Mi nombre es Juan Manuel, tengo 39 años y estudié una carrera técnica de telecomunicaciones. Como hobby me encanta la música, especialmente el charango porque su sonido es algo mágico. ¿Por qué decidiste incluir a Médicos Sin Fronteras en tu testamento? Lo del testamento en realidad se me dio porque tuve la posibilidad de comprar un departamento y fue en ese momento que me pregunté ¿qué pasa con esto después? Y quizás por cómo está el mundo sentí que era un deber hacerlo, era algo necesario. Ahí pensé que estaría bueno que esté en manos de alguien que ya esté haciendo algo por el mundo. Elegí Médicos Sin Fronteras ante otras organizaciones que también funcionan muy bien, por la confianza que me generó a través de las notas y las cosas que fui leyendo en la página web, y de un montón de información a lo largo del tiempo, que me generó confianza en el grupo humano que lo conforma y en cómo se comportan, la responsabilidad con lo que llevan cada misión que tienen y la transparencia con la que se manejan. ¿Cómo fue el proceso para hacer el testamento? Al principio pensé que iba a ser una cosa bastante engorrosa y al final fueron dos pavadas, todo muy rápido. Justo en el medio apareció una conferencia de ustedes que hablaban sobre los Testamentos Solidarios. Me anoté y la vi. Contaban las pautas de lo que había que hacer. Fue un trámite de una semana, no tardé nada, fue instantáneo la verdad. ¿Qué te conecta con MSF y qué significa para vos haber dejado este legado?
A MSF me conecta la misión humanitaria que tienen, el trabajo fuerte que hacen, que están presentes en todo el mundo, en donde es necesario. Están y están siempre y desde hace muchos años. Lo que más me llamó la atención de MSF quizás fue que están en lugares donde no llega la ayuda, que hacen cosas que no hace nadie. Creo que la ayuda humanitaria es algo esencial para que funcione la humanidad. Si nadie hace algo estamos yendo hacia un lugar que no considero el correcto o el más positivo. MSF hace estas cosas, y si yo me quejo pero no hago nada soy parte del problema, entonces la idea es hacer lo que esté al alcance de cada uno, nada más. | 
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