Restituyeron cargos a docentes cesanteados durante la dictadura
Son Romero y García Canclini. Además, premiaron a Víctor Hugo
06.09.2011
Treinta y seis años después de que fueran cesanteados en sus cargos durante la dictadura cívico militar que hundió al país en la etapa más negra, el filósofo Néstor García Canclini y el artista plástico Juan Carlos Romero vuelven a ser parte de la historia de la facultad de Bellas Artes de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP). Durante un emotivo acto en esa unidad académica, a ambos se les restituyeron ayer los cargos; ahora son profesores consultos. En la misma ceremonia, el periodista Víctor Hugo Morales fue galardonado con el premio Manuel López Blanco.
Ante un auditorio colmado de estudiantes y profesores, y que también contó con la presencia de figuras emblemáticas de la lucha por los derechos humanos, Romero agradeció escuetamente la distinción y recibió el aplauso cerrado de los presentes, entre quienes también se encontraba el presidente de la UNLP, Fernando Tauber. Romero estudió en esa facultad, fue profesor en grabado y en cine. Con el retorno de la democracia no pudo reintegrarse.
El momento de mayor emoción tuvo lugar después, cuando García Canclini leyó un texto en el que rememoró aquellos sucesos de los ‘70. “Recuerdo cuando en esa época se quemaban los libros. Yo, en vez de quemarlos, los escondí, pero cuando fui a buscarlos ya no estaban… mis padres los habían quemado por mi seguridad… eso me dio la medida de lo que estaba sucediendo”, manifestó Canclini, quien se quebró por la emoción y tuvo que hacer un alto en su discurso. El doctor en filosofía de la UNLP y la Universidad de París, autor de múltiples libros y ensayos que lo convirtieron en un reconocido intelectual en el mundo, destacó el lugar de avanzada que en el mundo ocupa Argentina en materia de derechos humanos.
VíCTOR HUGO. Sentado en la primera fila y escuchando atentamente a los galardonados, estaba Víctor Hugo Morales. El periodista subió al escenario para recibir el premio Manuel López Blanco y fue ovacionado por la multitud.
“Esta es la hora de la siesta y con esto me pusieron dentro de un sueño”, arrancó. Tras mencionar que el galardón “es un masaje al corazón” y agradecer la deferencia de las autoridades de la casa de estudios, Víctor Hugo desarrolló un discurso bien político en el que destacó que Argentina “puede esgrimir con argumentos formidables su lucha por la Justicia” y los derechos humanos, en tanto que dimensionó la importancia del arte en la vida de las personas. “Siendo artista se puede vivir mejor; al menos sepamos admirarlo”, sugirió. Y arrancó la risa a los presentes al manifestar que “sin el arte, la sobrevida sería temible… qué haríamos los mayores”, se preguntó. “Un artista –dijo aludiendo a los más de 10.000 estudiantes que cursan en Bellas Artes– es valiente, porque confronta contra el ridículo, aquello de lo que parece que no se vuelve”.
CRÍTICAS. Terminado el acto, Morales opinó sobre el tratamiento que hicieron los medios del caso Candela Rodríguez. “Que algunos hombres de la política se sumen a hablar de un caso de inseguridad y exploten esa veta es penoso”, aseguró el periodista. Consideró que "siempre se intenta hacer un uso político, pero ni siquiera el saber que son obvios los detiene”.
“Hasta para hacer daño uno tiene que ser inteligente, y no lo están siendo”, opinó Morales. Y evaluó que “la población se da cuenta, ya que a partir de la Ley de Medios nos quitamos la careta y mostramos desde el punto de vista periodístico quiénes somos”.
Fuente:Diagonales
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