CÓRDOBA- MEGACAUSA LA PERLA: LA COBARDÍA DE UN JUEZ FEDERAL y EL MARTIRIO DE LOS TESTIGOS DE JEHOVÁ-TESTIMONIOS DÍAS 166 y 167.

13.08.2014
Cuatro testigos describieron entresijos del esquema represivo
La Perla: La cobardía de un juez federal y el martirio de los Testigos de Jehová

Humor Negro II. Tapa de un libro. Los ultramontanos la tomaron "al pie de la ilustración"
Córdoba.- El reiterado secuestro de un ex militante de la Juventud Universitaria Peronista amigo del desaparecido Néstor Morandini (hermano de la ex periodista y actual senadora Norma Morandini), la cobardía de un juez federal y el martirio de Testigos de Jehova fueron los momentos más relevantes de los cuatro testimonios prestados hoy en el juicio por imprescriptibles crímenes de lesa humanidad cometidos en los centros clandestinos conocidos como La Perla, Campo de la Ribera y D-2, cuyo principal imputado es el ex teniente general Luciano Benjamín Menéndez. El primero en declarar fue Juan Manuel Torres Berrotarán, sobreviviente de su paso por La Ribera, quien fue secuestrado tres veces.

El primer secuestro de Torres Berrotarán se produjo el 16 de setiembre de 1975 tras ser detenido cuando conducía su automóvil en la localidad de Anisacate, a unos 42 kilómetros al sudoeste de la ciudad de Córdoba. "Me llevaron a lo que se conocía como El Cabildo", dijo en referencia al céntrico centro clandestino de detención que funcionaba en el Departamento de Informaciones (D2) de la policía provincial.

"Allí me sacaron mis pertenencias y me vendaron los ojos. Comenzaron a interrogarme y recibía golpes de puño", dijo Torres Berrotarán. Y agregó que estuvo en la D2 unos días y luego fue liberado.
Al año siguiente, el 19 de febrero de 1976 volvieron a secuestrarlo en el domicilio que compartía con sus hermanos. "Me encañonaron con un arma larga, me esposaron y me pusieron contra la pared mientras requisaban la casa".

Luego lo llevaron otra vez a la D2, donde fue interrogado y torturado nuevamente. "Creo que dejaron de torturarme por intervención de un comisario de Alta Gracia que habló con mi padre y me fue a buscar a Córdoba. Así fue como salí".

Dos días de su liberación, una versión de prensa asoció su nombre con "actividades subversivas", añadió.
Torres Berrotarán fue secuestrado nuevamente 11 de noviembre de 1976, cuando un comando que vestía ropa civil sin identificarse irrumpió nuevamente en su domicilio de Anisacate.

Desde allí fue llevado a La Perla para ser torturado e interrogado sobre sus compañeros de la Juventud Universitaria Peronista (JUP),  en especial por Néstor Morandini, y luego lo llevaron al centro de detención de La Ribera.

Fue liberado en cercanías de la sede del Tercer Cuerpo de Ejército, cuyo jefe era el general represor Luciano Benjamín Menéndez.

Otro testigo, Lindolfo Oviedo Villa, declaró sobre la captura de su esposa, Manuela Cabeza de Oviedo, secuestrada en Santa María de Punilla, "desaparecida como 9 o 10 días" y finalmente alojada en la cárcel de mujeres del Buen Pastor.

En búsqueda de Manuela, "tuve una entrevista con (el juez federal de la dictadura Adolfo) Zamboni Ledesma y lo invité a que salieramos juntos a buscar a los desaparecidos. Me dijo: 'Yo no me muevo de aquí' y le dije que era un cagón".

El testigo José Alfredo Santa contó que el 31 de enero de 1977 su cuñada le avisó que un grupo que vestía ropas civiles armados había detenido a su hermano en oficinas del Banco de Córdoba, donde trabajaba.

Ensañamiento
"Mi suegro nos propuso irnos del país pero le dije que no teníamos nada que ocultar ni por qué huir", contó Santa y señaló que esa conversación se produjo un día antes de que lo secuestraran a él.

El testigo dijo que durante 10 dias fue torturado en la D2 y luego llevado a La Ribera, donde los represores se habían "ensañado con unos testigos de Jehová" y le tocó convivir con un hombre mayor, liberado tiempo después.

Finalmente, el testigo Jorge Ahumada declaró sobre el secuestro de su patrón, Jacobo Lerner, capturado el 3 de abril de 1976, llevado a La Perla y quien aún permanece desaparecido.

El Tribunal Oral Federal número 1 (TOF1) de Córdoba dispuso que la siguiente audiencia se realice el 26 de este mes a partir de las 10.
Fuente:Telam





Día 166: 12/08
14:30 Cuarto intermedio hasta mañana a las 10:00

14;20 Todos estábamos organizados

14;05 Seminaristas
Una abogada querellante consulta al testigo a qué otros desaparecidos conoció en su actividad como semnarista:
"Conocí a Tito Yornet, a Cristina Galíndez de Rossi, a Marta Gonzalez de Baronetto, y por supuesto a mi gran maestro Angelelli", menciona visiblemente emocionado.


14:03 Compañeros en la opción por los pobres.

13:46 Testigo 352: Declara Jose Expedito Herrera

13:25 El bote
Se solicitó al testigo que aporte las pruebas necesarias para identificar la matrícula y datos del bote, y de ese modo investigar cuál fue el destino.


 13:22 Familia reunida.
El testigo afirma que la peor tortura fue el sufrimiento de sus padres: "Ellos nunca me contaron lo que vivieron ahí dentro. Lo supe hace un mes. Lo que más me duele de haber estado ahí es haber escuchado los quejidos de mi madre. Eso es lo que más recuerdo".

13:16 Testigo 351: Oscar Hidalgo
"Las preguntas eran sobre si mi padre había recibido algún dinero. Seguro que no había recibido nada, llevábamos una vida normal, de laburadores". Cinco días después de quedarse sólo en La Perla lo vinieron a buscar: "Te vas, le dijeron".

13:11 Terminó el testimonio de Alicia Prat de Hidalgo.

13:00 "Yo me enteré en la cárcel lo que era la política".
"La vida es asi, hijo", le dijo la testigo al fiscal, antes de culminar el interrogatorio.

12:52 La Ribera
"Era un corralón, no había baño, sino letrinas. Estabamos todos vendados, pero podíamos mantener pequeños diálogos con las compañeras porque estábamos más juntos. Las conocía por las voces".
Allí estuvo con dos secuestradas, madre e hija, a quienes identifica como María y Adriana: "eran muy buenas personas, me ayudaron a levantarme. Y uno en esas situaciones, agradece mucho toda ayuda".


12:41 La Perla
Para comunicarse con su hijo y su esposo, Alicia los llamaba desde su colchoneta:
"Yo decía: pá! y él me contestaba: callate!; después llamaba Oscar! y mi hijo me respondía: má!".

12:35 Silvia


12:31 Testigo 350: Alicia Angélica Prat de Hidalgo
Fue secuestrada junto a su hijo y su marido el 11 de septiembre de 1977 en barrio San Vicente. "Entraron como cuatro o cinco vestidos de civil. Nos tiraron una frazada encima a mí y mi esposo. Escuché ruidos, cómo abrían los roperos. Lo que me faltó fue impresionante: me robaron las alhajas que había dejado mi suegra, monedas españolas de oro, nuestros anillos de compromiso, la ropa. Me dejaron la casa desnuda, me vaciaron la heladera".

12:10 Dos colegios visitaron el juicio esta mañana


12:00 Terminó el testimonio de Victor Acha
 

11:46 Seminaristas de La Salette

11:25 Complicidad
Primatesta incluso le sugirió que se fuera de la parroquia, con una carta de recomendación del Obispo Monseñor Laguna. "Una vez una patota amenazó durante largas horas de la madrugada a la secretaria de la Parroquia. Querían saber dónde estaba yo y le amenazaron con matarle a sus hijos". Acha tuvo que irse a Colombia y no pudo despedirse de la comunidad, y este recuerdo también le produce mucho dolor.

11:24 Lacabanne
"Querían mover el altar porque decían que debajo estaba el acceso al sótano y que había armas. Rompieron la puerta del templo buscando lo mismo, y yo siempre respondí que no había armas ni nada de lo que buscaban".
Victor Acha fue maltratado, golpeado, amenazado con armas largas. El recuerdo de la violencia lo lleva a un silencio de dolor, en el que deja deslizar algunas lágrimas para luego recomponerse con fuerza y avanzar en su testimonio.

11:16: Explicaciones del Arzobispado
En el arzobispado le dijeron que Mecca estaba detenido por vinculaciones con un "guerrillero" que había sido abatido en Buenos Aires. Se trataba de Jorge Rossi, quien era militante en la UES. Había vivido en Villa Libertador y por entonces había sido muy cercano a las actividades de la parroquia. Jorge Rossi es el padre de Alejandro Rossi, compañero de H.I.J.O.S. quien declaró en esta causa.


11:08 Testigo 249: Declara Victor Acha
"Coincidíamos en el estilo de trabajo con optros sacerdotes de otras parroquias de la ciudad de Córdoba", cuenta el testigo, quien era el sacerdote de la capilla situada en Villa de Libertador.


11:05 Comienza la audiencia

9:36 Esperamos el inicio de una nueva audiencia. 
Victor Acha es miembro del grupo "Sin Tapujos", desde donde junto al Padre Mariani entre otros realizan críticas y manifiestan sus disidencias con la postura de la Cúpula Eclesiastica (como manifestarse a favor del matrimonio igualitario entre otros).



Día 167: 13/08
15:00 Cuarto intermedio hasta el martes 26 de agosto  a las 10:00

15:29  Agronomía
"Apareció como muerto en enfrentamiento pero todos saben que lo sacaron de su casa con su mujer y lo fusilaron. Su apellido era Ruiz.... pero hubo muchos estudiantes de agronomia q desaparecieron en esa época".

15:20 El miedo se ha instalado en mi cuerpo y hasta el día de hoy no me lo he podido sacar.
Sin embargo después de que volvió a su casa no dejaron de perseguirlo: tocaron el timbre y él reconoció a dos policías de civil. Nuevamente lo llevaron y lo tuvieron unos días en una celda de la D2 de calle Mariano Moreno.
"Es muy dificil pasar por esta situación. Todos los que hemos pasado por esta situación hemos sufrido mucho. Yo tuve suerte de no conocer a nadie que realmente hubiera tenido participación porque no estoy seguro de haber podido resistir, de no decir sus nombres".

15:07 Ahí habían matado a mucha gente 
"Tenés suerte de haber caído aca en esta época", le dijo, y le dio a entender que allí habían matado a mucha gente.
Santa no puede contener las lágrimas por sentir cómo la muerte le pasó tan de cerca.
Después de Campo de la Ribera los llevaron a la cárcel de UP1. "Con ayuda de los presos comunes y sus familias nos mandabamos mensajes en papel higienico con nuestras familias. Allí dentro me enteré de que había nacido mi hija".

15:00 Campo de la Ribera
También recuerda cuando una noche vinieron a buscar a su hermano: "Estábamos jugando a las cartas y escuchamos ruidos de botas. Vinieron y llamaron a mi hermano. Ninguno de los secuestrados sabíamos lo que sucedía, y unos minutos mas tarde trajeron a mi hermano y me llevaron a mí. De pronto sentí una mano en el pecho que me empujó hasta la pared y me dijo 'Te creías que no me ibas a ver más hijo de puta?' Era el mismo que me había torturado en la policía, el que se llamaba Gomez. Me amenazó con que me iba a matar usando un caño de escape. Otras voces se reían".

14:52 El torturador cantor
Detrás del testigo, en el banquillo de los acusados, el Gato Gomez escucha inmutable las acusaciones en su contra.

Al poco tiempo lo trasladaron junto a su hermano a Campo de la Ribera.

14:43  Dolor
"¿Dónde está tu mujer?" Le preguntaron mostrándole una libreta de estudiante de su compañera. Jose Alfredo dijo que esaba internada porque tenía un embarazo riesgoso. No pudo evitar lo más terrible: "A ella también la vamos a ir a buscar"
Durante 10 días fue torturado en el D2. El recuerdo es duro porque la violencia se reaviva en el relato de aquella violencia ilimitada que era costumbre en ese lugar.

14:40 Infierno
"El 31 de enero de 1977 la mujer de mi hermano vino a anunciarnos que un grupo de civiles armados lo habían detenido en las oficinas del Banco de Córdoba, donde él trabajaba". Así comenzó un infierno para la familia. "Mi suegro me propuso irnos del país, pero dije que no teníamos nada que ocultar ni por qué huir". A Jose Alfredo se lo llevaron al día siguiente: "El 1 de febrero fui a trabajar, me despedí de mi mujer y estaba listo para lo que pudiera suceder".

14:29 Testigo 356: Declara Jose Alfredo Santa


14:02 Nido de Víboras
"Al llegar, me di cuenta de que era el nido de vívoras, estaban todos". Quien lo atendió fue Gonzalez Navarro, hoy imputado. Allí también se encontraba un oficial de alto rango.
"Me clavó la mirada y no se la bajé. Estábamos como dos gallos de riña mirandonos. Me llamó la atención un bastoncito dorado que tenía en la mano. Yo supuse que era un jefe. Cuando de pronto un conscripto le dijo: Mi General, el auto está afuera. Entonces no lo dudé. Le dije que era el Doctor Oviedo y que venía a exigir el derecho a defensa y todo lo que se me vino en boca exigir. Lo exigí con energía, sin faltar el respeto. Me miraba, y me dijo: Hay cientos en esa situación. Y le respondí que se estaba cometiendo una injusticia, que a mi mujer no podían acusarla de nada para tenerla detenida." Se trataba del General Sasiaiñ.
Esa noche llamaron del Buen Pastor, su mujer quedaba en libertad.

13:54 Justicia cómplice
"Tuve una entrevista con Zamboni Ledesma, lo invité a que salieramos juntos a buscar a los desaparecidos. Me dijo 'Yo no me muevo de aquí', así que le dije que era un cagón: yo ya estaba jugado y no le cabía otro calificativo", cuenta Oviedo Villa.

13:47 Testigo 355: Declara Julio Lindolfo Oviedo Villa

12:58 El camión

12:52 Esfuerzo de memoria
El testigo es una persona humilde, sencilla, de pocas palabras. Está tranquilo y habla con calma, explicando lo que le tocó vivir durante los días de su secuestro: "Recuerdo que sentí la sangre en la campera, por los golpes q recibí. Es una estupidez, pero es lo que recuerdo..." "No, no es una estupidez", le responde la fiscal. posteriormente la Dra. Miguel Carmona solicitó se certificaran las taquigráficas para iniciar una causa donde él mismo figure como víctima, ya que hasta el momento no lo es.

12:49 Testigo 354: Declara Jorge Ahumada
"Fui llevado al Comando del III Cuerpo, y me sacaron todos los objetos de valor. En un pasillo me dejaron un rato y después me llevaron a una habitación. Eran dos personas, uno me preguntaba y el otro no hablaba: me pegaba"

12:22 Preso Político
"Cuando me dejaron salir, no tenía nada más que el cinto que me devolvieron. Pedí dinero en un quiosco que una señora gentilmente me dio. Así tome el colectivo y volví a mi casa".


11:44 La Perla y La Ribera
 Nestor Morandini fue secuestrado el a8 de septiembre de 1977, en Capital Federal. Era estudiante de Ciencias de la Información y Agronomía, y militante de la JUP. "No puedo decir más que era una gran persona, un gran compañero, que luchaba por un mundo más justo".

11:27 Criminales
Eso iba a influir en su siguiente secuestro, una vez pasado el golpe, el día 11 de noviembre de 1976 cuando un comando civil sin identificarse irrumpió nuevamente en su domicilio de Anizacate.
En esa ocasión la violencia se hizo presente: "Nunca lo hablé con mi familia, lo que le cuento lo reconstruí por el relato familiar. Encañonaban a mi hermano menor, de 8 años, a mi madre le dio un ataque de nervios, y se robaron lo que teníamos". Por tercera vez, a Juan Manuel se lo llevaron.

11:20 Segundo Secuestro
"Creo que dejaron de torturarme por intervención de un comisario de Alta Gracia que habló con mi padre y me fue a buscar a Córdoba. Así fue como salí".

11:11 Testigo 353: Declara Juan Manuel Torres Berrotarán
El testigo cuenta que fue secuestrado el 16 de septiembre de 1975 mientras conducía su auto camino a anizacate: "Ahí me llevan a lo que se conocía como cabildo. Me sacaron mis pertenencias y me vendaron los ojos. Comenzaron a interrogarme y recibía golpes de puño". Al testigo lo mantuvieron unos días y luego fue liberado. Esa fue la primera detención que sufrió y que marcaría su destino.



11:00 Comenzó la audiencia
Los testimonios que se esperan pertenecen a víctimas querellantes de la Causa Maffei: Juan Manuel Torres Berrotarán, Jorge Ahumada, Julio Oviedo Villa, José Alfredo Santa.

"Es muy fácil hablar desde el hoy. Pero por entonces, vivíamos en dictadura. Desde 1930 se quería construir un país para pocos. A nosotros nos despierta Juan XXIII y nos dice que la iglesia no es para adentro, que hay que salír a hacer lío. Entonces cómo nos ibamos a quedar en la parroquia? Nosotros no estabamos por la opción armada porque habíamos tomado otra opción, pero todos estábamos organizados", afirma José Expedito Herrera.

Herrera es empleado público, por entonces era delegado municipal y también seminarista.

El 5 de diciembre de 1976 secuestraron a Hector Oberlin y Angel Baudracco, quienes eran compañeros y "hermanos cristianos": "convergíamos en la labor de evangelizar en una comunidad social que teníamos; y tomamos juntos la opción política por el peronismo". Mas tarde secuestraron a Ravassi, que era otro compañero de militancia e ideas.

El fiscal le pregunta por una de las víctimas de la causa, el testigo viene a declarar por la desaparición de muchos de sus compañeros:  "Yo era un joven militante y Navor Gomez era un dirigente gremial bancario, muy formado. Así lo conocía. Un día fui a informarle de una reunión que tendríamos. Encontré los vidrios rotos y los vecinos me dijeron que se lo habían llevado. Nunca más volvió a aparecer". Era el mes de Marzo de 1976. Ademas de bancario y gremialista, Navor Gomez estaba afiliado al Partido Revolucionario Cristiano

Oscar cuenta que el secuestro se dió mientras su padre tenía un bote en venta. La noche del 12 de septiembre alguien tocó la puerta con la excusa de comprarlo: "Cuando irrumpieron aputándome con un arma, pensé que era un robo. Bueno, después nos robaron todo, incluído el bote".

"Cuando me dejaron comenzó mi problema más grande: saber dónde estaban mis padres", dice Oscar Hidalgo, quien recién supo que sus padres permanecían detenidos cuando los "blanquearon" como presos políticos y los llevaron a UP1. "Me entere por el diario, les llevaba mercadería y cuando estuvieron en Buenos Aires les llevaba cartas".

Oscar tenía 21 años cuando fue secuestrado junto a sus padres el 12 de septiembre de 1977: "Me dejan depositado en una colchoneta, con los ojos vendados, acostado en el piso. Al otro día me levantan y me dicen: te va a revisar el médico, y ahí comenzaron las torturas: golpes, y sumersión en un tacho de agua". Así recuerda Oscar los 25 días que estuvo en La Perla, junto a sus padres hasta que dejó de escucharlos.

La audiencia aplaudió su testimonio y ella agradeció: "la paciencia a esta viejita". En sus más de 80 años Alicia irradia vida y fuerza: "A diferencia de mi marido, yo quedé más fuerte después de todo esto"

Así contó la segunda testigo del día, quien estuvo secuestrada junto a toda su familia en La Perla durante un mes, y luego permaneció en Campo de la Ribera, Penitenciaría 1 y Devoto de donde fue liberada dos años después.-

Al poco tiempo Alicia y su marido fueron llevados en el mismo camión a Campo de la Ribera. El hijo de ambos quedó en La Perla durante varios días más hasta su liberación.

La testigo cuenta los detalles de su secuestro, las torturas a las que fue sometida: "no me quedaban fuerzas para resistirme, entonces yo, como dice el paisano, me entregué. Ahí sentí una voz poderosa que dijo ¡Basta! y entonces me pusieron ropa seca".

El fiscal le pregunta si alguna vez le dijeron por qué la tenían secuestrada, ella responde que fue por decir que era amiga de Silvia Urdapilleta. Silvia era una joven estudiante de medicina que vivía en el departamento del lado. Una vez la había ayudado en una crisis de ahogo que tuvo su hijo: desde ese día nos hicimos amigas, ella venía a veces a almorzar con nosotros. Después se enteró que Silvia había sido perseguida y asesinada por su militancia.

Fue presa política durante la dictadura: "Yo le puedo contar desde el primer momento hasta que salí. De eso uno no se olvida jamás", dijo la testigo al fiscal Facundo Trotta al comenzar su testimonio.

Cuarto intermedio de 5 minutos.
El testigo contó que en su "exilio forzado" a Colombia, compartió un curso en Medellín con los seminaristas de la orden de La Salette. Después se enteró de su secuestro al regresar a Argentina, investigado en el expediente Morard.

"El arzobispo nunca dejó de enterarse de estos sucesos. Yo le escribía y le pedía que huiera una manifestación pública", dice el testigo. "Esto lo manejo yo, te prohíbo que hagas público esto", así eran sus respuestas. Se trata de Monseñor Primatesta, tantas veces nombrado en estas audiencias y quien nunca llegó a ser imputado por su temprano fallecimiento.

La iglesia de Villa Libertador fue allanada numerosas veces, a partir de la detención de Gervasio Mecca. El 1 de noviembre de 1974 el propio interventor Lacabanne supervisó un operativo con helicóptero:
Victor Acha contó también que vivía junto a un seminarista de apellido Mecca que seguía sus estudios en el seminario: "Una noche salió, y a poco rato de irse vuelve y golpea la puerta diciendo 'abrime por favor'. Al hacerlo entró una patota que irrumpió con violencia y se dispusieron a revisar todo lo poco que teníamos en la casita. No dieron ninguna explicación y anunciaron que se lo llevaban detenido". A Víctor le dijeron que las explicaciones se las pidieran al Arzobispo.

Es interrogado por la abogada querellante Dra. Challub, quien lleva la causa de los seminaristas de la Orden de la Salette.

El fiscal facundo Trotta arranca anunciando los avances sobre una investigación derivada de la última audiencia: "la fiscalía estuvo haciendo averiguaciones respecto de las cuestiones planteadas por el testigo Lopez Carrizo, sobre el asesinato de Roberto Lopez asesinado en Ensenada, sobre quien el testigo habría tenido dudas de que se tratara de su hermano Hector Roberto Lopez Carrizo -víctima de esta causa-".

Según Trotta no se trataría de la misma persona, ya que esta persona fue secuestrada en Bahía Blanca, si bien fue en una fecha cercana se trata de otra persona.

Los 5 testigos de hoy referirán a hechos acontecidos en el Centro Clandestino Campo de la Ribera durante la última dictadura militar. Uno de ellos es un testigo nuevo, derivado de testimonios anteriores es Jose Expedito Herrera; también declararán Reinaldo Oscar Hidalgo y su madre Alicia Angélica Prat de Hidalgo, sobrevivientes de dicho Centro Clandestino; y Victor Acha y Gustavo Morello quienes declararán en el marco del Expte. Morard sobre los seminaristas de la orden de La Salette secuestrados y torturados en La Ribera.
                         
La semana que viene no habrá audiencias.

La querella del Serpaj pregunta sobre otros estudiantes de agronomía que hayan sido desaparecidos:
Así lo expresó el último testigo de la jornada, que estuvo secuestrado en La D2 y en Campo de la Ribera, luego lo blanquearon y lo pasaron a UP1 para darle la libertad vigilada hasta su sobreseimiento a principios de 1979.

Santa tenía un viejo amigo de la localidad de Agua Hedionda, un jóven  con quien se reencontró en Campo de la Ribera, ya que estaba cumpliendo funciones de gendarme.

Santa cuenta que en Campo de la Ribera se habían ensañado con los testigos de Jehová: los detenían y los llevaban allá: "Me tocó estar con un pobre viejo que le toco ver todo eso, y estaba horrorizado. Yo tenía miedo que se muriera ahi mismo del susto que tenía. Después lo liberaron."

De la D2, Santa recuerda con especial detalle a uno de sus torturadores. "Era una persona que tenía na voz especial, como de tanguero. Y cuando cantaba ciertos tangos decían que iba a torturar".

Una patota fue a buscarlo al trabajo, lo llevaron junto a un compañero que se ofreció a acompañarlo.
Santa cuenta que se casó en julio de 1976, vivieron primero en lo de su suegro y luego se mudaron a una casita para ellos. Su esposa esperaba un hijo:

Oriundo de la ciudad de Deán Funes, el testigo vino a estudiar Agronomía en la Universidad Nacional de Córdoba en 1969. "No había democracia y había bastante resistencia a esa falta de democracia. Yo, como ciudadano del interior me desayunaba acá de esas cuestiones de la gran ciudad. Viví el Cordobazo como estudiante. En la universidad los estudiantes también se organizaban para intentar expresar nuestros aportes". Santa fue presidente del Centro de Estudiantes desde finales de 1974, y se recibió en diciembre de 1975.

Al descubrir que su esposa Manuela Cabeza de Oviedo estaba como detenida política en el Buen Pastor, fue a buscarla. Allí no los dejaron verse, pero una monja le dio un dato: una dirección donde podría averiguar un poco más.

El testigo movió cielo y tierra para dar con el paradero de su mujer. Así llegó al despacho del Juez Federal Zamboni Ledesma, quien había sido su compañero de estudios.

Testigo citado por la fiscalía, viene a declarar por el hecho del que resultó víctima su esposa, Manuela Cabeza de Oviedo trabajadora del hospital psiquiátrico de Santa María de Punilla: "Un día me hablaron del hospital para decirme que había un operativo y que ella se iba a demorar. Finalmente no regresó y cuando la fui a buscar nadie allí me daba respuesta de nada. Era una cosa para ellos desconocida. Estuvo desaparecida como 9 o 10 días".

Ahumada recuerda un camión al que lo subieron con otros secuestrados. "Todos tenían una capucha. A mí me hicieron bajar y caminé desde el Tropezón hasta Córdoba"-. Así quedó libre.

"No recuerdo fechas, fue hace casi cuarenta años"... La fiscal intenta preguntar al testigo algunos hitos de referencia para situar los hechos: todo ocurrió después del Golpe Militar. A Ahumada lo interrogaban sobre su patron, que había sido secuestrado unos días antes junto a otros dos empleados: "Ninguno de los tres volvió a aparecer jamás".

El testigo no recuerda mucho lo que le sucedió, es sobreviviente de la última dictadura militar aunque no figura como víctima en la causa. Viene a declarar por la desaparición de Jacobo Lerner, su patron, quien fue secuestrado junto a Oria y Boichenko. El mismo fue secuestrado por personas de civil que se lo llevaron de la Tienda "Super" donde él trabajaba, en la ciudad de Cosquín.

Como muchos otros testigos, Juan Manuel Torres cuenta que su padre lo buscaba desesperadamente desde el momento del secuestro. Así, en una oportunidad se entrevistó con Primatesta, quien le dijo que no podía hacer nada por él. La búsqueda siguió hasta que finalmente, Juan Manuel fue blanqueado y lo llevaron a la Unidad Penitenciaria 1.

El testigo cuenta que se ensañaron con él preguntandole por sus compañeros, particularmente por Nestor Morandini, quien era su compañero en la Juventud Universitaria Peronista. Golpes, picanas, gatillazos, durante un tiempo que el testigo no pudo calcular, hasta que se lo llevaron de ese lugar a otro centro clandestino. En ese nuevo lugar se enteró por otros secuestrados dónde había estado: "Vos venís de La Perla, ahora estás en Campo de La Ribera".

A los dos días de su liberación, una noticia difundió su nombre asociándolo con "actividades subversivas".
El 19 de febrero de 1976 una patota fue a buscarlo a su domicilio donde se encontraba con sus hermanos:

"Me encañonaron con un arma larga, me esposaron y me pusieron contra la pared mientras requisaban la casa". De allí lo llevaron nuevamente a la D2, le tomaron dos fotos: "Y lo siguiente que recuerdo es que esstuve sentado en un banco de mampostería dos o tres horas". Luego lo interrogaron brutalmente.

El testigo viene a declarar en su calidad de querellante sobreviviente de Campo de la Ribera, en el marco del Exp. Maffei.

La audiencia comienza con la palabra del Defensor Viola, quien ofreció ante el Tribunal el pasaporte del imputado Choux como prueba pertinente para acreditar que el mismo no se encontraba en el país a la fecha en que fue nombrado por algunos sobrevivientes.
Fuente:DiariodelJuicio