El sistema de terror en Tucumán
El proceso abarcará 235 casos de desapariciones, torturas, secuestros y delitos sexuales perpetrados en los centros clandestinos Jefatura de Policía y Arsenal Azcuénaga. Entre los acusados están Menéndez y otros 43 represores.
Por Ailín Bullentini
Menéndez estará en la audiencia de hoy, tras ser examinado por el cuerpo médico forense de la Corte.Imagen: Télam
Con el represor Luciano Benjamín Menéndez y otros 43 imputados en el banquillo de los acusados, la Justicia de Tucumán verá reconstruir delante de sí a partir de hoy y “por primera vez el sistema de terror, represivo y desaparecedor que funcionó en la provincia con todos sus actores y partes”, según definió el fiscal Pablo Camuña, que participará del megajuicio por los delitos de lesa humanidad cometidos en la Jefatura de la Policía y en el Arsenal Miguel de Azcuénaga, dos de los principales centros clandestinos de detención que funcionaron en Tucumán durante la última dictadura. El juicio, que repasa 235 hechos, entre desapariciones, torturas, secuestros y delitos sexuales perpetrados entre 1976 y 1982, contará con cerca de 400 testigos.El Tribunal Oral Federal (TOF) de Tucumán, integrado por Gabriel Casas, Juan Carlos Reynaga y Carlos Jiménez Montilla, estableció que el juicio comience hoy a las 9. Menéndez fue autorizado a participar del debate por el cuerpo médico forense de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, cuyos peritos aconsejaron que las audiencias no sean extensas –las jornadas contarán con interrupciones cada dos horas–. Sin embargo, si bien Menéndez estará presente esta mañana, su permanencia no está asegurada en la totalidad de los encuentros, ya que el represor está siendo juzgado en La Rioja –el juicio terminará el 7 del mes próximo– y las audiencias de los debates se superponen.
Otro imputado cuya ausencia ponía en duda el inicio del juicio es el escribano Juan Carlos Benedicto, quien a fines de la semana pasada fue sometido a una operación de vesícula. Benedicto, un civil que estuvo prófugo durante mucho tiempo y fue detenido no hace tanto, finalmente fue dado de alta el sábado por la tarde y habilitado para asistir a la apertura del debate en el que la Justicia analizará su participación en violaciones a los derechos humanos. Del resto de la cuarentena de imputados, poco menos de una decena presenciará las jornadas desde el hospital del penal de Ezeiza, vía teleconferencia.
Los represores fueron acusados por la comisión de violaciones de domicilio, privaciones de libertad, torturas, delitos sexuales, homicidios y desapariciones. Estos delitos se habrían cometido entre 1976 y 1982, en perjuicio de 235 víctimas que habrían sido vistas o se supo que estuvieron en los centros clandestinos que funcionaron en la Jefatura de Policía y el Arsenal Miguel de Azcuénaga. Los delitos cometidos en uno u otro centro fueron investigados en instrucción por separado, y unificados en la etapa oral.
“Es la primera vez que está todo el sistema represivo de Tucumán en un solo proceso. Hasta el momento, se venían analizando en casos más pequeños, partes. Ahora, por primera vez se verá al sistema de terror, represivo y desaparecedor que funcionó en la provincia con todos sus actores”, definió Camuña, representante del Ministerio Público Fiscal, que compartirá la parte acusatoria con ocho querellas particulares.
La unificación de las causas fue pedida por una de las querellas, representada por la abogada Laura Figueroa, quien destacó que “algunos familiares de las víctimas tienen ya más de 80 años y es imperiosa la necesidad de agilizar los tiempos procesales”. Al aceptar el pedido, el Tribunal consideró que esa medida “permitirá compatibilizar de la mejor manera el posible interés de todos los imputados en una pronta definición de sus respectivas situaciones procesales, en dos causas que por sus características reúnen las condiciones de megacausas”.
Camuña sumó al análisis que, en definitiva, “estamos hablando del mismo sistema represivo. Hay una relación muy estrecha entre los centros clandestinos de detención”. A fines del año pasado, el Equipo Argentino de Antropología Forense encontró restos humanos enterrados en el Arsenal Miguel de Azcuénaga y se pudo identificar a trece personas que estaban desaparecidas.
Además de permitir comprobar que las víctimas habían sido torturadas, asesinadas y enterradas en una fosa común, el hallazgo también ayudó a atar cabos entre ambos centros. “Una de las personas identificadas figuraba en nuestros registros como víctima de Jefatura. No teníamos registro de que había sido trasladada a Arsenal. Eso nos confirma cómo era el sistema: en Jefatura se decidían las muertes, se trasladaban a las víctimas a Arsenal y allí se definía cómo se las hacía desaparecer”, comentó el fiscal. El Arsenal Miguel de Azcuénaga y la Jefatura de Policía fueron los dos centros clandestinos de detención más sangrientos que funcionaron en la provincia.
Fuente:Pagina12
Comienza el juicio más esperado por los familiares de desaparecidos en Tucumán
Este lunes, a las 9.00, comenzará el juicio por la megacausa "Arsenales II- Jefatura de Policía II", que buscará reconstruir el horror vivido por 235 víctimas en esos dos centros clandestinos de detención que funcionaron durante la última dictadura. Entre los acusados, figuran el escribano Benedicto y el cura Mijalchyk. Menéndez será apartado.
11/11/2012
Con el relato de aproximadamente 500 testigos y las múltiples pruebas documentales recopiladas durante años, el juicio por la megacausa "Arsenales II- Jefatura II", que arranca hoy, a las 9.00, buscará reconstruir el horror vivido en los dos centros clandestinos de detención más sangrientos que funcionaron en Tucumán durante la última dictadura militar.
En el debate, que se extenderá, por lo menos, hasta mediados de 2013, se tratará de conocer qué les sucedió a 235 víctimas de delitos de lesa humanidad que habrían sido vistas o se supo que estuvieron detenidas en esos dos lugares, constituidos en verdaderos íconos de la represión de Estado.
En el banquillo de los acusados, estarán sentados más de 40 imputados, en su mayoría militares retirados y ex agentes de la Policía de Tucumán. Además, este juicio tiene la particularidad de que por primera vez se juzgará a dos civiles, como es el caso del escribano Juan Carlos Benedicto, y el cura católico José Mijalchyk (el padre "Pepe"), por crímenes contra los derechos humanos cometidos entre 1976 y 1982.
Por la cantidad de víctimas, testigos y acusados, el comienzo de este juicio era largamente esperado por los familiares de desaparecidos y organismos de derechos humanos, que hoy movilizarán hasta la sede del Tribunal Oral Federal de Tucumán (TOF), en calle Chacabuco y Crisóstomo Alvarez.
Menéndez será apartado
Uno de los principales imputados en la megacausa, como es el caso del represor condenado Luciano Benjamín Menéndez, finalmente sería apartado del proceso, debido a que actualmente está siendo juzgado en La Rioja, en un debate que se extenderá hasta diciembre y que le impedirá participar de las audiencias en nuestra provincia.
En este sentido, el TOF, que integran los jueces Carlos Jiménez Montilla, Gabriel Casas y Juan Carlos Reynaga, tendrá que resolver hoy si separa a Menéndez o, en caso contrario, posterga el inicio del juicio hasta que finalice el de La Rioja. Todo indica que se elegirá la primera opción.
Según informó a EL SIGLO la abogada querellante Julia Vitar, "el TOF corrió traslado sobre la situación planteada a la Fiscalía y esta habría sugerido que Menéndez sea apartado, a los fines de no dilatar más el comienzo del juicio, que ya sufrió bastantes dilaciones. Si nos piden que como querellantes adoptemos una postura, vamos a coincidir con el planteo de la Fiscalía", adelantó la letrada.
Vitar consideró que "sería importante juzgar la responsabilidad de Menéndez, como ex jefe del Tercer Cuerpo del Ejército, en estos crímenes, pero más importante aún es que se avance con el juicio por los familiares de las víctimas, que vienen esperando justicia desde hace 36 años, y también por los propios imputados, que son más de cuarenta y muchos tienen más de 80 años de edad", aclaró.
La abogada recordó, además, que "Menéndez es una persona mayor y enferma, que ya tuvo otras cuatro condenas en Tucumán, por lo que no es prioridad para la parte acusadora.
Nuestra prioridad es que el juicio empiece este lunes y que no se postergue", recalcó. Quien ya fue apartado del proceso por el TOF es el ex policía Hugo Rolando Albornoz (hermano del "Tuerto" Albornoz), debido a su delicado estado de salud.
Otro caso particular es el del escribano Benedicto, quien el viernes fue sometido a una cirugía de vesícula en el hospital Centro de Salud y su presencia en el inicio del debate inicialmente estaba en duda.
A propósito, Vitar indicó que "se le hizo un intervención quirúrgica de laparoscopia, que salió exitosamente, recibió el alta el sábado al mediodía y fue trasladado de vuelta al penal de Villa Urquiza, por lo que está en condiciones de participar en el comienzo del debate".
Los procesados en la megacausa están acusados por delitos de violaciones de domicilio, secuestros, privaciones ilegítimas de la libertad, torturas y homicidios, entre otros. En el juicio, que contará con el relato de más de 500 testigos, intervendrán los representantes del Ministerio Público Fiscal y del Ministerio Público de la Defensa; tres defensores particulares y ocho querellantes particulares.
A fines del año pasado, el Equipo Argentino de Antropología Forense encontró restos humanos enterrados en el ex Arsenal Miguel de Azcuénaga y desde entonces pudo identificar a 13 personas que estaban desaparecidas. Este hallazgo permitió comprobar que las víctimas habían sido torturadas, asesinadas y enterradas en una fosa común; además de confirmar que en nuestra provincia funcionaron verdaderos "campos de exterminio", como calificó al ex Arsenal el presidente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, Ricardo Lorenzetti.
Se estima que el megajuicio que arranca este lunes se extenderá durante aproximadamente 6 meses. Según el cronograma original, el debate oral tendrá audiencias durante toda esta semana; mientras que a partir de la próxima se desarrollarán todos los jueves y viernes hábiles siguientes, a excepción de la última semana de diciembre. De acuerdo a lo dispuesto por el TOF, las audiencias seguirán los jueves y viernes hábiles durante febrero, marzo y abril de 2013, aunque se da por descontado que se extenderán después de esa fecha.
"Una oportunidad histórica"
Para la abogada Vitar, "este juicio permitirá cerrar un capítulo pendiente en el camino de convertirnos en una sociedad más democrática y respetuosa de los derechos humanos, y es una oportunidad histórica para juzgar hechos que dejaron heridas que todavía están abiertas en nuestro país".
La letrada dijo que tiene la expectativa de que "sea un debate con garantías para las dos partes, no sólo para la acusadora, sino también para quienes están en el banquillo, lo que permitirá demostrar la rectitud de quienes vienen reclamando justicia desde hace 36 años, no por venganza, sino por la necesidad de saber la verdad".
"Un nuevo avance en la Justicia"
Por su parte, Carolina Frangoulis, de HIJOS-Tucumán, dijo que para esa agrupación de los derechos humanos el juicio "es un nuevo avance en la Justicia, para que tras una espera de 36 años los familiares puedan conocer la verdad de lo que les sucedió a las 236 víctimas, a partir del relato de unos 600 testigos.
En HIJOS tenemos una frase que dice: 'lo imposible sólo tarda un poco más', y creo que este es el caso", acotó. Según la militante, "este es un proceso histórico muy importante para los tucumanos, porque serán juzgados personajes que no son Bussi, Menéndez, Videla o Massera, que son conocidos por todos, al igual que sus crímenes, sino algunos que viven como vecinos nuestros y que pudieron estar sentados al lado nuestro en el colectivo".
A propósito, recordó que "esta será la primera vez que se juzgará a los responsables civiles, como Benedicto, o como el cura Mijalchyk, quienes fueron partícipes directos de este circuito represivo nefasto que se puso en práctica durante el golpe cívico-militar". Finalmente, Frangoulis confirmó que HIJOS, junto a otras agrupaciones de los derechos humanos se concentrarán a las 9.00 en las puertas del TOF "para acompañar a las familias y los testigos que quieran estar presentes.
Las familias de las víctimas tienen prioridad absoluta para estar dentro del Tribunal, y nosotros tenemos el deber moral de estar junto a ellas. También vamos a acompañar a los querellantes y la Fiscalía, que realizaron un gran trabajo y todo esto no hubiera sido posible sin ese esfuerzo", completó.
Fuente:ElSiglo
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