Masacre: pedirán otra vez extraditar al teniente Bravo
El ex militar vive en Estados Unidos. Y para la Justicia fue uno de los responsables máximos de los fusilamientos del `72. En 2010 fracasó el primer pedido de extradición pero se enviaron nuevas pruebas que lo comprometen.
Por Rolando Tobarez
El Juzgado Federal de Rawson ya envió las evidencias extras que le pidió el Ministerio de Relaciones Exteriores de la Nación para que Argentina pueda insistir ante Estados Unidos con la extradición del ex teniente de la Armada Argentina, Roberto Guillermo Bravo. El militar retirado está acusado por el juez Hugo Sastre de participar de la Masacre de Trelew, en la que murieron 16 presos políticos en la Base Aeronaval Almirante Zar el 22 de agosto de 1972, y otros tres resultaron gravemente heridos.
A fines de 2010, un juez federal del sur del Estado de la Florida, Robertu Dube, rechazó una primera solicitud de extraditar al ex teniente. El magistrado, en un fallo de 21 páginas, argumentó su decisión y dio a entender que existían “dudas” sobre las evidencias presentadas contra Bravo por el juez Sastre.
Sin embargo, el escenario es distinto: hay 6 cuadros de la Armada que el 10 de abril irán a juicio oral por la Masacre. Esto implica que el caso no proscribió –tal como entonces argumentó la defensa de Bravo- sino que varios de sus colegas de armas corren serio riesgo de ser condenados por un delito de lesa humanidad y como tal, imprescriptible. Cabe recordar que a Bravo se lo quiso extraditar para ser indagado cuando el proceso no tenía el avance actual.
El secretario penal del Juzgado rawsense, Gustavo Lleral, le dijo a Jornada que la cartera que conduce Héctor Timerman “nos informó que trataba de presentar un nuevo pedido de extradición ante un juez distinto, una posibilidad que permite el proceso de extradición de EE.UU.”. El dato alentador es que hay más evidencias disponibles que para el primer intento, gracias al avance de la pesquisa. “Hay nuevas pruebas y está la posibilidad de que se enjuicie a los coautores de los hechos –dijo Lleral-. En estos procesos puede valer no sólo la prueba de cargo contra la persona sino también que ya hay un proceso en Argentina”.
El material probatorio que envió el Juzgado ya está bajo análisis de un fiscal norteamericano –acompañado por abogados de la Cancillería argentina- que será quien defienda el caso para lograr traer a Bravo a Rawson. La ventaja extra es que ya sabe cuál es la estrategia de la defensa del teniente retirado.
Aún así, “la extradición depende de una decisión que escapa a todos nosotros, pero sí se presentó la prueba y está en análisis, por lo que se dio el primer paso formal”. El abanico es amplio: desde que el fiscal deseche el caso hasta que pida la detención de Bravo.
En 2010, el juez Dube consideró que Bravo quedó absuelto por la investigación militar realizada en Argentina en su momento, y que el ex militar demostró en su defensa que las acusaciones en su contra constituían un delito político. En aquella ocasión no hubo apelación y la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación no hizo una declaración oficial acerca del fallo.
Bravo llegó a Estados Unidos en 1973 y es ciudadano estadounidense desde 1987. Fue arrestado en febrero del 2010 en el sur de la Florida y liberado bajo fianza. “Debido a que las solicitudes de extradición en general son concedidas, esta es una victoria legal importante”, había dicho Neal Sonnett, su abogado defensor.
Fuente:ElIntransigente
No hay comentarios:
Publicar un comentario