intervención del ex presidente Néstor Kirchner lo que obligó a Alperovich a hacer jurar y renunciar al funcionario el mismo día.
Envio:RL


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