14.08.2014
El juez Rago Gallo comenzó a leerle la acusación, lo que le llevará una semana
Se agrava la situación del deportado capitan Paéz, acusado ahora por el asesinato de Nicolás Farías
Albañil y montonero. Farías junto a su esposa Victorina, de 20 años
San Juan.- La situación del capitán (R) Jorge Horacio Paéz Sinistrari, recientemente deportado desde Bolivia, dónde se había escondido, se agravó ya que el juez federal Leopoldo Rago Gallo lo acusó de haber participado en el asesinato de Nicolás Alberto Farías, albañil y militante de la Juventud Trabajadora Peronista (JTP) de 23 años que fue secuestrado el 17 de agosto de 1976 en su domicilio de la localidad de sanjuanina de Rawson. Paéz, un ex subordinado del prófugo mayor (R) Jorge Olivera en el Regimiento de Infantería de Montaña 22, ya estaba acusado violación de domicilio, privación ilegítima de la libertad, tormentos a detenidos políticos y abuso sexual.
El juez Rago Gallo comenzó a leerle la acusación, lo que le llevará una semana
Se agrava la situación del deportado capitan Paéz, acusado ahora por el asesinato de Nicolás Farías
Albañil y montonero. Farías junto a su esposa Victorina, de 20 años
San Juan.- La situación del capitán (R) Jorge Horacio Paéz Sinistrari, recientemente deportado desde Bolivia, dónde se había escondido, se agravó ya que el juez federal Leopoldo Rago Gallo lo acusó de haber participado en el asesinato de Nicolás Alberto Farías, albañil y militante de la Juventud Trabajadora Peronista (JTP) de 23 años que fue secuestrado el 17 de agosto de 1976 en su domicilio de la localidad de sanjuanina de Rawson. Paéz, un ex subordinado del prófugo mayor (R) Jorge Olivera en el Regimiento de Infantería de Montaña 22, ya estaba acusado violación de domicilio, privación ilegítima de la libertad, tormentos a detenidos políticos y abuso sexual.
El juez Rago Gallo comenzó hoy a leerle a Paéz la acusación que pesa en su contra a la que añadió la de haber participado en el asesinato de Farías, presentado entonces como muerte en un enfrentamiento.
Se cree que Farías fue torturado y asesinado de un balazo en la cabeza en la Comisaría de Zonda, aunque los militares fingieron que la muerte se había producido en un tiroteo, según informó entonces un comunicado las Fuerzas Armadas.
Según su abogado defensor, Juan Marcos Zapata, Páez "sólo estuvo en el Ejército durante seis meses después del golpe militar y es inocente de todo lo que se lo acusa". Sin embargo, oficialmente, Paéz recién obtuvo su retiro del servicio activo el 31 de marzo de 1983.
Páez habría formado parte del grupo liderado por el entonces teniente Jorge Olivera, oficial de Inteligencia del RIM-22 y que, luego de ser condenado a prisión perpetua, se fugó del Hospital Militar Central el año pasado, a un mes de iniciar el cumplimiento de la sentencia. Por su captura -datos que la permiten- el Estado ofrece dos millones de pesos de recompensa.
Páez, alojado en el sector de detención de acusados de delitos de lesa humanidad -donde ya estuvo detenido y de donde fue liberado en 2011 por la Cámara Federal de Mendoza- fue llevado hoy ante el juez Rago Gallo y empezó a escuchar la acusación de la Causa Bustos.
La lectura de la causa, se calcula. demorará una semana. La misma está encabezada por el caso de la desaparición del ex secretario de Bienestar Universitario de la Universidad Nacional de San Juan, Hugo Ricardo Bustos. inclñuye los del actual gobernador José Luis Gioja; del ex senador César Gioja; del ex intendente de Rivadavia, Elías Alvarez; del gremialista Enrique Faraldo y del juez de la Corte Abel Soria Vega, en un total de 34 casos, demorará aproximadamente una semana.
El nuevo caso
En la madrugada del 17 de agosto de 1976, unos encapuchados de botas abrieron a patadas la puerta de la casa de los suegros de Nicolás Farías en el barrio Güemes de la ciudad sanjuanina de Rawson, donde vivía con su esposa Victorina Ortíz, entonces de 20 años, su hijo Gabriel, de un año, y los padres y hermanos de Victorina.
Los obligaron a tirarse al suelo, a punta de pistola, incluso a Victorina que estaba embarazada de 5 meses, preguntando por un tal “Gabriel de la Fuente”, que nadie en la casa conocía. Se llevaron unos electrodomésticos y a Nicolás en calzoncillos. Alcanzaron a ver por la ventana un Fiat 125 que se alejaba pero calculan que participaron del secuestro varios autos más.
Fuente:Telam
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