PLENARIO. MANTUVO MANDATO PARA VOTAR PROYECTO DE NULIDAD Y EVALUARA UN TERCER PLEBISCITO
Caducidad: FA encontró la fórmula de la unidad
Con 137 votos a favor, uno en contra y ocho abstenciones, el FA derrumbará el jueves la Ley de Caducidad. Se acordó la formación de una comisión que discutirá la conveniencia de convocar a un referéndum para que la ciudadanía tenga la última palabra.
Imágenes. En los alrededores del local donde sesionó el Plenario se colocaron imágenes de los detenidos desaparecidos.
La senadora Lucía Topolansky.
El senador suplente Oscar López Goldaracena.
Por mayoría el Plenario Nacional del Frente Amplio (FA) ratificó ayer la decisión de dejar sin efecto la ley de Caducidad. Por tercera vez, la izquierda se apresta a votar el proyecto interpretativo el próximo jueves, y al mismo tiempo deja la puerta abierta para llevar adelante una nueva consulta popular.
Una comisión especial que designará la Mesa Política mañana será la encargada de definir su integración y evaluar en un plazo de 30 días la viabilidad o no del plebiscito.
Por 137 votos afirmativos, 8 abstenciones y 1 voto negativo, el máximo órgano de dirección de la izquierda, aprobó una declaración en base a una formula de consenso, en la que además de la posibilidad de la consulta popular, se omitió reafirmar la vigencia del mandato a los legisladores a sancionar el proyecto el día 19.
La decisión de no reiterar el mandato, llevó a los delegados de base de Canelones a abstenerse en la votación, y otro delegado de los comités a votar en contra.
En la declaración de seis puntos se "celebra" la decisión del presidente José Mujica de decretar el desarchivo de las denuncias de violación a los Derechos Humanos aprobados por gobiernos anteriores. Se entiende además que la política de Derechos Humanos de la actual administración es una continuidad de la iniciada por el ex mandatario Tabaré Vázquez, y se reconoce la labor que cumplió durante todo el proceso de debate, el presidente del FA, Jorge Brovetto, para hallar una salida al tema Caducidad. Si bien la aprobación de la declaración contó con el aval de todos los grupos, el MPP y Asamblea Uruguay libraron una dura y extensa batalla durante las casi siete horas de debate, para tratar de revertir la decisión de votar el proyecto interpretativo. Empero, al ponerse a consideración del Plenario la propuesta promovida por Brovetto elaborada en base al constitucionalista Martín Risso, que preveía la derogación de la ley de Caducidad y el desarchivo de las denuncias declaras "cosa juzgada", sólo contó con 50 votos afirmativos (Asamblea, MPP, Alianza Progresista y Movimiento al Socialismo). El Partido Socialista, la Vertiente Artiguista, comunistas y los grupos minoritarios rechazaron la alternativa por 54 votos, mientras 26 delegados se abstuvieron. Los diputados Ivonne Passada y Aníbal Pereyra, fueron los referentes del MPP que expusieron sus dudas respecto al proyecto interpretativo. Según los asistentes, Passada realizó una fuerte intervención política en que recordó que el actual proyecto fue objetado por los constitucionalistas, al remarcar que la mayoría lo considera inconstitucional. Reparó además en que la izquierda debía evaluar cuáles serían las consecuencias si efectivamente la futura ley era recurrida ante la Suprema Corte, y la Justicia fallaba a favor de los recurrentes. La diputada defendió además los reparos que planteó el presidente Mujica a la iniciativa y los costos políticos que tendría en el futuro la coalición. Otra de las exposiciones que generaron polémica fueran las del diputado Jorge Orrico de Asamblea Uruguay y del dirigente del Movimiento al Socialismo, Julio Fiordelmondo. De acuerdo a las fuentes uno de los momentos más álgidos del Plenario se produjo cuando Orrico reprochó que mientras se hablaba de "unidad" se llevaban adelante "maniobras arteras" que "ensuciaban" el debate. Las palabras de Orrico surgieron ante una moción promovida por delegados de base, en la que insistían en reafirmar la votación del 19. Una vez retirada la moción, Orrico dijo en el Plenario que le volvía "el ama al cuerpo". El diputado de Asamblea fue uno de los legisladores que apoyó la propuesta inspirada en Risso. Entre tanto, Fiordelmondo auguró un futuro negativo para la coalición. "¿Qué le van a decir a los compañeros cuando empiecen a presentarse los recursos de incostitucionalidad? ¿Qué le van a decir cuando la ley sea impugnada", se preguntó el dirigente. En cambio, el senador comunista Eduardo Lorier defendió la decisión de la mayoría del FA, al remarcar que la ley de Caducidad sería erradicada del Derecho Positivo. En la misma línea se pronunció el diputado socialista, Gustavo Bernini.
Nueva consulta
Por su parte, la Vertiente oficializó su propuesta de realizar una nueva consulta popular. A través de una ley que debería reformar artículos de la Constitución, se promovería que, por mayoría legislativa, es decir 16 senadores y 50 diputados, la Corte Electoral habilitaría una consulta a ciudadanía. Con el 25% del padrón electoral que votara a favor, el organismo de contralor convocaría a un "referéndum ratificatorios". En ese segunda instancia, la población debería optar entre una papeleta por el SI al mantenimiento de la ley, o en su defecto por el NO. Si bien la comisión deberá evaluar la propuesta, parte de los sectores mayoritarios consideran que la consulta implicaría que el tema de Caducidad estuviera varios meses en la agenda política. En otro orden, en el Plenario se manejaba ayer que si el diputado del Espacio 609, Víctor Semproni mantiene su negativa a votar el proyecto y dar el voto número 50 requerido, varios diputados blancos habrían anunciado a dirigentes del FA, que se retirarán de sala el 19, para que el oficialismo logre sancionar la ley, y se abra un nuevo escenario político.
Proceso
Votación. Sin fracturas logró dirimir la izquierda la crisis planteada.
Domingo, 15 de mayo, 2011 - AÑO 12 - Nro.56662
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PLENARIO
Todas las voces del FA
Durante la sesión del Plenario del Frente Amplio de ayer, el Movimiento de Participación Popular (MPP) señaló que la propuesta de la Vertiente Artiguista de impulsar un referéndum ratificatorio "tiene debilidades".
La Vertiente Artiguista planteó ayer su propuesta de incorporar a la legislación el referendo consultivo contra leyes, con los votos de la mayoría del Parlamento.
El diputado del sector, José Bayardi, explicó que la propuesta es fallar sobre los contenidos de la futura ley para que la misma logre cierto grado de legitimidad.
"Debido a los cuestionamientos democráticos debe haber una solución política y apelar a más democracia", sentenció Bayardi.
En ese marco, el diputado Aníbal Pereyra (MPP) indicó que no está en discusión el objetivo final, que es "eliminar la Ley de Caducidad", pero en el proceso de análisis hay elementos que pesan.
"No queremos que el proceso de búsqueda de la verdad y la justicia se vuelva lento, y este camino que ha sido cuestionado puede traer problemas", dijo.
Pereyra remarcó que la propuesta de la Vertiente Artiguista tiene "algunas debilidades".
El diputado del Partido por la Victoria del Pueblo (PVP) Luis Puig dijo que los tres poderes del Estado uruguayo "tienen la obligación de cumplir con todos los dictámenes de la Corte Interamericana de Derechos Humanos para terminar con la impunidad", cuya resolución destaca la imprescriptibilidad de los delitos de lesa humanidad, entre los cuales se incluye la desaparición forzada.
La senadora socialista Mónica Xavier destacó la creación de la Comisión especial que estudiará las propuestas que surgieron en el Plenario, como la que planteó la Vertiente Artiguista y la de legislar sobre el artículo 239 de la Constitución, referido al papel de la Suprema Corte de Justicia en materia de derechos humanos.
El senador Rafael Michelini (Nuevo Espacio) subrayó como positiva la revocación de las resoluciones de los gobiernos blancos y colorados.
La diputada de Asamblea Uruguay Daniela Payssé se refirió a la opinión de diversos catedráticos que consideran que el proyecto de ley interpretativo es "inconstitucional".
En tanto, el senador comunista Eduardo Lorier remarcó que la decisión del plenario sintetiza "un buen clima y una discusión elevada". El parlamentario indicó que se "reafirmó el camino establecido en el anterior Plenario del Frente Amplio".
EN 1996 SE FRACTURO PERO IGUAL SIGUIO CRECIENDO
Una historia de debates, disidencias y consensos
Luis Casal Beck
En sus cuarenta años de existencia, el Frente Amplio (FA) conoció debates internos apasionados, disidencias, fracturas y consensos derivados de arduas negociaciones.
Ganó en primera vuelta las tres últimas elecciones nacionales (1999, 2004 y 2009) y desde marzo de 2005 ejerce el gobierno del país. Tuvo el apoyo de algo más de 1.100.000 votos. Coalición (de 28 sectores oficiales; y otros, poderosos, como la CAP-L, que aún esperan la aceptación formal) y movimiento (de frentistas que se expresan en los comités de base, con análoga representatividad a los grupos). Es esta arquitectura la que hoy es objeto de debate y se proyecta reconfigurar.
En su historia, el FA transitó por distintos momentos de aguda controversia, que llevaron a pensar en su fragmentación. Pero nunca dejó de crecer hasta 2004, cuando Tabaré Vázquez llegó a la presidencia.
En 1984, a la salida de la dictadura la mitad de los votos frentistas fue obtenida por la lista 99, de Hugo Batalla, y los demócratas cristianos, que debatieron después, con ardor y durante años, por un cambio ideológico en la izquierda.
En 1989 rompieron con el FA, y formaron el Nuevo Espacio. No les fue mal (9% del electorado), pero el FA mantuvo su votación (21.2% de 1984) y conquistó la Intendencia de Montevideo, en aquel año del referéndum de la Ley de Caducidad, en que el voto verde ganó en Montevideo, aunque perdió en todo el país (56.6% contra 43,4%).
En febrero de 1996, el general Líber Seregni renunció a la presidencia del FA, por sentirse desautorizado en las negociaciones por una reforma constitucional. Para muchos, aquello era el comienzo del final. Seregni siguió siendo frentista, y la fuerza que él lideró, continuó su camino ascendente. Lo sustituyó Vázquez.
La propia creación de un Encuentro Progresista exacerbó la discusión y todo quedó zanjado en el Congreso del FA de julio de 1994 por 1.403 votos a favor y 667 en contra. Lograr los consensos o las mayorías, fue siempre un desafío cotidiano. Algo que es normal en la política, que en una sociedad abierta, implica contraposición de ideas, negociación, búsqueda de salidas armoniosas.
Los blancos tuvieron durante 40 años dos directorios, hasta la reunificación de 1971. En la década de 1920, los colorados, llegaron a estar fragmentados en tres espacios ideológico-electorales (el Partido Colorado, el Partido Colorado Radical, el Partido General Rivera) hasta confluir en una única presentación. El FA de 2011 procesa sus debates, en momentos en que busca actualizar sus formas de organización democrática.
DEMOCRATICAS. EL PRESIDENTE QUIERE FUERZAS ARMADAS MAS INTEGRADAS
Mujica negó presión militar por la Ley de Caducidad
Valora que si bien el castrense es un "gremio poderoso", la oficialidad ha hablado lo necesario en asuntos políticos referidos a los derechos humanos.
Poder político y FFAA. "Estabilidad institucional y democracia con Fuerzas Armadas con espíritu de civilidad".
Para el presidente José Mujica es "una leyenda" la presión de algunos integrantes de las Fuerzas Armadas o retirados militares por el desenlace jurídico que podría tener la anulación de la Ley de Caducidad.
"Los militares tienen su opinión y están peleando por la de ellos como cualquier gremio" sostuvo el mandatario a LA REPÙBLICA, pero estima que "ese es otro cuco que también levantan (porque) "¿quién no presiona en este país?, a mí me paran en cuanta esquina hay para presionarme. Los militares son iguales" ilustró, aunque reconoció que "el gremio" militar es "poderoso".
Entiende que el sector militar en la sociedad uruguaya tiene un protagonismo muy fuerte pero que, pese a esa observación, los militares "han hablado lo normal" sobre temas políticos.
Sospecha que la oficialidad actual "siente presión" por la discusión de la Ley de Caducidad de parte de los militares retirados, pero "no veo nada del otro mundo" sobre ello. "Tuvimos la discusión de carácter presupuestal, después tuvimos los líos de la Armada y tuvimos este entredicho entre generales. (A estos temas) no le doy mayor importancia", aunque reconoce que "todo depende de lo que hablen".
"Creo estimó- que como sociedad subestimamos la importancia que tiene el factor militar.
Si queremos estabilidad institucional y democracia, tenemos que tener Fuerzas Armadas que tengan un espíritu de civilidad", destacó.
FuentedeOrigen:LaRepublicaFuente:Agndh
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