COLOMBIA.

El pueblo enfrenta en las calles al régimen dictatorial de Duque y a sus policías

Resumen Latinoamericano, 11 septiembre 2020.

Las protestas contra la violencia policial se intensificaron en la segunda noche de manifestaciones que incluyeron la detención de defensores de derechos humanos.

Las protestas violentas contra la brutalidad policial, desatadas por la muerte de un hombre de 46 años en Bogotá y que la víspera dejaron diez víctimas mortales, continuaron este jueves (10.09.2020) con disturbios en diferentes ciudades del país y denuncias de detenciones de defensores de DD.HH.

La agitada jornada comenzó muy temprano con el primer balance de las autoridades sobre lo que ocurrió el día anterior, en el que murieron siete jóvenes de entre 17 y 27 años en Bogotá y tres más en Soacha, ciudad aledaña a la capital colombiana.

Asimismo, una mujer fue atropellada por un bus hurtado por «un vándalo», dijo el ministro de Defensa, Carlos Holmes Trujillo. Las protestas dejan además 209 civiles y 194 uniformados heridos, junto con decenas de puestos de policía destruidos y daños en vehículos de servicio público.

En la noche de este jueves, el blanco de las protestas fueron nuevamente los Comandos de Acción Inmediata (CAI) de la Policía, atacados con piedras y otros objetos y obligaron en algunos casos a la intervención de unidades antimotines.

La mayor concentración ocurrió en el CAI de Villa Luz, donde trabajaban los dos uniformados involucrados en la muerte de Javier Ordóñez, cuyo fallecimiento avivó las protestas callejeras. Si bien allí hubo disturbios e incluso agitadores trataron de incendiar de nuevo la instalación policial, las situaciones más difíciles se vieron en otros barrios en los que se produjeron choques con el Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD) de la Policía.

En esos disturbios los manifestantes prendieron fuego y destruyeron los CAI de barrios como Las Ferias y La Macarena, e incluso volvieron a atacar lo que quedó de los de La Gaitana y Verbenal, destruidos la víspera.

También hubo desórdenes en otras ciudades como Medellín, Cali, Barranquilla, Manizales, Pereira y Cúcuta. Sin embargo, una de las situaciones más graves sucedió en Cajicá, municipio cercano a Bogotá, donde ocurrió una revuelta y la Alcaldía decretó un toque de queda en vigor desde las 17.00 horas. Pese a ello, hubo quienes permanecieron en la calle de noche e ingresaron a la sede de la Alcaldía, que fue saqueada.

«Esta no es la forma de protestar, esta no es la forma de reaccionar (…) Han destruido la administración municipal, ha destruido la estación de Policía y están destruyendo los locales comerciales», dijo el alcalde del municipio, Fabio Ramírez.

Detención de personas defensoras de derechos humanos

La Oficina de la Alta Comisionada de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para los derechos humanos advirtió que hubo defensores de DD.HH. detenidos por la Policía en Bogotá y en Villavicencio, capital del céntrico departamento del Meta.

«En cumplimiento de nuestro mandato estamos haciendo seguimiento a los casos de los defensores y defensoras de DD.HH. detenidos en Bogotá y Villavicencio. Es fundamental ofrecer garantías para labor de defensa de derechos humanos durante jornadas de protesta social», expresó el organismo en sus redes sociales.

De igual forma, la directora para las Américas de Amnistía Internacional, Erika Guevara-Rosas, denunció en su cuenta de Twitter la «detención arbitraria de cuatro personas defensoras de DD.HH., quienes formaban parte de una Comisión de Verificación, precisamente para documentar posibles violaciones de derechos humanos en manifestaciones”.

Masacre en Bogotá: la noche en la que todo ardió

Colombia Informa /Resumen Latinoamericano, 11 de septiembre 2020.

“No más, por favor”, fueron las palabras que dijo Javier Ordóñez mientras dos policías lo asesinaban en la madrugada del miércoles 9 de septiembre. A raíz de este hecho, varias ciudades del país convocaron movilizaciones y protestas que, en Bogotá, finalizaron con al menos siete personas asesinadas también por la policía. 

La indignación que desató el asesinato de Javier Ordóñez, un abogado de 46 años, se cristalizó en las protestas que hubo en ciudades como Ibagué, Cali, Neiva, Medellín, Barranquilla, Pitalito, Bucaramanga, Pereira, Tunja, Popayán y Bogotá. Las cacerolas, las pintas, y la acción directa contra los Comandos de Acción Inmediata -CAI- de policía, fueron comunes en todos los lugares en los que se presentaron movilizaciones. 

Este hecho también sacudió las redes; #ACAB, #JavierNoMurióAJavierLoMataron, y #ColombiaLivesMatter, fueron algunas de las tendencias que ocuparon las redes sociales durante la tarde y la noche del 9 de septiembre.

En la capital la convocatoria comenzó desde el mediodía en varias localidades. El primer punto de encuentro fue en el CAI de Villa Luz, el mismo lugar al que fue transladado Javier Ordoñez aún con vida, y donde, según testimonios de sus familiares, fue golpeado por los policías que lo asesinaron.

En el transcurso de la tarde, al menos 22 CAI más fueron intervenidos por manifestantes que expresaron su rabia e indignación por el asesinato de Javier Ordoñez y por las violaciones sistemáticas de Derechos Humanos por parte de la Policía. 

Durante las jornadas, la organización Defender la Libertad registró al menos 24 personas heridas y 45 detenidas a raíz del accionar de policías que, en contravención a los protocolos de intervención, ocultaron su identificación para agredir a manifestantes, prensa y defensores de Derechos Humanos.

Los muertos ya son 12

Asesinato de Javier Ordóñez será investigado por fiscal especializado en DD.HH.

Resumen Latinoamericano, 11 de septiembre de 2020.

Luego de conocerse que el caso de Javier Ordóñez, abogado asesinado este miércoles en Bogotá en medio de una intervención policial, iba a pasar a la Justicia Penal Militar, la Fiscalía General de la Nación, se pronunció señalando que este caso pasaría a ser investigado por un fiscal especializado en Derechos Humanos.

Sobre las 11 de la mañana el Fiscal General de la Nación, Francisco Barbosa, anuncio que un fiscal especializado de Derechos Humanos asumiría la investigación por el homicidio de Javier Ordóñez , y además agregó «se dispuso la creación de un equipo de la más alta calidad forense investigativa y jurídica para dar celeridad al proceso».

Enfatizando que para optimizar la investigación sobre el homicido de Javier Ordóñez; esta investigación se sumará el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI), realizando diferentes labores de investigación en la recolección de videos y testimonios, «con el ánimo establecer lo sucedido».

«Por la gravedad de la afectación evidenciada y por competencia, el caso fue asignado a un fiscal de la dirección especializada contra las violaciones de los Derechos Humanos, que con la debida diligencia coordinará la obtención del material probatorio y hará la respectiva valoración«

En el mismo comunicado el fiscal Barbosa expresó su rechazo y aseguro iniciar «labores de investigación para identificar y judicializar a los responsables de los ataques, contra la infraestructura pública, funcionarios y demás hechos delictivos« en el marco de las movilizaciones de este 10 de septiembre en horas de la noche.

La noticia se da en medio de un contexto en el que organizaciones sociales cuestiona el trabajo de la Fiscalía, ente que afirma haber adelantado el esclarecimiento entre un 58 y un 60% los homicidios contra líderes sociales, mientras defensores de DD.HH. afirman que este esclarecimiento no pasa de un 14%, lo que ha llevado a resaltar la necesidad de que la Fiscalía no solo investigue e incremente sus investigaciones sino que impida el aumento la impunidad (Le puede interesar: «Fiscalía no está sirviendo en el país»)

Esto mientras sigue sin haber un pronunciamiento oficial por parte del Gobierno ante las acciones de la Fuerza Pública que dejaron como resultado de, 24 heridos, 19 por arma de fuego, cerca de 45 detenidos, y 7 posibles casos de homicidios.

Fuente: Contagio Radio

Envio:RL