Siete días en la ciudad
La parte de la agenda que no se ve
A los que esperaban y quizás hasta se entusiasmaron con alguna réplica provincial de la brecha que abrió el diputado radical Facundo Manes dentro de Juntos por el Cambio se quedaron con las manos vacías y la cabeza gacha. “A nadie le gusta dar batallas ajenas”, dijo un protagonista radical del armado electoral para el año que viene en Santa Fe.
La referencia es a aquella entrevista a la que a Manes no se le escapó nada, por el contrario verbalizó lo que -dicen en su entorno- siempre pensó de Macri. “En su gobierno él (el ex presidente) tuvo un populismo constitucional. Hubo operadores que manejaban la justicia, también hubo datos de que se espió a gente incluso de su gobierno”, dijo en aquel reportaje donde comenzó a ser atacado por los periodistas que responden al expresidente. La jugada estaba hecha y se equivocaron los que apuntaron a la “inexperiencia” política del célebre neurólogo. A los pocos días ratificó todas sus críticas y tuvo el respaldo de la Unión Cívica Radical de la provincia de Buenos Aires.
Por aquí todos miraron al intendente Pablo Javkin esperando el apoyo a Manes y hasta quizás aprovechando esa movida nacional para tener más espaldas, ¿o no es acaso Javkin el más “progresista” de los radicales con posibilidades de pelear la gobernación el año próximo? Nada ocurrió. “Si es cierto que Macri se baja de sus aspiraciones presidenciales todo se va a correr hacia el centro. Solos se acomodan los melones”, confió el dirigente del radicalismo que coincide con el silencio del intendente rosarino.
Pero en secreto todos se preguntan qué números está mirando Manes para hacer lo que hizo. No son pocos los sondeos que empezaron a detectar que en medio de la crisis y el desencanto la que crece no es la salida por la derecha extrema; sino que tanta tensión comienza a dar créditos a propuestas más de centro. Y para eso, la coalición también está preparada en Santa Fe.
En esta provincia hay experiencia de años del radicalismo de tener un pie en cada bote. Con el PRO a nivel nacional y con el Frente Progresista en Santa Fe mientras esa herramienta sirvió para ganar elecciones y cosechar cargos.
El asunto eliminación de primarias abiertas a nivel nacional, tampoco entusiasma en Santa Fe. Se sabe que aquí, más allá de los posicionamientos la cuestión requeriría de amplios acuerdos sectoriales que están cada vez más lejos a medida que se acercan las elecciones.
Esta semana las distintas fuerzas políticas aguardan una convocatoria del gobierno de Omar Perotti para que quede explícito el cronograma electoral de la provincia para el año que viene. La constitución provincial le manda al gobernador que los comicios sean separados de los nacionales y hasta le indica el tiempo de separación. Pero nada indica si tienen que ser antes o después de octubre de 2023 cuando están fijadas las generales nacionales. Y esa puede ser una diferencia muy grande.
Tema de campaña
Los que creyeron que el drama de la violencia en la provincia y sobre todo en Rosario, tendría a esta altura otra madurez política para su abordaje, tendrán que esperar unos años más., Entre un gobierno que asegura que ejecutó la totalidad de los fondos que entregó nación (3000 millones de pesos) y una oposición que sostiene contra viento y marea que ejecutó sólo el 10 por ciento (30 millones de pesos) no sólo se plantea una enorme diferencia económica, sino también una sideral distancia política para abordar un tema estructural que no tendrá soluciones a corto plazo.
Todo indica que la inseguridad y la violencia en los grandes centros urbanos de la provincia volverán a estar en el centro del debate electoral. Pero no sólo con propuestas sino para endilgarle al otro los puntos más dolorosos y negativos del flagelo.
Los resultados no aparecen ni siquiera luego de una de las pocas demostraciones de extendido consenso político que dieron los legisladores nacionales por Santa Fe, cuando suscribieron un mismo proyecto para fortalecer a la justicia federal santafesina. Incluso, varios de estos legisladores bajaron proyectos propios para llegar a ese acuerdo. Pero no logra conmover a legisladores nacionales de otras provincias.
Esta semana el gobernador Perotti lo recordó públicamente tras la amenaza generalizada contra los periodistas de Rosario plasmada en un cartel anónimo colgado en la reja de Telefé Rosario. "El mejor homenaje, el mejor pedido de acompañamiento que podrían tener todos en la provincia de Santa Fe, sería que la Cámara de Diputados apruebe sobre tablas el proyecto que todos los legisladores santafesinos pusieron en común para dotar a nuestra provincia de una estructura de justicia federal que nos merecemos", dijo el gobernador.
Con todo, los conocedores de los recodos de la justicia federal en la provincia saben que los recursos y los nombramientos son necesarios pero no del todo suficientes para explicar la claridad que falta en los objetivos de persecución penal en Santa Fe. Los déficits que hubo todos estos años para golpear en lugares certeros a las estructuras narcocriminales que después terminaron en parte acusadas y condenadas por los delitos violentos por la justicia provincial.
Fuente:Rosario12
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