5 de diciembre de 2021

PERU.

Reflexión de coyuntura

Milciades Ruiz / Resumen Latinoamericano, 3 de diciembre de 2021

Manifestantes el 17 de noviembre, 2020 en Lima, Perú. Foto: Samantha Hare

La inacción nos ha ganado y es una obligación dinamizar nuestra vocación de justicia social. La pasividad es nuestra mayor debilidad y tenemos que superarla. ¿Qué planteo? Pues. Activar el intercambio de ideas para generar iniciativas políticas que permitan el empoderamiento popular.

En estos momentos, desde afuera podríamos ver figuradamente, un escenario político indeseable, en el que un ave que “no tiene vuelo” luce asustado al verse rodeado de “aves de rapiña de alto vuelo”, que lo picotean y quieren eliminarlo. Ante la presión, el bisoño les concede todo para que lo dejen sobrevivir, pero al mismo tiempo les otorga, nuevos motivos que estimulan el ataque contrario. Veamos algunos aspectos.

Es claro que me estoy refiriendo a la situación que atraviesa la nueva administración estatal bajo la conducción del presidente Castillo. La precariedad en la capacidad de gestión pública ha sido su principal característica desde que asumió el mandato hace cuatro meses. Esta precariedad es la causa de muchos desatinos, improvisaciones, discordancias e inconsistencias ideológicas, conceptuales y administrativas.

La falta de destreza en el manejo de situaciones políticas lo está llevando a la autodestrucción. Digo esto porque habiendo recibido un alto respaldo electoral, no ha sabido corresponder a las expectativas esperadas, desalentando este apoyo. Era previsible que habría muchas dificultades opositoras a un gobierno de izquierda, pero al parecer no tenían un plan preconcebido para contrarrestar a la oposición.

A los electores le hubiera gustado que la conducción administrativa se mantuviese firme a sus promesas electorales sin ceder posiciones. El pueblo valora siempre a quienes se juegan la vida por sus ideales, pero repudia a quienes los defraudan. El pueblo defiende a quienes luchan contra sus opresores y no, a los que pactan con ellos. Si los actos gubernamentales no satisfacen las expectativas, entonces el apoyo electoral se desvanece. Lo veremos en las próximas elecciones municipales y regionales.

La lógica era que la nueva administración buscase empoderarse teniendo el manejo estatal, para estar en condiciones de consolidarse y resistir los ataques enemigos. Es lo que hizo Cuba y Venezuela mediante medidas en beneficio de los sectores más pobres, medidas nacionalistas y de recuperación de soberanía en el disfrute de los recursos naturales, relaciones económicas equitativas, etc. Solo así, se va generando poder popular de respaldo frente al poder de la oposición.

Si el gobierno construye sus defensas políticas, la oposición no tendrá mucho margen de maniobra y solo atinará a defenderse. Todo ataque tropezaría con el blindaje popular. Lo hemos visto en el caso del apoyo internacional al gobierno paralelo de Guaidó en el sabotaje para derrocar al gobierno de Venezuela. En cambio, en nuestro caso, la oposición ha pasado al ataque porque su contendor está desprotegido. A pesar de ser manejable, persiste en eliminarlo porque se presta para ello.

Sin embargo, los sectores populares no salen a defender al gobierno. Por el contrario, estos días, las comunidades nativas están en pie de guerra reclamando la acción del gobierno, los obreros marchan reclamando seguridad ciudadana, gremios agrícolas regantes amenazan con paro, las comunidades afectadas por la minería se mantienen en pie de lucha exigiendo cumplimiento de compromisos, los ganaderos reclaman atención del gobierno frente al abuso oligopólico de grandes empresas que dominan el mercado lácteo, etc. etc.

Pero ya todos los gremios están hartos de ser engañados. Por eso, amenazan con paros para ser atendidos. Solo así, logran que el gobierno los atienda, pero solo con promesas, sin tomar medidas efectivas. Apaga incendios con las resabidas “mesas de diálogo” pero no genera apoyo popular. Las promesas no bastan para impulsar movilizaciones populares en defensa de un gobierno que no les ha dado nada todavía. Todo esto, genera un ambiente propicio para la escalada contraria.

Insólitamente, ha sido el presidente el que ha buscado desmontar su base de apoyo orgánico, alejándose del partido político que lo encumbró, pero con el cual, no se identifica. Con ello, ha perdido también su bancada en el Parlamento. ¿Por qué hizo esto? Quizá por falta de visión política estratégica. En la práctica, se ha ido quedando sin partido político. Sus aliados Nuevo Perú, JPP y Frente Amplio, tampoco hacen algo por convocar y movilizar a sus bases en respaldo al gobierno.

La ineptitud suele ser una limitación insuperable para muchos conductores sociales. La improvisada plancha presidencial impuesta de relleno por Perú Libre, ha tenido que improvisar ministros y altos ejecutivos algunos de los cuales, en vez de enaltecer al gobierno, lo han desprestigiado con sus repudiables inconductas. Dos gabinetes ministeriales en tan corto tiempo y siguen los desatinos.

Desde los orígenes de la vida humana, el grupo social siempre ha seguido al líder más apto, porque los ineptos conducen al fracaso. La historia está llena de las proezas legendarias de los conductores sociales, luchando contra la adversidad, para proteger a los suyos. Esta selección natural social, ha sido desnaturalizada por los sistemas de dominación y en nuestro caso, quizá no podríamos culpar tanto al presidente Castillo. Hay responsabilidad de quienes designaron la plancha presidencial solo por cumplir con la normatividad electoral, como lo admite la vicepresidenta.

También es el resultado de un estado de ánimo electoral de repudio a los partidos corruptos. “El tiro les salió por la culata”. Se cosecha, lo que se siembra. No obstante, existen casos de líderes forjados en la lucha contra las barreras de un sistema electoral adverso que, son ejemplo de consecuencia política, coraje y destreza. Salvador Allende fue uno de ellos. Los principios ideológicos no se negocian porque no son una mercancía del mercado.

Quien abraza una ideología por convicción, no puede negarse a sí mismo, amparándose en ambigüedades. Va hasta las últimas consecuencias porque está seguro de los fundamentos de su ideología. Solo los oportunistas vacilan y se entregan por falta de convicción. Culpar a otros por nuestras incapacidades, no es correcto. No es que la oposición quiera vacar al presidente por ser campesino (que no lo es), ni por ser docente profesional. Son los intereses de grupos oligopólicos los que están en juego.

El neoliberalismo ha construido una estructura de lucro y corrupción, que los grupos de poder predominantes no quieren perder. Aunque esta tendencia ya ha penetrado en la actual administración, la oposición quiere asegurarse de que sus dominios no serán afectados en lo mínimo. No confían en el mandatario porque a cada momento suelta amenazas contraproducentes. Por ejemplo, “no dar ni un céntimo” a los medios que lo denigran. El chantaje ridículo es inefectivo. Hay otras maneras de contrarrestar esta ofensiva. Detrás de la prensa están los poderes fácticos.

Nuestra patria sufre de parasitosis de inversión extranjera. Esta epidemia teme los cambios en el sistema vigente. Los depredadores de nuestras riquezas están no solo en la minería e hidrocarburos. Están en todos los sectores altamente rentables de nuestro país. Todo nuestro territorio está concesionado en beneficio de los inversionistas extranjeros con incentivos excepcionales, subsidios, mísera tributación, etc. Tienen en sus manos puertos y aeropuertos, carreteras, servicios turísticos, financieros, telecomunicaciones, operatividad digital, cadenas de tiendas y farmacias, etc. etc. Esto es lo que está en juego.

Las concesiones de perforación petrolera y otros hidrocarburos otorgados como propiedad privada a los depredadores, por encima de los derechos de propiedad de la población amazónica.

Tras estas áreas de depredación van como los buitres carroñeros los empresarios nacionales sub contratistas que hacen el trabajo sucio y participan del festín. Estos, tampoco quieren perder la estructura que parasitan. Corruptos y corruptores de la administración pública son los facilitadores que tampoco les conviene que se acabe la mermelada. Esto es lo que nosotros lo hemos permitido calladamente.

El empoderamiento de la derecha es también por culpa nuestra porque no desarrollamos poder popular. 

Entonces pues, es una cuestión de consciencia nacionalista y de patriotismo desmontar esta estructura depredadora si queremos una patria libre y soberana. Por esto digo que, no toda la culpa la tiene la derecha sino también nosotros por ser permisivos, indiferentes y carentes de patriotismo. El empoderamiento de la derecha es también por culpa nuestra porque no desarrollamos poder popular.

Lo que perdemos nosotros (o lo que nos dejamos ganar) favorece a la derecha y, viceversa. Son contraparte de una misma unidad. Es la ley de los contrarios. Si damos muestras de debilidad, eso estimula al enemigo. Si este, advierte que a la menor presión cedemos espacio, arremeterá seguro de que no encontrará resistencia para su predominio. La corrupción también ha penetrado nuestras filas débiles de honestidad y la depuración es una tarea indispensable.

No es admisible justificar reuniones pactadas fuera de palacio con empresarios que resultan beneficiados con obras públicas de cuantioso presupuesto, como que son reuniones personales, libres de sospecha. Toledo, ODEBRECHT y el Club de la Construcción saldrían bien librados de culpas si dicen lo mismo. Y los corruptos y corruptores actuales no tendrían necesidad de hacer sus arreglos en palacio, sino en domicilio particular para proceder impunemente. Todo esto dice mucho de la calidad gubernamental que tenemos.

Pero visto este problema con sentido procesal, la perspectiva con vacancia o sin ella, no nos da muchas esperanzas de un mejoramiento en el desempeño gubernamental del Ejecutivo ni del Legislativo en los días venideros. Tampoco nosotros salimos bien librados de esta circunstancia negativa. La inacción nos ha ganado y es una obligación dinamizar nuestra vocación de justicia social. La pasividad es nuestra mayor debilidad y tenemos que superarla.

Claro que esta, es solo una opinión particular y admito que puedo estar equivocado. Pero si todos expresamos nuestro punto de vista, quizá salga algo bueno del intercambio de pareceres. ¿Qué planteo? Pues. Activar el intercambio de ideas para generar iniciativas políticas que permitan el empoderamiento popular.

(escrito el 3 de diciembre de 2021).

—-
*Milcíades Ruiz es especialista en desarrollo rural. Dirige el portal República Equitativa: https://republicaequitativa.wordpress.com/ – http://www.gestiones-rurales.blogspot.com/
Mayores detalles en http://www.gestionesrurales.apiaperu.com/

FUENTE: Servindi


Poder Judicial analiza recurso contra 

bloqueo a referendo

Resumen Latinoamericano, 3 de diciembre de 2021

El Poder Judicial de Perú analiza hoy un recurso contra un proyecto de ley aprobado por una comisión parlamentaria y cuestionada porque afecta el derecho ciudadano a un referendo sobre el cambio de la constitución.

La acción de amparo fue presentada por el congresista de izquierda Guillermo Bermejo, quien dijo que la norma impugnada “pretende anular el derecho de los peruanos a realizar un referendo” para cambiar la carta magna.

La demanda fue planteada porque el proyecto amenaza y vulnera derechos constitucionales, explicó, y está dirigida contra los 11 congresistas que formaron mayoría para aprobarlo en la Comisión de Constitución, antesala al debate de fondo en el plenario legislativo.

El analista Alberto Adrianzén declaró que la norma es parte de una estrategia del golpe parlamentario en marcha contra el presidente Pedro Castillo, para lo cual las bancadas de derecha extrema han presentado una moción para vacar (destituir) al mandatario.

Según sus críticos, el polémico proyecto recorta y modifica la Ley de Derechos de Participación y Control Ciudadanos y establece que un referendo para el cambio de la constitución solo será posible si lo aprueba el Parlamento y no a petición de los ciudadanos, vía para la cual el partido Perú Libre recogía masivamente firmas de ciudadanos.

Las modificaciones a la citada ley “secuestran la voluntad popular y continúan desnaturalizando el régimen presidencialista establecido en nuestra Constitución” al recortarse las facultades del jefe de Estado.

“Al crearse de facto una ‘dictadura parlamentaria’ que tiene como fachada un supuesto régimen presidencial, se rompe el equilibrio de poderes y se crea un presidente fantoche, un simple adorno”, declaró Adrianzén a Prensa Latina.

Con anterioridad, el Parlamento redujo al mínimo la posibilidad del mandatario de pedir la confianza en el gabinete ministerial, recurso concebido para proteger a los presidentes del acoso o el obstruccionismo opositor, al autorizar al gobernante a disolver el Congreso si negara esa confianza dos veces.

El exconsejero presidencial Adrianzén señaló que se pretende convertir a Castillo en un presidente sin poder y añadió que “es hora que la estrategia golpista de la derecha sea derrotada por la fuerzas democráticas y de izquierda, para transformar el país y la democracia”.

FUENTE: Prensa Latina



 

El toro por las astas ¿Puede el gobierno 

superar esta crisis?

Paul Maquet / Resumen Latinoamericano, 2 de diciembre de 2021

Un nuevo caso de presunta corrupción ocupa los titulares de los medios de comunicación. La sospecha de que las reuniones de Karelim López con el ex secretario de Palacio Bruno Pacheco y, eventualmente, con el presidente Pedro Castillo, podrían tener algo que ver con la buena prorroga otorgada al consorcio Puente Tarata III, ha calentado otra vez ambiente político. No hay nada concreto que vincule una cosa con otra (un testigo, un maletín, una transferencia), pero el escándalo ya está armado y se configura la enésima crisis política del año.

En términos judiciales, el caso debe ser investigado y -si eventualmente se prueba alguna corrupción- los responsables deben ser sancionados. En términos políticos, la cosa es más complicada, porque el Gobierno está a la defensiva y cada nuevo problema lo debilita aún más. Peor aún con un pedido de vacancia circulando en el Congreso (¡el quinto en los últimos cinco años!).

¿Puede el gobierno superar esta crisis? Sí, pero para eso necesita pasar a la ofensiva y marcar la agenda. Si se trata de un gobierno del cambio, como tanto se ha dicho, entonces debe aprovechar esta oportunidad para agarrar el toro por las astas y apuntar al meollo del asunto: el sistema de contrataciones y licitaciones del Estado. Esa es la verdadera madre del cordero de la corrupción en el Perú, desde Odebrecht y el Club de la Construcción, pasando por las denuncias que se le hicieron a Vizcarra por obras en Moquegua, hasta el presunto caso del consorcio Tarata III.

Parte de la prensa y los actores políticos van usar este último caso simplemente como un arma arrojadiza para golpear al Gobierno y eventualmente justificar una vacancia. Si logran sus objetivos, inmediatamente olvidarán el tema y las autoridades volverán a despachar con empresarios en clubes de San Isidro, como lo han hecho durante décadas.

Pero el encuadre verdaderamente relevante es: ¿cómo podemos revolucionar el sistema de licitaciones de obra pública para erradicar el diezmo y la corrupción? ¿Tiene este Gobierno la voluntad y la iniciativa para ello? Si el presidente Castillo y la premier Mirtha Vásquez anunciaran una profunda reforma de este sistema, cambiarían el encuadre de la discusión.

Pese a que este es el tema de fondo, muy poco se ha hablado de ello en los últimos años en los que hemos pasado de escándalo en escándalo. Propuestas hay muchas: incrementar los mecanismos de transparencia, mayores capacidades para la Contraloría, mayores sanciones tanto a políticos corruptos como a empresarios corruptores, etc.

Aquí quiero soltar una idea, prestada del ámbito científico o académico: la evaluación por pares ciegos. El Estado podría tener un amplio staff de revisores que reciban los expedientes de manera aleatoria y automatizada, sin que los interesados sepan quién va a revisar sus propuestas y sin que incluso estos mismos revisores sepan quiénes más forman parte del jurado. Estos revisores ciegos calificarían las propuestas y tendrían una bonificación si encuentran irregularidades, de manera que tengan un estímulo para ser acuciosos. Posteriormente, se publicarían los nombres de los jurados que calificaron esa obra y los puntajes otorgados, para mantener la capacidad de fiscalización por parte de la prensa y la ciudadanía. Creo que este mecanismo ayudaría a evitar que estos jurados sean manipulados o comprados ya sea por favores políticos o por coimas.

Más allá de esta u otra idea, todas discutibles, el asunto es que la verdadera discusión no es si Castillo se reunió o no en la casa de Breña y si cometió o no un delito, cosa que finalmente debe determinar el Poder Judicial (¡y no el Congreso!). La discusión de fondo es cómo cambiamos el sistema de licitaciones del Estado para erradicar la corrupción que hace que la plata del pueblo se pierda año a año en obras mal hechas y contratos amañados.

Como lo dijo el politólogo Rodrigo Barnechea hace unos días en Twitter, “una condición para hacer reformas es alinear intereses de corto plazo de gobernantes con objetivos de largo plazo del país. Para salvar su presidencia (corto plazo), Castillo podría emprender reforma beneficiosa para todos en el largo plazo”. Ese es el reto.

FUENTE: Wayka.pe


Cuesta arriba vacancia de presidente 

por escaso apoyo

Resumen Latinoamericano, 2 de diciembre de 2021

La vacancia (destitución) del presidente peruano, Pedro Castillo, promovida por la extrema derecha, tiene entre sus obstáculos la carencia de apoyo popular y la imagen negativa de los impulsores de la medida, destacan hoy diversos análisis.

Así lo reconocieron, pese al impacto mediático de reuniones bajo sospecha del mandatario fuera del palacio de gobierno, analistas cercanos a posiciones neoliberales que no simpatizan con el gobernante.

En una entrevista del neoliberal Mario Ghibellini a los analistas José Requena y Omar Awapara, los tres coincidieron en que el nuevo factor usado para acusar a Castillo de corrupción solo ha podido dar los votos que las bancadas parlamentarias requerían para que su moción de vacancia sea debatida, el 7 de diciembre.

Ghibellini reconoció que ni el más optimista de los partidarios de la salida de Castillo podría creer en la posibilidad de que la moción reciba, tras el debate de fondo, el apoyo de 87 congresistas (de un total de 130) que necesitan para defenestrar al maestro rural.

Awapara coincidió con sus interlocutores en que los promotores de la vacancia alcanzarán como un triunfo los 52 votos necesarios para que la moción sea debatida.

Para Requena, esa causa enfrenta como obstáculos su carencia de apoyo popular, verificada por el fracaso de una marcha contra Castillo promovida por la derecha extrema, el sábado último.

Los analistas coincidieron además en señalar incoherencias en la sustentación de la moción de vacancia “por incapacidad moral para gobernar”.

Requena citó en tal sentido el argumento que acusa a Castillo de cuestionar la designación de ministros supuestamente incapaces o ligados al terrorismo, pero avalados por el pleno parlamentario que les otorgó su confianza ratificatoria.

Por su parte la conservadora comentarista Rosa María Palacios dijo que mientras los partidos de extrema derecha Renovación Popular, Fuerza Popular y Avanza País insistan en el afán de capitalizar la vacancia, más lejos estará la posibilidad de lograrla.

Al referirse a la impopularidad del Parlamento (con 75 por ciento de desaprobación, según una reciente encuesta) recordó que el rechazo a la promoción del titular del Congreso, Manuel Merino, tras la vacancia de Martín Vizcarra, en noviembre de 2020 provocó grandes protestas que obligaron a renunciar al personaje.

Según el ministro de Justicia, Aníbal Torres, los golpistas de entonces buscan otra vez imponer un gobierno totalitario y utilizan la vacancia como juicio político, “para repetir el golpe de Estado del 2020 y sus conocidas consecuencias”.

FUENTE: Prensa Latina

Envio:RL



No hay comentarios: